67°

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Wendy Li, una bella joven, largos cabellos que siempre estaban atados en una coleta, labios rojos y delgados, sus ojos parecían tristes pero era lo más hermoso cuando la veías fijamente, y su figura ni hablar. Casi parecía una modelo de revistas, esas que en primera plana ponían a las mujeres más hermosas del país. Bueno, ella era la nueva secretaria de Wang Yibo. Ambos se habían tomado un gran cariño, y eso, agregando que al castaño no le gusta estar cerca de las mujeres. Éste caso era diferente.

- Puedes pasar - dijo Yibo mientras se quitaba la chaqueta y le abría paso al departamento que compartía con el azabache y su hijo SiZhui.

- Pero es que es tan bonito. ¿Seguro que no hay nadie? - ella dejó su chaqueta roja en el perchero, se acomodó la blusa blanca que desaparecía en su cintura gracias a la falda roja que se ajustaba a ésta y llegaba hasta sus perfectas y blancas rodillas.

- No, le dije que fuera con su hermana y padres.

Ambos se miraron y sonrieron, pasaron por el pasillo que los llevaba a la sala y comedor, y Wendy se acomodó en el sofá. Yibo se desvió hasta la cocina para ofrecerle un vaso de refresco, al llegar con la castaña, le dejó el vaso sobre la mesilla de centro, y se sentó a la par.

- Entonces...¿cómo harás con esto?. ¿Se lo explicaste bien siquiera?.

- Sólo le dije que fuera con sus padres..- se encogió de hombros e hizo un gesto arisco. Estaba entrando en calor.

- ¡Reverendo gilipollaz! - Wendy tomó el primer cojín y se lo lanzó en la cabeza a Wang Yibo que, cuando el golpe hubo pasado, le dió una mirada asesina pero no hizo nada.

- ¿Me ayudarás o no?.

- ¿Ni con él puedes dejar de ser tan frío?. Vaya lío. Si fuera tu mujer, ya te hubiera mandado a pelar huevos. - se levantó y analizó el lugar. Es que, a parte de ser secretaria, también había trabajado para ser decoradora de hogar, por eso mismo le hacía recordar a sus primeros días de matrimonio. - ¿tienes el anillo, verdad?.

- Mmn.

La castaña aplaudió una sola vez, y se bebió el vaso de jugo de una sola. Yibo rodaba los ojos en su sitio, y se levantó. - Puedes cambiarte en ese baño, yo iré a mi habitación.

- Vuestra habitación.

- Mmn.

Ambos se metieron a los baños diferentes y se pusieron ropa ligera para poder decorar el lugar. Yibo había solicitado la ayuda de Wendy ya que Xichen también estaba perdido en el tema. Ninguno sabía cómo pedir matrimonio de una manera romántica, o...bonita. Así que no dudaron en pedirle el favor a la chica que sin dudar aceptó. Ésta tenía sus veintiocho años, era casada hace más de cinco años y tenía un bebé de tres años.

Ahora, Wendy salió rumbo hasta el estacionamiento y fue hasta el auto del menor, abrió la cajuela y sacó su maleta, éste era de metal y con ruedas, también podía decir que estaba siendo pesado sacarlo de allí, pero se las ingenió para entrar al ascensor y llevarlo hasta el departamento de la joven pareja.

- Es que siempre me ha emocionado ayudar en este tipo de cosas - habló consigo misma, abrió la maleta y sacó casi todo lo que había ahí adentro. - ¡Oye, niño, ven aquí!.

Yibo dejó el cuadro que estaba en la mesa de noche, en ese, Xiao Zhan sonreía recién levantado. Era su cuadro favorito, por lo que lo dejó con cuidado, no sin antes darle un beso. Se revolvió los cabellos y soltó un bostezo, arrastró los pies hasta la sala principal, y levantó una ceja al ver a Wendy poniendo música.

- ¡Venga, venga tío, ésta noche le harás bailar a ese bombón que tienes como novio! - se movió al compás de It's Time, se volvió hasta el menor y le regaló una sonrisa, haciendo que el contrario negara y también le devolviera el gesto - piensa en una canción, la mejor, una que describa cuanto...

Destiny - YiZhan Where stories live. Discover now