tres

596 52 20
                                    

La brisa golpeaba su rostro, el azabache tenía sus ojos cerrados dejando sentir el viento golpear en su rostro, abrió los ojos y contempló los luminosos rayos del sol, emprendió su viaje de nuevo.

Se escuchaban sus pisadas en medio del bosque, el crujir de las hojas y ramas secas se escuchaban conforme cada paso que daba el chico.

Tenía algunos asuntos en mente, recientemente encontró lo que parecían ser rastros de chakra de kaguya, una amenaza para todo el mundo ninja, su deber es encontrar pruebas más concretas de la cituación actual.

El día transcurrió con normalidad, el azabache decidió tomar un descanso breve para poder alimentarse, se sentó sobre el frío césped del bosque  retiro su katana que se encontraba asegurada junto a su cintura, la puso a un lado de él mientras recargaba su espalda en el gran tronco de un árbol.
Comenzó a comer unas bolas de arroz que traía con el de manera tranquila, apreciando y refugiándose en su propia Soledad.

Después de terminar con sus alimentos escuchó un sonido conocido para el, se puso de pie y observo a un Alcon mensajero de Konoha, el ave se acercó y retiró la nota que traía, el ave espero paciente por la respuesta del azabache.

-que fea letra, es de naruto-
Dijo mientras observaba la nota.

Teme,ha pasado bastante tiempo desde que te marchaste de la aldea, te echo de menos, todos lo hacemos, Sakura-chan lo asé todos los días, no se que es lo que te encuentres haciendo, pero no estaría mal que le escribieras a Sakura-chan, ella es todo una mujer, tubo una grandiosa idea de abrir una clínica especializada en problemas que puedan tener los niños después de la Gerra, te escribo por qué e tomado una decisión dattebayo.
Necesito saber que es lo que sientes por sakura-chan, o si hay alguna posibilidad de que correspondas a sus sentimientos, ella sufre mucho, el amor que siente por ti la lástima, esperare tu respuesta, si me dices que te darás una oportunidad con ella, la protegeré asta tu regresó, pero si no ay posibilidad de eso, quiero que sepas que lucharé por ella asta ganarme su corazón, yo en verdad la amo y quiero su felicidad dattebayo.

Uzumaki Naruto...

El peli negro suspiro y sacó de sus pertenencias una hoja de papel y una pluma, si Naruto quiere una respuesta el se la dará.

°°°°°°°°°°°°°
Un rubio iba caminando con ambas manos en los bolsillos, por las concurridas calles de la aldea de la hoja.

Traía consigo una sonrisa en su rostro como es de costumbre.

-naruto-kun-
Escucho una leve voz llamarlo a sus espaldas.
El rubio se giro y encaró a la chica.

-oh, hola Hinata-
Respondió con una sonrisa.

La chica se encontraba sumamente nerviosa con un leve sonrojo en sus mejillas.
-¿Cómo estás?-
Preguntó mientras jugaba con sus dedos.

-muy bien, dattebayo-
Le sonrió y al ver qué la chica no decía nada.
-me tengo que ir, pasaré por Sakura-chan al hospital, la invitaré a cenar-
Dijo tranquilo.

-oh, está bien naruto-Kun, nos vemos-
Le dio una sonrisa nerviosa.

-nos vemos después Hinata, cuídate dattebayo-.
Se dio la vuelta y siguió con su camino.

La azabache lo miró alejarse y suspiró.
<<Naruto-Kun cuídate tu también>>
Pensó mientras ella seguía con su camino.

°°°°°°°°°°°°
La pelirrosa terminó su turno con normalidad, tomo sus pertenencias y colgó su bata sobre el perchero de su consultorio.

mientras caminaba por los pasillos del hospital pudo observar varias parejas.
No pudo evitar sentir algo de nostalgia al darse cuenta que al parecer ella siempre se encontraría sola, o por lo menos asta que Sasuke regresara, sin embargo nada le garantiza que el la acepté.

Trato de alejar esos pensamientos y dibujó una sonrisa en su rostro, una ves afuera del hospital observó una persona conocida afuera del hospital.
Le sonrió y se acercó a el.

-hola Naruto, ¿Que ases aquí?-
Preguntó tranquila ya que lo tenía frente a ella.

-sakura-chan, sólo vine por ti, te quiero invitar a cenar-
Le sonrió nervioso mientras que con una mano se frotaba su rubio cabello.

-oh, está bien vamos-
Le sonrió y comenzó a caminar tranquila.

El rubio rápidamente la alcanzó y comenzó a caminar a su lado.

-¿Cómo estuvo tu día sakura-chan?-
Le preguntó mientras la miraba atento.

-muy bien, amo lo que ago , y aunque es algo cansado no me puedo quejar-
Le sonrió mientras saludaba con la mano a un aldeano que pasaba junto a ella.
-¿Y tú qué hiciste hoy?-

-oh, yo pues-
Se rascó la nuca nervioso.
-pues, nada últimamente no hay muchas misiones haci que prefiero dormir dattebayo-
Le sonrió.

La pelirrosa negó con la cabeza
-eres un flojo, deberías de ordenar tu departamento ya que tienes mucho tiempo libre-

El chico río nervioso y entraron al local de comida,  con una sonrisa en el rostro.

Cenaron con tranquilidad, y como dijo el rubio el pago la cena.

Después de cenar en aquel lugar se retiraron juntos, el rubio acompaño a su amiga asta su departamento y la dejo en la puerta de esté.

El rubio entró a su pequeño departamento con una sonrisa en el rostro, después de quitarse sus sandalias se dirijio a su pequeña habitación.
Tomó una muda de ropa y se dio una ducha rápida para dormir fresco.

Una ves limpio se sentó en su cama mientras se secaba el cabello con la toalla que tenía en sus manos.

-sakura-chan-
Dijo con una sonrisa mientras se dejaba caer en el colchón.

Se sentía feliz para el un momento al lado de la pelirrosa y verla sonreír lo es todo para el, se sentía satisfecho por ser el quien causa sus sonrisas.

Escucho unos pequeños golpes en la ventana, se levantó de la cama y camino asta ella, cuando la abrió se sorprendió al ver a la ave que el avía mandado ya con la respuesta, rápida mente desató la nota dela pata del ave, y dejo al ave marcharse no sin antes darle su recompensa.

Encendió la luz de su habitación y se sentó sobre su cama con la nota en sus manos.

La abrió y se sentía sumamente nervioso.
Suspiró y comenzó a leerla.

Dóbe, no tengo por qué escribirle a Sakura, nada me obliga a hacerlo, no tengo tiempo para estar pensando en estupideces y jugar a los romances, has lo creas conveniente para ti.

Uchiha Sasuke

El rubio apretó la nota con coraje.
-eres un idiota Sasuke-
Arrojó la nota al piso y camino asta su ventana.

Miro la luna y sonrío.
-no necesitas a Sasuke, yo te aré feliz sakura-chan, mañana me confesaré a ti, y lucharé por ganarme tu corazón dattebayo-
sonrió y con eso en mente se fue a dormir

&quot;descubriendo sentimientos&quot; Dove le storie prendono vita. Scoprilo ora