>>CONTRA LA PARED<<--[NamGi]

CAPÍTULO 40

TROZOS DE LUNA/COPOS DE NIEVE

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- ¡Yoongi!

Escuche apenas demasiado lejano y el fuerte sonido de los claxon sólo hicieron que mi corazón latiera como loco, sentía que este en cualquier momento se detendría, hubiera sido así si el auto que toco mis rodillas no se hubiera alcanzado a detener, cerré mis ojos y recargue mis manos sobre el cofre escuchando el sonido del tráfico deteniendose entre rechinidos, claxons y maldiciones de parte de los chóferes.

- Sal del camino

- Chiquillo idiota

- ¡Cállate imbécil! -cubri mis oídos cerrando mis ojos con aún mas fuerza- YoonGi, ¿estas bien? -sentí unas manos sujetarme y me giró para luego sentir los brazos rodearme junto a la suave voz y el cálido pecho que brindó algo de calor a mi mejilla enrojecida- vamos

Podía escucharlo discutir con los demás chóferes mientras me hacia entrar al auto, me hice un ovillo en el asiento abrazando mis piernas una vez la puerta fue cerrada, hubo un completo silencio mientras sentía el auto comenzar a andar y mi celular comenzó a sonar, volví a cerrar los ojos sintiendo que todo me daba vueltas.

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Abrí mis ojos con dificultad, tenía demaciado sueño, mire un poco el lugar alcanzando a ver cuando una niña se alejaba corriendo, sólo pude escuchar sus pasos mientras se alejaba sin poder distinguir bien lo que gritaba al correr, intente moverme más mi cuerpo se sentía muy pesado por lo que me fue imposible, mire hacia la misma puerta al ver a la niña volver con alguien más, me sorprendí al ver al doctor XuKun entrar de la mano con la niña, camino hasta mi lado y se sentó pasando su mano por mi cabello.

- ¿Como te sientes?

- Cansado... -murmure con voz ronca y muy baja- mi cuerpo pesa mucho -intente moverme teniendo el mismo resultado-

- Tranquilo, estabas muy alterado, tuve que darte calmantes. Intenta volver a dormir

- Tengo... que ir a casa... -parpade de manera pesada, mis párpados estaban cerrándose por si solos-

- Llame a tu padre, dijo que pasaría por ti en cuanto terminará su turno, así que debes esperar

- Gracias...

- No hay porque, me asustaste cuando saliste de la nada, ¿porque crusaste así?, YoonGi

- U-un perro... -murmure sintiendo ese nudo en mi garganta-

- ¿Un perro? -asenti levemente-

- Estaba...parsiguendome y me asusté...lo siento~ -suspiró quedándose en silencio y mire de nuevo a la niña que estaba recargada en el mueble junto a la cama- ¿Ella es?..

- Oh. Nao, ven -extendió su mano hacia ella y ella la tomo acercándose- es mi vecina, sus papás trabajan hasta tarde así que los días que no trabajó le doy asilo -sonrió revolviendo su cabello y ella río-

- Yo...te cuide mientras dormías -sonreí un poco al escucharla-

- Gra-cias~ -murmure intentando tomar su mano pero de repente todo se volvió oscuro y mi cabeza callo sobre la almohada-

Desperté al escuchar la voz de mi padre a lo lejos, todo me parecía muy lejano, ni siquiera podía mantener mis ojos abiertos, escuche sus voces mientras parecían tener algún tipo de conversación hasta que sentí como mi cuerpo era tomado en brazos y levantado, abrí mis ojos mirando el rostro de mi papá, este me miró con una sonrisa pero la preocupación en su rostro no pudo ser escondida como lo intento, me hundi en su cuello mientras me discúlpaba en bajos susurros que temia no fueran escuchados, me puso en el auto asegurándome con el cinturón de seguridad y comenzó a conducir.