"descubriendo sentimientos"

veintisiete

La ojiperla se encontraba recostada, no tenía ganas de nada, ya habían pasado un par de semanas desde lo sucedido con Naruto y ella solo se a dedicado a evitarlo, asé un par de noches lo vio caminando por las calles de la aldea, ella solamente corrió con todas sus fuerzas, no quería que la viera, se avergonzaba de ella.
De lo vulnerable que el la vuelve.

-naruto-kun- murmuró mirando al techo para después soltar un gran suspiro.

Unos golpes en la puerta llamaron su atención.

-¿Quién es?- pregunto mientras se reincorporaba.

-soy yo, ino- respondió del otro lado de la puerta.

-adelante - dijo mientras se frotaba los ojos
La rubia abrió la puerta y ingreso en la habitación.

-tu hermana me permito entrar, que pasa contigo Hinata-
La miro triste mientas se sentaba a su lado.

Agachó la mirada y suspiro
-no lo se- respondió tranquila

-tienes que hablar con el-

Ella rápidamente la miro y negó con la cabeza en repetidas ocasiones
-no, ni siquiera lo recuerda-
Sus ojos comenzaron a cristalizarse

-no lo sabes Hinata-
La miraba preocupada

-lose, se que no lo recuerda-

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Se encontraba sentada observando el atardecer frente a ella, el agua del lago tocaba las puntas de sus pies descalzos, mientras el viento ondeava de un lado al otro su cabello.
Los recuerdos en su cabeza no desaparecen, apesar del tiempo persisten ahí ya a pasado más de un mes desde su partida de la aldea, y varias preguntas percisten.

¿El se encuentra bien?

¿Aún la ama?

¿Algún día podra perdonarla?

No es que ella quiera que el olvide todo y sea como antes, que le perdone el gran dolor y decepción que le causó, que vivan de nuevo todo como si nada hubiera pasado, o talvez si?
No definitivamente eso no pasará.

-sakura-
Lo escucho y sin mirarlo lo invito a sentarse a su lado con un movimiento.

El azabache se sentó junto a ella sin pensarlo.

-deberias quitarlas-
Pronunció ella tranquilamente

El la observó sin entender.

-tus sandalias- señaló sus pies estirados mojándose con el agua del río- es relajante-
Le sonrió.

El mostró una pequeña sonrisa casi imperceptible y hizo lo que ella le pidió, subió un poco su pantalón y estiró sus pies permitiendo que se mojaran.

-¿terminaste?-
Pregunto mirándolo

El asintió un par de veces.
-el reporte ya va rumbo a konoha, llegara a kakashi en máximo tres dias-
Dijo tranquilo mirando al orizonte.

Ella soltó un suspiro.
-¿Que aras después?-
Lo miraba fijamente.

El giro su rostro y observó su reflejo en esos hermosos ojos.

-¿Que aras tu?-
Pregunto

Ella lo pensó un par de segundos.
-en realidad no lo sé. Extraño la aldea, mis pacientes, pero no quiero regresar aún-
Finalizo con un suspiro segura de sus palabras, sabía que aún no estaba lista para volver.

El entendia perfectamente de lo que hablaba
-bien avisaré a kakashi que te ausentaras por un tiempo de la aldea no te preocupes-

Ella lo pensó un par de segundos, no quería preguntarle pero necesitaba saberlo.

-la misión terminó, te iras de nuevo verdad-
Lo dijo más en afirmación que como una pregunta.

El asintio tranquilo.

Se le comprimio el pecho.
Se va de nuevo, se irá y tal vez nunca más lo verá, el ya le había dicho que no tenía nada que hacer en la aldea, sus ojos comenzaron a picar y unas finas lágrimas resbalaron por sus mejillas.

-entiendo- dijo tratando de no sonar tan rota.

-ahora dime Sakura, ¿A dónde quieres ir? El país del fuego tiene lugares maravillosos-
Ella lo miro incrédula.

-no entiendo Sasuke -

-te prometí no dejarte nunca más, ahora dime a dónde quieres ir-

Ella solo sonrió mientras se limpiaba las lágrimas del rostro.

-¿Te parece si lo averiguamos juntos?-

-me parece perfecto-
El la atrajo a el con su brazo para depositarle un beso en la cabeza.
-me parece más que perfecto.-