夢夢 𝘠𝘰𝘰𝘯𝘨𝘪 𝘙𝘦𝘢𝘤𝘵𝘪𝘰𝘯'𝘴 (En edición)

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❀;; ❝ Strong illusions ❜❜

Triggered warning:
↬Uso de drogas.
↬Mención del suicidio.

Narrado por Min Yoongi.

꒦꒷꒦꒷꒷꒦꒷꒦꒷꒷꒦꒷꒦꒷꒷꒦

Ese mes sin poder dar una pincelada sin arrepentirme fue duro, y aunque hice el esfuerzo, lo juro, pero después las dos dosis de pastillas solo sentía que todo mejoraba.

Mi mente se iluminaba y sentía que mis manos ya ni las controlaba yo, se movían solas, se guiaban con el ritmo de la canción que sonaba en mi cabeza.

Ni tiempo de respirar me permití, era una obra maestra, la más hermosa que en mi vida había hecho.

Las piernas de la chica que trataba de pintar se hicieron un poco más gruesa, hasta que me di cuenta que era un hombre, no puse los pechos y agregue un bulto en la lencería de mujer.

Termine con el dibujo y admire al chico que coloque en una copia exacta de mi sillón, semi-desnudo, tan delicado como una mujer, con unas ligeras curvas y cintura bien definidas.

La ereccion que le dibuje salía por el borde de la tanga rosada semitransparente, era tan realista que ahora una ereccion se apareció en la pijama que tenía puesta desde hace dos semanas.

Estaba envuelto en mi adicción y pequeño abismo de depresión, uno que me impedía salir de casa o bañarme, o hacer cualquier cosa.

Me sentía encerrado en mi propia mente, reprendiendome por mis errores pasados y luchando por no cometerlos nuevamente.

Pero ver esta pintura me daban unas ligeras ganas de activarme, me sentía orgulloso de mi y quería premiar a mi cuerpo.

Después de darme un baño, limpie un poco mi pequeño departamento, me cocinaria algo rico, pero necesitaba ir a la tienda de conveniencia antes.

Así que tome mis llaves y mi tarjeta bajando con una bolsa reciclable.

La campanilla de la puerta me hizo mirar a todos lados cuando entré, seguí caminando y hechaba lo que se me antojara dentro de la bolsa, caminaba rápidamente entre pasillo y pasillo, hasta que de reojo vi una silueta entre un par de pasillos que saltaba, me detuve pensando el perfecto parecido que tenía con el chico que había dibujado hace menos de una hora.

Sacudi mi rostro y regrese a mirarlo de nuevo, pero ya no había nadie ahí, así que simplemente talle mis ojos un poco mareado por el efecto de esas pastillas que seguramente seguían en mi organismo y continúe mis compras.

El pitido de la máquina para cobrar en la fila que estaba me volvía loco, no estaba seguro si tendría dinero para pagar todo, la fila era larga y no quería que todo el mundo me viera.

Hice todo lo más rápido y regrese a casa, cocinandome y durmiendo después de comer tranquilo.

En mis sueños apareció el mismo chico, esta vez si estaba en el pasillo del supermercado, tomando una bolsa de mandarinas que vienen previamente empaquetada.

Sabía perfectamente que era un sueño, ya que parecía más una ilusión que otra cosa, algo difícil de explicar.

Pude hablarle y juro que su voz era tan dulce como un caramelo de sandía.

Al día siguiente volví a ir a esa tienda, esperando algo, pero nada. No sucedió nada hasta que volví a tomar las pastillas.

En mi cama, boca arriba y con la cabeza colgando por el borde de esta, escuché las pisadas ya que mis ojos estaban cerrados, sintiendo como la sangre fluía por cada vena de mi cuerpo, tal y como si pasaras por un tobogán lleno de agua, me sentía en ese maravilloso viaje infinito.