La Muñeca Rota De Malfoy

••28°°

Draco Malfoy.

El desayuno fue incomodo, algo en mi me decía que corriera de ahí a mis padres.

En fin, mi madre estuvo todo el día con Maven, vi a Harry muy inquieto. Sin mas el día paso, Harry estaba durmiendo a Maven junto con mi madre.

-Tenemos que hablar Draco.

Mi padre me saco de mis pensamientos, lo mire asintiendo, el se quedo pensando en algo. 

Supongo que se quedo pensando en sus palabras, se aclaro mi garganta y me miro analizándome.

Bien supongo que esto debía que ser bastante serio como para que me analizara y pensara sus palabras.

-¿Ya pensaste en que hacer con Maven?.

Su pregunta hizo brincar a mis sentidos, inmediatamente clave mi mirada en la suya. 

-¿A que te quieres refirieres con eso?.

Mi padre simplemente se encogió de hombros, me sentía nervioso.

-La gente no se puede enterar de su existencia y yo no quiero que des en adopción el niño.

NO, NO, NO, NO.

-Largo, no los quiero ver cerca de mi hijo.

Me pare de golpe, tenia que huir con Harry yo tenia que...

-Olvidate.

Me pare de golpe aturdido, tome mi cabeza entre mis manos, me gire un poco y me encontré con la mirada penetrante de mi padre.

-¿Ya no iras a ver a Maven?.

Pregunto mi padre con su ceja alzada.

-¿Yo?.

Pregunte y mi padre rodo los ojos, asintió con obviedad y pude sentir la vergüenza inundando mi ser.

-No ya no.

Con eso simplemente me senté de nuevo en mi  lugar.

-Te estaba comentando que tal vez me mudare por un tiempo a la mansión de Francia, tengo algunos asuntos muggles que arreglar.

No me acordaba de nada de lo que había paso como desde hace 2 minutos.

¿Acaso me dijo eso o me lanzó algún hechizo?.

-Por Merlín Potter te estupidiza las neuronas, lo acabo de decir, ¿Acaso no me estabas escuchando?.

Use toda mi fuerza de voluntad para no rodar los ojos. No no lo estaba escuchando solo estaba pensando en el sufrimiento de mi esposo.

-Claro Padre no te preocupes, yo lo entiendo perfectamente bien.

Mentira, claro que no lo hago, jamás lo entenderé.

-Bueno, es demasiado tarde solo quería ver como reaccionabas hacia esto.

Mi padre se levanto del sillón y se marcho de ahí a paso firme, solté un pesado suspiro, jamás en mi vida me había sentido tan agobiado con mi familia presente.

Después de unos minutos subí las escaleras y una vez que ya estaba en la habitación mire a Harry quien estaba mordiendo sus uñas.

El ya estaba recostado en la cama, me recosté a su lado y lo abrace, acunando su cuerpo, una mano empezó a acariciar su cabello para que se relajara.

El se dio la vuelta y me abrazo hundiendo su rostro en mi pecho.

-¿Que tienes?.

Pregunte, Harry se quedo callado por un montón de tiempo.