AL OTRO LADO: PARTE FINAL

Episodio 31: "Compasión"

Sus sentimientos eran obvios, quería mucho a Glass y temía por su vida. Levitt conoce a Jasper desde que nació y mientras crecía se volvió alguien que no le importaba las creencias, sólo fingía que las seguía por su padre, para que confíe en él. Es una persona cruel y despiadado, hace cualquier cosa con tal de conseguir lo que quiere.

No le importó sus amenazas, Levitt de inmediato fue dónde Glass y le contó todo. Lo que no fue una buena idea, Jasper logró escucharlo. Glass no le intimida y pide que se calme y además, le agradece.

Clarke y demás siguen al Pastor y sus discípulos. Llegan a la sala principal. El discípulo Anders se acerca a la piedra de la anomalía. El Pastor del futuro se acerca a Bellamy, se para a su costado.

—Es bueno volver a verte, Bellamy Blake. — dice el Pastor del futuro con una sonrisa. — Mira, en el futuro tú eras uno de mis discípulos más fieles, creías en la trascendencia por completo e ibas a ayudarme y apoyarme hasta el final.

—Si, eso era en el futuro. Yo no soy así. — afirma Bellamy.

—¿En serio crees eso? Yo veo en tus ojos lo que viviste en Etherea aún te tiene en duda. — dice el Pastor del futuro.

—¿Cómo sabes eso? — pregunta Bellamy sorprendido.

—Emilio lo contó. Viviste algo que no puedes quitarte de la cabeza. Viste a gente querida, esa figura que te dio paz, algo que querías desde hace mucho. Yo sé que alguna parte de ti cree en la trascendencia y que también quiere saber la verdad. — responde el Pastor del futuro.

Bellamy sólo le mira serio, pero por dentro lo deja confuso. Dentro de él piensa en que la trascendencia puede ser real por lo que vivió en Etherea y haber visto a su madre y a Raven ahí.

—Yo nunca.... — dice Bellamy, pero el Pastor del futuro le interrumpe.

—Nunca lo contaste, pero en el futuro lo viviste y me lo contaste. Aquí también pasaste lo mismo, llegaste a Etherea. — dice el Pastor del futuro.

—Si, pero en este tiempo no permití que eso ocurriese. — comenta Madi del futuro.

—Así es. Destruiste mis planes, pero mira.... Al final estamos aquí después de todo. — dice el Pastor con una sonrisa.

—La diferencia es que no habrá ninguna muerte innecesaria. — dice Clarke.

—¿Dónde está Levitt? — pregunta Glass, mientras lo busca por todos lados.

—Jasper tampoco está. — dice Octavia.

—¡Maldita sea! — dice Glass corriendo hacia los pasillos.

—Vayan tras ella. — ordena el Pastor a sus guardias.

Glass corre y se queda aterrada al ver a Levitt sentado en una silla, sangrando, amarrado de pies y manos y una cinta en su boca. Lo han golpeado varias veces. Ella de inmediato va hacia él para liberarlo. Todos se quedan sorprendidos.

—Fue Jasper. — dice Octavia. — Él hizo esto a Levitt y mató a Emilio. ¿Esto es su por toda la humanidad?

—Se matan entre ustedes. — dice Clarke.

—No hables así. Jasper no hizo eso, ustedes mataron a muchos amigos. Lo vimos en la memoria de Octavia y Glass. — dice Maya.

—Ustedes son personas que matan a los suyos por conveniencia. Dan asco. Son bestias. Completamente dependiente de sus sentimientos, priorizando sus deseos propios por sobre las necesidades del resto. No merecen la Compasión de nuestro pastor. — dice Anders furioso.

—Si, tienes razón. Esto debe acabar ahora, solo hemos perdido tiempo. — dice Echo furiosa, saca un cuchillo y le corta la garganta a Anders.

Todos se quedan desconcertados, el guardia con su brazo le apunta para matarla, pero Bellamy logra empujarlo para que falle el disparo. Clarke saca su pistola y le apunta a los demás, pero el Pastor detiene todo el alboroto.

—¡Basta! — ordena el Pastor. De inmediato los guardias se detienen. Clarke sigue apuntando con su arma. — Acaban de matar al discípulo Anders. Esto es lo que no queríamos, acaban de asesinar sin ningún motivo. Esto termina aquí.

—¿Qué quieres decir? — pregunta Murphy.

—La muerte de Anders fue algo que no debió pasar, algo innecesaria. No les hizo ningún daño, pero ustedes volvieron a cometer genocidio. Iremos a Sanctum, tendremos la flama y esa guerra final empezará. Cuándo termine, sus pensamientos egoístas terminarán. — afirma el Pastor.

—¿Qué te sucedió? — pregunta Glass.

—Fue Jasper, me golpeó. Hizo todo esto porque descubrí que él había matado a Emilio. — responde Levitt levantándose.

—¿Te das cuenta? Al parecer no somos los únicos que matamos por beneficios propios. — dice Clarke seria.

—Tu hijo mató y torturó. ¿Es digno de esto? — pregunta Octavia.

—No hablen así. Levitt es un traidor. Ahora es parte de ellos. — dice Maya.

—¿En serio creen eso de mí? — pregunta Jasper, apareciendo con una sonrisa, como si nada hubiera pasado.

—Jasper, hijo. ¿Hiciste todo eso? — pregunta el Pastor.

—Si, mi Pastor. Emilio iba ayudar a escapar a ellos y Levitt nos traicionó al darles información y bueno, vio lo que hice. — responde Jasper. — Todo fue por salvar nuestras creencias, mi Pastor.

—¿En serio? ¿Va a creer sus mentiras? — pregunta Bellamy serio.

—Le cree. — afirma Gabriel.

—Esto se resolverá al final de la guerra. Trascenderemos y todo se verá al final. — dice el Pastor. — Es hora de irnos.

Minutos después, todos están en la sala principal. Haciendo dos filas. Clarke se acerca a Bellamy, Octavia y Glass.

—Al llegar, necesito que cuiden de Madi, la lleven a un lugar seguro. Acabaremos con ellos en Sanctum. — dice Clarke.

—Estarán con guardias todo el tiempo, ¿cómo lo haremos? — pregunta Octavia.

—Déjenme eso a mí. — dice Murphy. — Puedo hacer una trampa.

—Levitt vendrá, así que nos ayudará también. — afirma Glass.

—Bien. La prioridad es Madi, atentos. Atacaremos en el primer momento. — dice Bellamy. — Hay que tratar que Echo, Gabriel y Madi nos ayuden, pero están en la otra fila.

—Sabrán que hacer cuándo llegue el momento. Hay que cuidar a nuestra hija. — dice Clarke mirando a Bellamy, él asiente.

Levitt toca los signos de la piedra y la anomalía aparece. Clarke y demás se ponen los cascos y junto al Pastor, Jasper, Maya, el Pastor del futuro, Levitt y los guardias entran a la anomalía.

Todos salen de la anomalía y ahora están en la sala del palacio. Pero todos quedan sorprendidos al ver sangre en el suelo, gente muerta, caos y destrucción.

—Oh Dios. ¿Qué pasó aquí? — se pregunta Clarke asombrada.