Lo que habita en Neverland (The Promised Neverland)

Grace Field House

Habían pasado algunos días desde el ataque de locura de parte de Cislo, luego de aquello los niños no habían sabido nada de él. Pero era mejor de esa manera, mantenerlo lo más lejos posible era la mejor opción para todos, su comportamiento se había vuelto bastante impredecible en el último tiempo.

Esa día, Emma se había pasado toda la mañana limpiando y ocupándose de la casa como era habitual para evitar problemas con su padre.

 Después de terminar fin se pudo sentar a tomar desayuno con tranquilidad, mientras comía galletas despreocupadamente leía las cartas que habían llegado aquel día, específicamente las cartas enviadas de sus tíos a quienes quería y extrañaba tanto, extrañaba discutir sobre cualquier estupidez con Yuugo quien casi nunca la llamaba por su nombre, si no como "Antena", motivo de frecuentes discusiones divertidas entre ambos.

Y por otro lado estaba Lucas quien era mucho más tranquilo y tenía el papel de apaciguador entre ambos para evitar que armaran algún mayor escándalo.

La últimas líneas de la carta le llamó mucho la atención:

"Pronto te daremos una genial sorpresa Emma, pero aún no te podemos dar la noticia, debes ser paciente!.

Nos vemos luego querida Emma-Lucas.

No hagas estupideces Antena, cuídate- Yuugo.

-Uhmm ¿Sorpresa?? ¿Qué será? vaya no me gusta esperar! siempre me tienen algo genial que decir!-exclamó Emma con entusiasmo.

Deseaba que, cuando terminara todo "eso" poder ir a visitarlos por fin, por su supuesto que extrañaría a sus amigos por esos días, pero también se alejaría de su padre y el infierno que era vivir con él y en esa casa, cada día él estaba más y más agresivo y controlador con ella,  por lo que intentaba estar fuera de casa lo más posible, el ambiente se volvía más desagradable y denso.

Su rutina en vacaciones era casi siempre la misma, levantarse muy temprano luego de que su padre se fuera a trabajar, oportunidad que ella aprovecha para hacer todos los quehaceres del hogar para luego salir con sus amigos a jugar, luego de eso tenía que volver a casa a cierta hora para que cuando Lewis volviera estuviera toda la comida servida perfectamente para él y todo estuviera en su lugar.

Siguió comiendo su sándwich mientras escuchaba vagamente lo que se hablaba en las noticias de la televisión, últimamente los casos de asesinatos y crímenes se habían calmado un poco, la ciudad había estado relativamente tranquila, deseaba pensar que los ataques de Pennywise habían cesado y podrían estar tranquilos el resto de la temporada, pero en el fondo sabía que no podía bajar la guardia por que esa presencia maligna seguía presente en todos los lugares y llenando cada hueco de la ciudad, como aquella vez que tuvo la fuerte sensación de que algo la miraba en los Barrens hace algunos días y por el simple hecho que la constante incertidumbre e inquietud los invadía a todos por igual, Pennywise estaba ahí, en todos lados y en cualquier momento se iba a manifestar.

Miró la televisión al escuchar el aviso de "Noticia de último minuto" la cual llamó fuertemente su atención.

-¿Pero que demonios..?

Sus ojos se abrieron ampliamente, sorprendida.

El periodista se encontraba afuera de el ex-orfanato de Grace Field, detrás de él se veía la gran casona envejecida y maltratada por el tiempo, el pasto se veía igual de largo y descuidado que siempre, Emma se percató enseguida que lo que había dicho Gilda era muy equivocado, Grace Field fue remodelado ni restaurado, siempre estuvo igual de abandonado y asolado.

-¿Qué demonios fue lo que vio Gilda ese día?-se preguntó.

Lo que Emma veía en la pantalla distaba demasiado de la descripción de Gilda, la casa pintada, más iluminada, restaurada, el pasto siendo cortado y con menos basura.