PADRE DEL TODO|PT2

672 91 81
                                    

INTRODUCIR:LIGHT OF HOPE.

Hace unos años.

La palma de aquella mujer empujo al joven heredero hacia el vacío siendo este, tomado en el aire por su amigo. ―Maestra.― llamo el joven a esta. Frente a esta mujer un caos se alzaba a sus costados. Llamas ardiendo sin cesar, miles de escombros a su alzar y un hombre de pie frene a ella sin rechistar.

―Te dejo el resto a ti.― la mujer comenzo a mirar al frente. ―«Sorahiko, asegúrate de que su sueño se haga realidad».― fue el deseo de su corazón. ―¡Maestra!― exclamo aquel joven entre lagrimas mientras era alejado de su maestra. Repitiendo una y otra vez "Maestra" con la esperanza de poder alcanzarla, ella por fin extendió su mano hacia él.

Apuntando su dedo índice hacia el joven. ―All might.― ella cerro su puño mientras giraba. Con una sonrisa ella lo miro por ultima vez. ―Cuento contigo.― fueron sus ultimas palabras para su heredero. ―¡¡¡¡MAESTRA!!!!― un grito lleno de dolor y impotencia salido desde un corazón roto. El hombre que se llevaba a all might solo pudo dejar salir lagrimas mientras resistía el deseo de ayudar a su amiga.

Aquella mujer se coloco en pose de pelea y alzo su mirada hacia el hombre encima de ella. ―Gracias por tan maravillosa comedia.― expreso con una sonrisa mientras que de su palma rayos negros emergían provocando aquello que todos ya sabemos...

Una historia escrita en piedra.

De entre toda la devastación, aquella mujer yacía en el suelo con un gran hoyo en su abdomen mientras sangre caía de este. Su capa colgada en un pilar completamente rota mientras un fuego abrazador la consumía. Su traje destrozado dejando solo una camisa por encima de este. Frene a ella los pasos de un hombre resonaban en aquel desolador lugar.

Entre risas la mujer hablo. ―L-las c-cosas... n-no serán como... t-tu deseas...― poco a poco ese hombre salio de las sombras quedando frente al cuerpo de la mujer. ―¿Cómo yo desee?― entre cerro los ojos mostrando una expresión de decepción. ―Las cosas jamás han sido como yo desee.― all for one alzo su mirada hacia el cielo nocturno mientras alzaba su mano hacia él.

―Matar, matar y matar... solo en eso se resume mi existencia. ¿Sabes algo, shimura? Estoy cansado.― la mujer comenzaba a ver de otra forma a afo, su expresión, su tono... era como si no fuera él. ―¿Q-que demonios t-te sucede...?― pregunto ella. ―No lo sé. Creo que el tema de tener que asesinar a los portadores durante tantas décadas dejo de ser divertido. Al final siempre será la mismo... incluso contigo. Que a pesar de saber cómo terminaríamos tú eras diferente.― all for one suspiro.

―N-no entiendo ni una p-pizca de lo que d-dices...― expreso la mujer provocando que all suspirara de nuevo mientras se arrodillaba alzando su mano hacia la frente de la mujer. ―Y lo se.― dijo con decepción. ―Ni si quiera yo entiendo. Solo sé que debo seguir adelante. Por que si no luchamos, morimos. Si luchamos ganaremos y si ganamos... viviremos. Espera...― all for one se quedó en blanco.

[¿De verdad esas son mis palabras?]

Nana lo miro confundida. ―¿Q-quien demonios eres?― pregunto la mujer. De nuevo, el suspiro estuvo ahí. Los ojos de la mujer... se abrieron llenos de sorpresa. Ya fuera por los delirios antes de la muerte o por la dopamina en su cerebro... nana estaba presenciado la expresión de un hombre diferente. ―Y-yo soy... un doctor.― con los ojos apagados y la mirada perdida junto a una sonrisa, all for one pronuncio su pasado.

Los ojos de la mujer reflejaron aquella expresión de un hombre que lo había perdido todo. En un parpadeo una descarga eléctrica recorrió su cuerpo hasta llegar al cerebro llevándola a un lugar completamente lejano. Ella mantenía sus ojos cerrados cuando comenzo a escuchar gritos y sollozos provenientes de las personas frente a ella.

VOLUMEN 3: ASCEND.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora