CAPITULO 69

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DEMONIO MENTIROSO

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Había olvidado como era estar en confianza, ahora lo recordaba, durante el camino Dylan y yo no dejábamos de reír, la música en el reproductor del auto nos dió la suficiente diversión como para que las horas se redujeran al menos para nosotros, cantando a todo pulmón, bailando un poco en el asiento y más, tanto asi que no nos importó demasiado el que él auto se hubiera sobrecalentado en el caminó y tuviéramos que detenernos por casi media hora esperando que el pobre se calmará, afortunadamente Dylan había traído sandwiches de casa para el camino, sabía perfectamente que este tenía hambre las 24 horas del día, está vez me le sume, tenía demaciada hambre, fue algo extraño estar a media carretera comiendo mientras la música continuaba, talvés por eso demoramos más de lo pensado en dejar de el auto enfriará pues no lo pagamos del todo, pero no teníamos prisa, llegaríamos si o sí, además teníamos chocolate, lo que nos sirvió bastante mientras hablábamos de cualquier cosa perdiendo el tiempo hasta llegar al pueblo por fin, desgraciadamente las pocas horas que debimos haber pasado en la carretera habían sido dobladas por los inconvenientes y el tiempo extra que pasamos simplemente hablando.

- Llegamos -Dylan se dejó caer en la alfombra de la sala una vez estuvimos en la casa dejando caer nuestros bolsos también, tome un cojín del sofá al lado que estaba cubierto con algunas sábanas al igual que todo los muebles y me tire a su lado-

- Estoy cansado -suspire cerrando mis ojos al sentir sus brazos rodearme-

- Yo también pero tengo hambre -me rei alzando mi cabeza para que tomara el cojín y terminé usando su brazo de almohada-

- Yo también

- ¿Vamos a ver qué podemos comer antes de dormir? -asenti sacando mi celular-

- Primero llamaré a mamá para avisarle que ya llegamos

- Es cierto, mamá me pidió que le llamara cuando saliéramos del pueblo pero se me olvidó -se rio un poco mientras nos acomodabamos hacia arriba colocando el celular en medio de ambos-

- Cariño. ¡Dilraba son ellos!

- ¡Hola, mamá!

- ¡Mamá! -reimos al escuchar lo rápido que se acercaban los tacones de la madre de Dylan-

- ¿Cómo están?, ¿Llegaron bien?. - ¿Porque demoraron tanto en llamar? 

- Apenas acabamos de llegar, tuvimos un pequeño contratiempo en el camino

- ¿Cómo?, ¿Que sucedió?, ¿Están bien?

- Si, mamá -tome la mano de Dylan jugando con sus dedos-

- Solo se nos detuvo el auto en el camino, nada malo, llegamos completos

Estuvimos hablando con ellas por algunos minutos, bueno en realidad fue casi una hora mientras descubríamos algunos muebles siguendo indicaciones de Dilraba sobre cosas que podíamos usar en nuestra estadía ahí, después de colgar con ellas salimos a dar un paseo y buscar algún puesto de comida, serca de la casa de los Wang había un parque en el que solíamos caminar porque siempre había muchas cosas para comer, claramente eso no había cambiado, apenas nos acercamos al parque pudimos ver a la distancia las luces que iluminan los puestos de comida y postres, recorrimos el centro del parque comprando algo de comer y algo de helado, yo amaba el helado, Dylan amaba el helado y sin dudar habíamos decidido comer helado antes de comer comidas, estás las dejaríamos para cuando volviéramos a la casa. Me dirigí hacía una banca para esperar a Dylan quien hacia fila en un puesto de comida, mientras miraba al rededor y comía mi helado ví a alguien a la distancia, alguien que podía decir que conocía pero su apariencia actual no encajaba con la que yo recordaba, di un saltito apartando la vista de aquella persona cuando mi celular comenzo a sonar, lo saqué atendiendo como solía hacerlo, sin revisar pues creo que las personas que sabían que volvía a usar ese celular eran contadas.

>>CONTRA LA PARED<<--[NamGi]Where stories live. Discover now