AL OTRO LADO: PARTE FINAL

Episodio 41: "Sangre en las manos"

Murphy junto con Octavia vigilan en la noche. Cada uno habla lo ocurrido, sobre cómo murió Madi y todo lo que está a punto de suceder. Las armas han sido repartidas a todos para la última guerra.

—¿Cómo crees que termine esto? — pregunta Murphy.

—No lo sé, pero no creo que termine bien. La muerte de Madi nos afectó a todos y eso será la causa de esta guerra. — afirma Octavia.

—Al menos lucharé a tu lado. — dice Murphy mostrándole una sonrisa. Octavia también le sonríe.

Glass por su lado está en el bunker con Levitt. Ella está sentada, en su mente no puede sacar las imágenes de como Madi estuvo ahí sentada, sufriendo y sólo llorar. Siente frustración de no haber estado ahí para ayudarla, compensar todo lo malo que le hizo. Levitt al ver eso, se acerca y pone sus manos en la de ella. Ella lo mira a los ojos y al verla sabe que sufre por la muerte de Madi.

—Glass, no debes culparte. Si hubiera pasado una oportunidad para que la salvaras, estoy seguro que lo hubieras hecho. — afirma Levitt.

—Le hice mucho daño, Levitt. Nunca pude disculparme o hacer algo bien por ella. — comenta Glass con lágrimas en los ojos.

—Ella sabía que la querías, lo sé. No te tortures más. — pide Levitt, acariciando su cabello.

—Gracias. — dice Glass sin dejar de mirar sus ojos, pero luego se acerca a sus labios para besarlo.

Lo tomó por sorpresa, pero Levitt sigue el beso. Poco a poco se vuelve más intenso y se empiezan a quitar la ropa, Glass se quita todo para al final estar desnuda y volver a besarlo, pasaron el momento juntos.

Indra vigila el lugar, pero algo raro empieza a pasar. Desde lejos ve una luz verde. Le llama la atención eso y decide seguir la luz. Lo que llevaria bastante tiempo de caminar. Se va sin decir nada más.

Clarke y Bellamy están en dónde estaba la cabaña. Están parados, junto a la tumba de Madi. Los dos en silencio, cada uno guarda sus palabras en su mente. Clarke lo mira de brazos cruzados. Pero Bellamy no desvía la mirada de la tumba.

—Bell, debemos hablar de algo. — dice Clarke, rompiendo el silencio.

—¿Qué sucede? — pregunta, pero no desvía la mirada.

—Hay que volver a Sanctum. Nuestra hija quería muchos ahí, también a Picasso. Esa gente estará bajo las órdenes de Sheiheda. Hay que salvarlos. — responde Clarke.

—Clarke, somos pocos. Si vamos a ese lugar, moriremos. Lo mejor es quedarnos aquí, y salvar a los nuestros. — afirma Bellamy serio.

—Ellos también son nuestra gente, debemos ir. — dice Clarke molesta.

—¡Qué no! Entiéndelo, no quiero que nadie más muera. — dice Bellamy furioso.

—No lo puedo creer. Madi estaría decepcionada de ti. — afirma Clarke.

—No metas a mi hija. — dice Bellamy, sintiendo ese dolor.

—Ella los quería, dio la vida para que no hagan daño a nosotros y también a ellos. Iremos a salvarlos con o sin tu ayuda. — al decir eso, Clarke se retira molesta.

Bellamy resopla y grita furioso. Todo se le viene encima, la muerte de su hija y más cosas. Toma aire y se echa junto a la tumba de Madi.

—Te vengaremos, Madi. Lo prometo. — susurra Bellamy.

Clarke camina por el bosque por largos minutos, hasta volver con los demás que están afuera. Glass se acerca y la abraza.

—¿Y Bellamy? — pregunta Glass, al no verlo.

—Él.... — iba a responder Clarke, pero justo aparece Bellamy.

—Hola, hermano. — dice Octavia feliz.

—¿Están todos bien? — pregunta Bellamy.

—Si, lo estamos. ¿Tú cómo estas? — pregunta Murphy curioso.

—Mejorando poco a poco. — responde Bellamy no de todo convencido.

—¿Dónde está Indra? — pregunta Clarke.

—Cierto, no la veo desde la tarde. — dice Echo.

—Tampoco está vigilando. — avisa Levitt.

—¿Cómo? ¿Dónde se metió? — se pregunta Gaia.

—De acuerdo. Haremos dos grupos, lleven un walkie - talkie y avisen. — ordena Clarke.

Murphy coje el walkie - talkie y hace grupo con Gaia, Octavia y Echo, mientras Clarke hace grupo con los demás. Ya es de noche y que no esté es preocupante. Algo raro ya está pasando aquí. Avanzan, pero Clarke y su grupo son cegados por la luz verde, se tapn los ojos ya que esa luz es potente. Al cabo de unos segundos, desaparece y ya no hay nada. Todo esto es raro.

—¿Qué acaba de suceder? — pregunta Clarke confusa.

—No lo sé. Esa luz parecía a la anomalía. — comenta Glass.

—Hay que encontrar a Indra de inmediato. — dice Bellamy apresurado.

Indra camina por otro lado del bosque y llega a esa luz verde. Es como un tornado, pero verde con una luz potente. Su cuerpo se acerca, no sabe por qué se quiere acercar, pero algo la obliga. Cuándo está cerca de tocarlo, alguien le habla. Al girar Indra se queda en shock en verla. Esto le parece imposible.

—¿Lexa? — dice Indra sin creerlo.