"¡Lan Zhan! ¿Te gusta el BL?" ✧ WangXian [COMPLETA]

32. Otra primera vez

Advertencia: este capítulo tiene algo (un poco nomás) de contenido explícito. Leen bajo su propia responsabilidad ♡(ӦｖӦ｡)

La primera vez que Lan Zhan y Wei Ying se acostaron, sus sentimientos no eran claros.

Ahora, aún seguían sin serlo del todo, pero la situación era diferente.

El cuerpo de Wei Ying se había acostumbrado de cierta manera al del otro hombre, más de lo que le hubiera gustado en un principio.

En la misma posición, Wei Ying repartía besos por todo su rostro, su frente, nariz y mejillas. El ambiente en la habitación subió,un agradable calor rodeándolos.

Lan Zhan se dejó hacer, a la vez que posaba ambas manos sobre sus caderas.

"No me voy a ir a ningún sitio" Wei Ying rio entre beso y beso al notar la fuerza con la que Lan Zhan lo sujetaba.

Wei Ying acarició su nariz con la suya propia, y Lan Zhan se sonrojó ante este gesto tonto pero tierno. Después, con ambas manos acunó su rostro y continuó besándolo.

Gracias a la falta de lejanía, Wei Ying podía sentir los latidos acelerados del corazón. No sabía si eran los suyos propios, los de Lan Zhan, o quizá, la mezcla perfecta entre ambos.

En un momento de descuido, las posiciones de invirtieron. Lan Zhan quedó encima.

"¿Al igual que siempre? Nunca me dejas estar arriba mucho tiempo" Wei Ying rio y miró hacia otro lado. Las ansias de Lan Zhan siempre lo controlaban, siendo imposible evitarlo.

Lan Zhan aprovechó y lo sujetó, para empezar a repartir besos por todo su cuello, dejando nuevas marcas difíciles de borrar. Wei Ying suspiró, los besos de Lan Zhan se sentían…

Muy bien.

No sabía donde o como Lan Zhan había aprendido a besar, o si mejoraba en cada momento.

De todas formas, las quejas estaban prohibidas.

Pronto, los besos se hicieron insuficientes, y la ropa acabó desordenada por el suelo.

A pesar del deseo del momento, Lan Zhan siempre procuraba ser lo más cuidadoso posible, ya fuera preparando a Wei Ying y calmando los posibles nervios con besos dulces.

Tan amoroso, que Wei Ying podía percibir las famosas mariposas en el estómago que jamás sintió con otras personas.

Si esto es lo que llaman amor, Wei Ying quiere que Lan Zhan continue a su lado mucho tiempo.

Porque de forma inesperada, Lan Zhan había entrado a su corazón para nunca más irse.

Era justo así.

Wei Ying se relajó, a la vez que sujetaba la sábana debajo suya. Los ojos de Lan Zhan observaban cada detalle, mientras entraba en su interior.

En verdad fue tan diferente, los dos cuerpos juntos, entendiéndose y amándose, porque así era la mejor manera, la forma correcta.

Cuando estuvo más tranquilo, el conocido placer llenó a Wei Ying. Sus caderas estaban flojas, recibiendo todo de Lan Zhan, enredándose en besos desordenados.

Wei Ying solía decir muchas tonterías en momentos así, solo que en esta ocasión no le fue posible. O más bien, quería conservar la ocasión.

Lo que si dijo cuando acabaron fue...

"Ah, Lan Zhan, te amo"

Incluso él mismo se sorprendió. Su mirada expectante aguardaba a la reacción de Lan Zhan. Por otra parte, Lan Zhan juraba que su corazón se había saltado unos cuantos latidos.

¿De verdad dijo...?

Viendo los ojos de Lan Zhan llenarse con un brillo especial, Wei Ying sonrió y repitió esas dos palabras.

Ya lo tenía claro. Ya no tenía miedo.

"Wei Ying tú…" Lan Zhan quiso decir algo, solo que las palabras estaba desordenadas.

"¡Está bien! ¿Vamos a quedarnos aquí todo el día? Has dejado salir mucho, me siento incómodo" Wei Ying comentó perezosamente.

Y el momento tierno duró poco, pero ese "te amo" hizo a Lan Zhan la persona más feliz. Por lo que pronunció con seguridad:

"Wei Ying, yo también te amo"

El idiota de Wei Ying se convirtió en un tomate con dos piernas, mientras era cargado por Lan Zhan en dirección al baño.

Al final, el baño fue retrasado, y sustituido con besos dulces.

Nota del autor:

Tómense esto como un regalo atrasado de navidad ( ˘ ³˘)

Hay una historia que se está apunto de terminar, pero no les voy a decir cual es.