Capítulo 14; mono herido

217 34 1
                                    


• <❇≫───•◦ ❈ ◦•───≪❇> •

El sonido de la campana que anunciaba el fin de las clases nos alertó para guardar rápidamente nuestras cosas, salí de UA con Shiro y Jirou y nos separamos cuando me quedé esperando a Bakugou que caminaba despacio con las manos en su bolsillo —Apúrate, holgazán.

—¡¿Ah?! —Reí con el bramido de katsuki, habían veces que actuaba igual que un perro.

Caminamos juntos hasta el paradero y le dije a Bakugou —En serio me hubiese gustado ir a la cafetería el sábado.

—¿Y qué diablos es más importante que aprobar?

—Sé que es importante y por eso estudiaré por mi cuenta, pero después del festival iré a ver a mamá.

—Tsk, que complicada eres —suspiré y miré de reojo a Bakugou, se había sentado en la banca a esperar el autobús, golpeé su frente estirando mis dedos sólo para molestarlo. Tenía raros impulsos para hacerlo enojar.

—¡Deja de joder! —Bakugou se levantó y comenzó a caminar lejos de mí. ¿Por qué estaba tan irritado? Era enojón pero siempre me seguía mis bromas.

—¡Oye, espera! No me quiero ir sola, necesito molestar a alguien —corrí hasta llegar con Bakugou y lo miré molesta, me enojaba su enojo —Diablos, ¿y yo soy la complicada?

No necesito describir la cara de odio que me dio Bakugou, y bien, tal vez solo yo lo consideraba un amigo, y el solo me veía como una espina en el culo —Esta bien, no pienso insistir, vete solo.

Me di la media vuelta y caminé nuevamente al paradero. No era yo la complicada por querer ver a mamá, el tenía a sus padres juntos y no necesita ir a verlos cada 4 meses o más.

El autobús llegó cuando llegué al paradero y me subí rápidamente, estaba muy acostumbrada a ir con alguien porque me gustaba hablar en el camino, sino hablaba no podía cambiar mi cara de culo —¿Y yo soy la complicada? —Sentí la voz de Bakugou detrás de mí imitando mi voz con sarcasmo, este imbécil.

—¡Cállate!

—¡Tú cállate, bruja!

—¡No soy bruja!

—¡Cállense! —Las pasajeros nos miraron feo y tuve que tragarme hasta la vergüenza que Bakugou no sentía.

Nos bajamos del autobús una paradas más allá y Bakugou dijo —Solo lo diré una vez, si necesitas ayuda para estudiar habla ahora.

—No sigas, te dije que no puedo ese fin de sema...

—¡Otro día!

—¿Otro? ¿No tendrás problemas con tu mamá?

—¿Quién mierda crees que soy? —reí con la mueca que hacia al gesticular y le dije que eligiera un día. Finalmente estudiaríamos desde mañana después del colegio hasta que comenzara el festival deportivo. Cuando llegamos a mi casa detuve a Bakugou —Estás olvidando algo importante.

—No lo he olvidado —hoy era lunes, por lo tanto terminaba el plazo para darnos nuestros consejos.

—Deja de ser malditamente imprudente —dijimos al unísono, supongo que no había nada más que decir. Sin darnos cuenta realmente habíamos arreglado muchos defectos estando al lado del otro, éramos sólo un poco parecidos, lo suficiente para ver nuestros defectos reflejados en el otro.

rιvαlѕ ↯ вαĸυɢō ĸαтѕυĸιDonde viven las historias. Descúbrelo ahora