💀 Capítulo 34: Conejo Negro 💀

480 61 12
                                    

El sueño de un conejo.

Siempre fue un conejo lindo y educado. Nunca se metía en problemas y ayudaba a conseguir comida para sus muchos primos. Pero.. todos lo odiaban, sus abuelos, tíos, primos, todos. Maldecía haber nacido con aquella coloración de pelaje. Mientras otros conejos eran blancos el era negro, y, para alguien que es distinto en una manada donde todos son del mismo color, es difícil. Había soportado las burlas de sus familiares y los constantes rechazos. El único conejo a quien verdaderamente apreció fue a su madre. Ella fue muy linda durante el poco tiempo en que vivió, lo había tratado como alguien más de la manada. Incluso le había contado sobre el enorme mar que los rodeaba, ese lugar era mágico, un lugar donde todos eran distintos y no importaba el color de tu pelaje. Soñaba con algún día irá y navegar por lo mares como un conejo pirata, así como una vez su madre lo fue. Wild Rabbit, conocida como la conejo salvaje, fue una temible pirata conejo que había surcado el enorme Grand Line y había llegado al nuevo mundo. Una conejo que había peleado con el mismísimo Rey carmesí y había vivido para contarlo. Era lo que más aspiraba a ser el pequeño conejo negro, un conejo pirata junto a sus Nakama, amigos que no lo despreciaran por su color de pelaje.

 Era lo que más aspiraba a ser el pequeño conejo negro, un conejo pirata junto a sus Nakama, amigos que no lo despreciaran por su color de pelaje

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Aunque no solo a eso aspiraba a ser el conejito. Su abuelo, un conejo gruñón que siempre lo lanzaba a volar, era el médico del clan. Curaba a los integrante de la manada con yerbas medicinales que crecían debajo de la nieve, era algo que los humanos le habían enseñado hace ya mucho tiempo, antes de que se volvieran enemigos. El pequeño conejo negro también aspiraba a ser un médico conejo. Su sueño era ser el primer médico conejo pirata del mundo, así su madre estaría orgullosa de el, y tal vez, los integrantes de su manada lo trataran con respeto.

 Su sueño era ser el primer médico conejo pirata del mundo, así su madre estaría orgullosa de el, y tal vez, los integrantes de su manada lo trataran con respeto

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

...

El pequeño conejito miraba la luna. Recordaba aquella leyenda que le habían contado hace algún tiempo, o que le habían contado a los conejos de su edad y el había escuchado detrás de un árbol. Una leyenda que contaba como un conejo fue tan noble para sacrificarse en bien de un rey, así mismo, el rey al ver tal acto heroico lo lanzo a la luna y así su silueta se plasmó sobre la superficie. Ese era un conejo que el quería ser. Llegar a ser tan grande como el héroe de esa leyenda. Y lo lograría, sería una leyenda en todos los mares como su madre y llegaría a los cielos como el conejo de la luna...

—Hoe!! Deja de soñar despierto y llevar esas plantas a la madriguera.. –ordeno un conejo mayor. El pequeño conejito bajo la cabeza y tomo la plantas que había recolectado–

...

—Abuelo, abuelo.. –gruñia emocionado entrando a la cámara donde se encontraba el consultorio de su abuelo– ..¡Te traje las plantas!

—¡Conejo maleducado, te tienes que presentar primero! –gritó malhumorado tomándolo de sus orejitas, gruñó y luego lo arrojó fuera del consultorio–

El pequeño camino cabizbajo hacia la entrada de su madriguera, cogió una zanahoria que había recolectado el día anterior y la mordió, sus filosos dientes trituraron la raíz como si no fuera nada. Lo bueno de ser alguien no querido era tener tanto espacio para ti mismo, aunque, también lo atribuía a la muerte de su madre. Ella construyó aquella sección con sus propias patas, la había cavado tan perfectamente que ella y el podían vivir tranquilamente.

Suspiro desganado y se recostó en el montón de yerbas secas que había amontonado en un rincón, antes de haberse recostado había tomado el cofre del tesoro de su madre. De el, tomo una pequeña fotografía donde salía su madre, una gran conejo de pelaje blanco, junto a un hombre de cabello rosa grisáceo y un hombre con un extraño corte de cabello, cejas tupidas y un enorme bigote. Algún día los conocería, eso lo daría por seguro.

Pero antes de eso tenía que volverse fuerte. No se iría de la isla sin ser fuerte, tenía que convertirse en un gran conejo con la fuerza de mil conejos. Un conejo que derrotaria a sus oponentes con un solo golpe. Por eso entrenaba día tras día, no importaba que la temperatura fuera de menos cero grados, el tenía un sueño y lo cumpliría.

Por eso estaba ahí, enfrente de aquella chica pelirrosa, listo para golpearla y volverse un conejo pirata. Si no podía derrotar a un humano entonces no podría convertirse en un conejo pirata. Saltó de árbol en árbol rodeando a la chica, después del último árbol que tocó, estiró su garra derecha y salto hacia la chica. La pelirrosa levantó su puño y lo estampó con gran facilidad en la cabeza del pequeño conejo, por tal golpe termino con la cabeza enterrada en la nieve. Como pudo salió de la nieve blanca y se puso de pie, estiró nuevamente sus garras y salto hacia la chica. Ella lo golpeó nuevamente, está vez lanzándolo contra un árbol. La espalda del conejito golpeó contra la dura superficie y luego callo al suelo. De nuevo se levantó, escupió un poco de sangre, mostró sus filosos dientes y corrió saltando hacia la chica. Tenía que derrotarla, su madre estaría decepcionado de tener un conejo débil en su familia...

—¡Te derrotare! –grito el conejito, aunque claro, la chica solo escucho un gruñido– ¡Y me convertiré en un conejo pirata!

No obstante, aunque no escucho lo que había dicho había visto la tenacidad en sus ojos. Corrió hacia el, levantando su puño listo para golpear al pequeño...

—¡¡Haaaaa!!

—¡¡¡Ghaaarr!!!

Ambos golpes conectaron.

...

—Hey.. eres muy fuerte conejito.. –admiro la pelirrosa, de pie enfrente del conejito– ..Kurosagi-san...

De sus lindos ojitos salieron gruesas lágrimas. Nadie, además de su madre, le había llamado de aquella manera y admirado su fuerza. Colocó su patita sobre sus ojos para que no lo viera llorar, sería demasiado vergonzoso que su rival lo viera así...

—Gracias... –Sakura asintió, aunque solo escucho un gruñido–

.
.
.

Espero que les haya gustado. Neko se despide 👋

Nakama [Naruto-OnePiece]Where stories live. Discover now