Goma de mascar •Spideypool•

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Wade Wilson era conocido por muchas cosas, principalmente, su mala fama.

Peter Parker, todo lo contrario a él.

¿Cómo fue que terminaron juntos?

Peter siempre había sido un tanto reservado, mantenía al margen su vida tras ser adoptado por la pareja Rogers-Stark.

El privilegio de ser el hijo de tan famoso pareja, también era un peligro pues podía ser un blanco fácil para aquellos que tratarán de buscar lastimar a su familia.

La preocupación de Anthony por su hijo fue inmensa, quería protegerlo a toda costa pero Steve lo hizo entender que era cruel, tratara de mantener al menor en una burbuja.

Fue así cómo consiguió seguir patrullando las ciudad. Muy pocas veces le dejaban estar solo, en ocasiones de fuerza mayor tales cómo estar en misiones.

Para su suerte, el Capitán y el hombro de hierro junto a sus amados tíos estarían fuera por unos limitados días. Fue así, que pudo conocer al mayor peligro de su vida.

Una noche de verano, un callejón solitario y un grupo de tipos acorralando a un desconocido. No era una gran combinación.

Se acercó rápidamente con intención de detenerlos pero fue en vano. Aquel hombre de traje sumamente ajustado cómo el suyo, con una tierna mochila de un personaje gatuno infantil les disparó a cada tipo que trataron de golpearlo, terminando así con sus vidas.

—Esta mierda fue fantástica. —escucho incrédulo. — ¿No lo crees así, arañita?

Salió hacia la luz que daba el faro. Estaba en alerta por cualquier movimiento que diera el contrario.

—Navidad se adelantó, ¿qué me habrá dejado Santa Claus entre esas piernas?— señaló la parte inferior de su cuerpo.

Se avergonzó la instante.

—Arañita, desde aquí noto tu cuerpo tensado. No le hago nada a los niños bonitos cómo tú. Soy Deadpool, cariño. Recuérdame.

No pudo hacer nada, el tipo caminó hacia la oscuridad perdiendo su rastro.

Había oído ese nombre con anterioridad. Recordó a su padre hablando barbaridad y media de ese tal Pool. Se escuchaba a un demente y por lo que presenció era mejor alejarse.

Pero Wade no parecía tener las mismas intenciones.

Después de su encuentro inicial, Wade quería no solo acercarse más al menor, conocer al chico detrás de la máscara era su propósito que si cumpliría de Año nuevo.

Fue difícil, maldecía que el chico siempre estuviera bajo la mira de sus padres y colegas. Necesitaba ser discreto.

Después de analizar los movimientos del joven arácnido supo que una hora antes de ingresar a la torre de los Vengadores le gustaba estar arriba de los edificios mirando el atardecer.

¿Qué tenía de interesante el cielo anaranjado? Era más entretenido ver cómo las palomas dejaban sus desechos sobre las personas.

Fue difícil conquistar al chico, oh claro que lo fue. No lo culpó, la primera vez que se acercó a él se ganó una telaraña sobre su cuerpo y una más pequeña sobre dónde debería estar su boca de no ser por la máscara.

Peter tuvo su momento de debilidad al dejarlo hablar. Quería conocerlo a él, no al héroe, sino la jovencito valiente.

Después de hacer sufrir a Wade con su indiferencia y crueldad, le dio un pequeño avance.

Con el tiempo se dio cuenta que no todo era tan malo... mentira era horrible.

La sensación de ser constantemente vigilado, preguntas totalmente privadas y hasta vulgares, sin olvidar los frecuentes manoseos por parte del mercenario le eran incómodos.

Extrañamente...le gustaba.

Juraba que Wade, cómo le hizo saber su nombre, había jugado con su mente. No estabas cerrado a ser atraído por un hombre, no tenía prejuicios pero se estaba tratando de Wade Wilson o mejor conocido, Deadpool.

Era chicle pegado a su zapato. Molestando casi todo el día, siempre discutían por algo, sus ideas nunca congeniaban. Poder comer algo, era un reto.

Maldijo aquel día que le había dado entrada a su vida. Era insoportable.

Su carácter era odioso pero le gustaba.

Sus chistes eran pésimos aún así se reía.

El descaro nato que tenía no le incomodaba.

Pensó que su atracción sería momentánea, más no fue así.

A pesar de todas sus peleas el lazo parecía hacerse más fuerte.

Las peleas con Wade pasaba a ser más dóciles de aquellas que se perdonan con un helado, una disculpa...o un beso.

Citas, encuentros, momentos románticos fueron avances de su relación.

Sus diferencias seguían ahí, pero las superaban.

El día que formalizaron fue una gran sorpresa para todos, especialmente para Stark. Su bebé, inocente y puro termino al lado de un tipo rebelde e idiota cómo Wade.

Steve trato de ser más razonable, ambos los apoyaron sin antes darle una amenaza al mayor.

—Hazlo llorar y te haré rogar ser mortal. —amenazo con sutileza el Capitán.

Wade pensó que Peter era físicamente a Anthony pero tenía el carácter de Steve.

Pasando un par de meses cómo pareja Peter se dio cuenta de todo lo que había ocurrido en sus caminos. Sonrió al recordar el miedo que le tenía al inicio.

Wade no era malo, simplemente, es un anti-sistemas.

—Al inicio eras una goma de mascar, en mi zapato al caminar. No te soportaba era la verdad pero ahí me di cuenta que te quería.

Confesó sin ningún contexto más que interrumpir la película que veía junto al mayor.

—Me volvía loco cada mes, tu eras insufrible y...vulnerable a la vez, tan tierno, tan besable.— dijo sonriendo. —

Siempre te amaré, Wade Wilson.

El mercenario no entendió las palabras del menor hasta lo último. Beso sus labios fugazmente antes de cargarlo hacia la habitación.

—También te amo, baby boy. Aunque me confundas con tus lindas palabritas.














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