El Perfecto Italiano

CAPÍTULO TRE

ANTONELLA

Hace bastante tiempo que baje a la pista de baile, estaba sonando una canción movida y digamos que estaba un poco pasada de alcohol, empecé a menear con sensualidad al compas de la música, cuándo siento una mirada penetrante en mí. Busco a la mirada pero no la encuentro.

Sigo Bailando mientras mis manos recorren de manera sensual mi cuerpo, estaba tan concentrada en mis movimientos hasta que siento una mano en mi cintura que hace que me de la vuelta, pagando mi cuerpo con el otro cuerpo, levanto mi mirada hasta que me encuentro con unos profundos ojos negros. Observo todo su rostro y quedo sorprendida es el hombre de la cafetería.

-- Disculpe Señor --digo nerviosa por su cercania.

-- Porque la tendría que disculpar? --pregunta con su voz ronca.

Salgo de su agarré y lo observó.

Lleva puesto una camisa blanca, que le queda explosivo, sus músculos se marcan a la perfección tiene unos tubos, a la camisa lo acompaña un pantalón de vestir marrón que le queda muy pero muy bien.

-- Le gusta lo que ve? --podría apostar que vi aunque sea una mini sonrisa

-- Eh...? Creó que me tengo qu..ue ir, hasta luego.

Estoy por volver con Emily cuándo siento que me agarran de la mano, no se como fue pero estoy de vuelta pegada a su pecho.

Levanto la mirada, y él esta ahí mirándome con su penetrante mirada que pone mis bellos de punta, su mano derecha la coloca en mi cintura donde hace un breve apretón que hace que lo mire sorprendida. Su otra mano hace la misma acción pero un poco más en la parte baja de la espalda.
Sigue con su mirada en mí cuando empieza a moverse, lo miro y siento a mi cuerpo reaccionado a su baile.
Escuchó la música de fondo y es una bachata, con timidez voy subiendo mis manos hasta llegar a su cuello, donde lo acaricio con los pulgares, su piel es muy sueve.

Empezamos a bailar despacio, nuestros movimientos son lento, me siento una princesa en brazos de su principe, pero se que esto es solo por el alcohol que llevo en mí, y para él esto no es nada. Siento como me atrae más a su cuerpo, no se si es muy rápido pero me siento demasiado bien con él, en sus brazos tengo seguridad y paz, no se si será el alcohol que me hace sentir esto pero lo quiero disfrutar aunque mañana me lamente.

Su mano derecha sube por mi espalda hasta que llega a donde termina  mi cabello lo empieza a acariciar, se acerca hasta el hueco que se forma en mi cuello y puedo sentir su respiración cerca.