Capítulo 50: Tres palabras

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Harry comprobó si estaba en el lugar correcto. En la puerta, pudo ver una gran P incrustada en la puerta y la gran mansión detrás de ella. Estaba en el lugar correcto. Potter Manor, lugar del funeral de Aiden.

Aiden era un cabrón. No se podía negar eso. Era grosero, vago, engreído y arrogante. Pero Harry aún pensó que debería asistir a su funeral. Después de todo, le guste o no, Aiden y él eran hermanos de sangre.

"¡Harry!" dijo Remus quien se veía sorprendido de verlo. "No esperaba verte aquí."

"Pensé que debería venir." dijo Harry.

Remus sonrió con pesar y llevó a Harry al lugar donde se estaba llevando a cabo el funeral.

Harry pudo ver a los Potter sollozando con Sirius consolándolos, McGonagall, un hombre corpulento y pocas personas que parecían del ministerio.

Harry tomó asiento cuando comenzó el memorial. Un par de magos y brujas, es decir, los que conocían a Aiden, se acercaron e hicieron un breve discurso sobre cómo lo extrañarían.

Cuando terminó el servicio, Harry se acercó a los Potter.

"Sr. y Sra. Potter, solo me gustaría decir que lamento su pérdida." dijo Harry.

Lily miró hacia arriba con su rostro lleno de lágrimas. "¿Usted vino?" dijo Lily con voz sorprendida.

"Sí. Yo estaba allí en ese momento, así que decidí venir". dijo Harry.

"Realmente no tenías que venir." dijo James. "No esperábamos que vinieras después de cómo te tratamos Aiden y nosotros. Pero ... significa mucho que hayas venido".

Harry asintió. "Por favor, cuídese. Hasta pronto."

Lily y James se sentaron en su silla mientras las personas que asistieron al funeral ofrecían sus condolencias. Solo había adultos en el monumento. A excepción de Harry, no había nadie de Hogwarts de la edad de Aiden que asistiera al funeral.

Aiden ni siquiera tenía amigos en Hogwarts. Sabían que Aiden era cercano a Ron, pero Aiden había roto esa amistad con Ron por su fama. Además, después de lo que Aiden le hizo a Ginny, no había forma de que Ron viniera al funeral.

Dumbledore. Él tenía la culpa. Había inflado la cabeza de Aiden desde que podía hablar y lo favorecía sin parar. Incluso cuando Aiden fue a Hogwarts, Dumbledore nunca ocultó el hecho de que valoraba a Aiden sobre todos los demás estudiantes.

Dumbledore. Llenó la cabeza de Aiden con tonterías. Tantas tonterías que Aiden realmente pensó que podía luchar solo contra Voldemort.

Pero sabían que Dumbledore no era el único culpable. Eran los padres de Aiden. No Dumbledore. Deberían haber hablado antes, objetado sus decisiones y lo más importante ... nunca estuvieron de acuerdo con el plan de Dumbledore de despedir a Harry.

Harry no tenía absolutamente ninguna razón para asistir al funeral. No eran su familia y Aiden siempre fue grosero e inmaduro con Harry. Y aún así, Harry decidió venir.

Lily y James sonrieron con pesar. Su hijo mayor realmente se convirtió en un gran hombre. Siempre estuvieron agradecidos con la gente del instituto Xavier por hacer lo que no hicieron.

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