The Tour » im nayeon.

20🌩

Singapore.                                 

Las chicas cantaban frente a mí, Tzuyu me regalaba versos y sonrisas desde arriba del escenario, los dos días en Singapore habían ido horribles, mi tiempo con las chicas era casi nulo, Kwan estaba molesto conmigo y mi castigo era ese, estar lejos de las chicas durante nuestra estadía en este lugar.

Un poco tonto a mi parecer ya que trabajamos juntas en esto.

Note cómo Nayeon se abrazaba al cuerpo de Jeongyeon, la alta besando su mejilla, punzadas constantes en mi cerebro me hicieron removerme en mi lugar, dejé de escuchar por unos momentos y todo a mi alrededor se revolvió, nuevamente mis ojos fallando.

No quise hacer un escándalo por lo que me mantuve en mi lugar con la mirada en dirección al escenario, no me encontraba bien de salud pero no debían de cancelar el concierto por mi culpa, menos si faltaban un par de canciones para su final.

Tras unos minutos sentí un pequeño peso en mis piernas, Tzuyu extendía una botella de agua para mí mientras Jihyo bebía en mis piernas.

—¡Me encanto este concierto! -chilló Sana.

Abrí la botella de agua y bebí de ella calmándome un poco, una mano se pego a mi rostro.

—Tú temperatura está bien, ¿te sientes bien?, estás amarilla -murmuró Jihyo.

Di un nuevo trago de agua cuándo note a Kwan haciéndome señas, ahí estaba el castigo, siempre que estaba cerca de ellas debía alejarme.

Bufé ignorando sus llamados.

—Estoy bien, ¿ustedes? -pregunté.

Las chicas estaban por todos lados tiradas en el suelo, agotadas, tras unos llamados del staff entramos al camerino.

Los managers aparecieron con órdenes de comida, esparcimos las cajas de papel por la mesa comenzando a comer de todo lo que ya hacía ahí.

—Siempre que Momo rapea en 'Hope' se me eriza la piel -contaba Dahyun.

—¿Sólo eso? -preguntó Chaeng burlándose.

Últimamente el Dahmo estaba muy junto, se abrazaban, se daban mimos por dónde fuera, más ninguna las había visto besarse o algo así, estaba claro que Heechul en unos días quedaría fuera.

—Se ven lindas juntas -dije.

Momo y Dahyun se miraron al instante comenzando a sonrojarse, las demás reímos al verlas, tan lindas.

—Iremos lento -murmuró Momo.

Un carraspeo llamo nuestra atención, Jeongyeon abrazaba a Nayeon por los hombros paradas al frente de nosotras, Momo rodó los ojos al verlas, ¿qué ocurría?

—Queremos decirles algo -comenzó Nayeon.

Jihyo asintió dándoles a entender que siguieran con lo que sea que dijeran, intente ignorarlas siguiendo con la comida.

No tenía un buen presentimiento para esto, no estaba preparada para nada de lo que fueran a decir, me hundí en mi lugar.

—Junto a Nayeon formalizamos, somos novias ahora.

La comida se atascó en mi garganta, tomé una botella de agua de inmediato y bebí de ella pasando lo que tenía en mi garganta.

¿Ellas dos siendo novias? ¿Cómo había ocurrido eso?

Una pequeña risa de Jeongyeon me hizo calmarme, ella lo hacía con intención de mi reacción, ¿por qué otra razón lo diría frente a mi?, no le daría lo que quiere, jamás la complacería.

Tomé aire y sentí cómo Tzuyu entrelazaba nuestras manos.

—¡Felicidades chicas! -hablé levantándome de mi lugar.

Nayeon se removió incómoda en su lugar su mirada estaba pérdida en el suelo, por otro lado Jeongyeon sonrió, parecía satisfecha.

—Espero la hagas feliz y no sólo juegues con ella, no entiendo tus intenciones pero si buscabas lastimarme ahórrate tus juegos -volví a hablar.

Dejando a Jeongyeong con la palabra en la boca salí del camerino, estaba agradecida de que los conciertos por ahora estuvieran acabados, necesitaba tiempo para mi.

Nayeon sería feliz con Jeonyeon, estaba sobrando por ahora, las chicas se acercaban a mí por pena, no quiero eso.

Fui hasta Kwan que al ver mi estado no lo pensó dos veces y me llevo hasta el hotel, mi oppa pidió explicaciones más las palabras se atascaban en mi garganta, reuní fuerzas y miré a Kwan en nuestro recorrido en la Van.

—Nayeon sale ahora con Jeongyeon -titubee.

—No estás bien T/N, nos iremos ahora mismo a Seúl.

Asentí, hundida en mis pensamientos fui trasladada hasta el aeropuerto, Kwan fue rápido llevándome en un corto tiempo al avión, según escuché el staff se encargaría de llevar mis maletas a la ciudad mañana.

No sabía que hacer apenas llegue a Seúl, no quería volver al hotel, menos a la horrible habitación en la JYPE, llegar a casa de mis padres sólo me haría sentir una carga más, ellos tenían sus propios asuntos, yo necesitaba mi propio espacio, abrazándome al cuerpo de Kwan supe lo que realmente quería.

—Oppa, ¿podrías hacerme un favor? -pregunté.

—Haría lo que fuera por ti, mi pequeña.

—Consígueme un apartamento, quiero sentirme cómoda en un lugar que me pertenezca.

Recibí un beso en mi frente para después ver a Kwan asentir.

—Tan pronto lleguemos tendrás tú apartamento.

El resto del viaje me dediqué a dormir, los susurros jugando con mi mente, los malos sueños haciéndome sentir aún peor, todo estaba siendo un problema, lo resumo, yo soy el problema.