Cosa del destino.

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(El sueño de Abril)

-¡La niña delira!- gritó la mucama, con sus cabellos envueltos en llamas y estas a su vez, bailando a grandes alturas.

Un hombre de fuego que vestía una especie de bata de doctor color hueso, asintió mirando de reojo a la niña, que yacía sentada en un rincón mientras su hermana menor la miraba con preocupación.

-No lo entiende, doctor, su abuela no nos creyó, pero los padres de la niña lo han notado de inmediato- explicó la mucama, aterrada del miedo.

-Ya deja al doctor- interrumpió la abuela de las niñas, que entraba a la habitación con su tierna cara arrugada y su preciosa capucha colgando del cuello, mientras sus ojos ardían intensamente con una expresión alegre en el rostro.

-Señora- saludó el doctor mientras mostraba una leve reverencia con la cabeza.

-Pase a la oficina- pidió la anciana —Yo le explicaré lo que pasó, luego podrá darme su diagnóstico-

-Como guste

La mucama se quedó con la boca abierta, pero no replicó ni un instante, y antes de que el doctor y la viejecilla desaparecieran, se marchó del lugar con la excusa de que le quedaba mucho que limpiar.

Al entrar a la oficina, las puertas se cerraron. El lugar era alumbrado por un candelabro que colgaba del techo, todas las paredes estaban cubiertas de grandes libreros, todos estos con libros de diferente temática, al fondo, un escritorio de cristal con múltiples velas encendidas que rodeaban toda la orilla.

-¿Gusta sentarse?- preguntó la abuela.

-Gracias- respondió el doctor —Ahora, hábleme de la niña ¿Por qué dicen que actúa de manera extraña?

-Nada de eso, doctor- rio la mujer —Es una niña, y como todos, tiene una gran imaginación, dice que conoció algo llamado "Fantasma", supongo que un amigo imaginario o algo así

-¿Alguna idea de cómo pudo haber creado a ese ser?

-Bueno, desde más pequeñas, a mis nietas les ha encantado leer, a ella le gusta más lo anormal, ya sabe, criaturas místicas, inexistentes

-Debo suponer que piensa que solo es su imaginación

-Usted es el doctor, dígame, ¿Cómo una niña tan pequeña puede decir algo así? Yo solo lo puedo explicar con la imaginación que posee

-Tiene usted razón, he hablado con la pequeña, no muestra signos de esquizofrenia, psicológicamente está sana, por el momento la única explicación es la imaginación pero...

El doctor guardó silencio, no era la primera vez que escuchaba la palabra "fantasma". Nadie parecía saber lo que significaba, no había datos sobre ellos, pero últimamente muchos niños habían estado repitiendo esa palaba extraña, pero era imposible que la hubiesen escuchado de sus conocidos.

Como él era un ser de mente abierta, no descartaba el hecho de que tal vez, los niños supieran algo que los adultos no. Como médico, le parecía imposible la existencia de algo como los "fantasmas", pero como la criatura de fuego que era, creía en todo lo que se podía nombrar.

Se escuchó la risa de la niña en cuestión, debía estar jugando con la hermana, era lo más probable.

Ambos adultos se sonrieron y salieron de la oficina, cuando encontraron a la pequeña, ella se volteó repentinamente hacia ellos con una expresión divertida. Al no ver a su nieta menos, la anciana preguntó:

-¿Dónde está tu hermana?

-Se fue hace rato- contestó la niña indiferente.

-¿Y con quién jugabas?- preguntó el doctor para poder aumentar su investigación del caso.

Abril, voz de inocentes [Crónicas de Abril #2]Where stories live. Discover now