Of tears and broken souls

♧N°35♧

No es el amor
quien no sobrevive a la distancia,
sino la promesa de amarse solo entre sí.

Nena, nos hemos desplomado.
Caminar sobre esta cuerda floja
ha sido el acto de nuestra vida
y nuestras mentes aplauden
y nuestros corazones gimotean.

Sé que me entiendes,
sé que te desangras
al intentar buscarme.

Encuentro tu número
y las palabras se pierden.
¿Acaso era cierto lo que mi mejor amiga me dijo aquella noche de mayo?
¿Esto acabaría en homicidio?

Nena, golpeo las paredes
cuando imagino cosas...
Cuando sé que me amas
y a él lo quieres.
Él fácilmente podría ser yo.

Nena, sé que lloras
cuando la menciono...
Porque te amo
y ella me importa.
Sabes que no puedo alejarme.

¿Qué hacemos
más que esfumarnos
en instantes el uno del otro?
Estamos asustados,
sin control alguno.
¿Se puede ser feliz y desgraciado al mismo tiempo, mientras oímos la voz que añoramos al otro lado de la línea?

La paz desapareció
cuando otra voz se metió
en nuestras cabezas,
reproduciendo una melodía distinta
que conformaría otra vida.
Eres mi playlist favorita
y yo la tuya.
Y, sin querer, una canción
apareció de la nada en mi lista.
Todo fue tan inofensivo al dar play...
¿Sabes que asusta, nena?
No querer pausarla
porque es tan enigmática
y especial.
Terminar necesitándola
porque la quieres y no al revés.
Es aterrador.

Se volvió mi tono de llamada
precisamente la tarde
en que me hablaste de él.
Tu viejo amigo
el que tanto te protege.
Aquel que te tuvo antes que yo.
El mismo que jamás quisiste soltar.
Mi espalda cansada se deslizó por la pared, al ver tus labios hermosos moviéndose armónicamente al son de otro nombre.

No me acusas.
Y yo no te apunto.
Nos conocemos tanto,
amamos con locura
todas nuestras facetas,
incluso mientras
nuevos sentimientos nos apartan
continuamos siendo tú y yo.

Y, aunque se avecine el final,
sé que sabes que nada será
ni se sentirá como nosotros.
Y quizás de eso se trata.
Palpamos esas hermosas diferencias
mientras conducimos en direcciones
opuestas para llegar a ellos.
No a un destino.
No a una opción.
Ellos son una oportunidad.
De atesorar este amor y dejarlo ir.
De permitirnos acariciar
y susurrar una nueva canción.

A aquellos que lean esto y se dediquen al arduo arte de escribir, les digo de corazón que, si desean ser brutalmente destacados, asegúrense de llegar a enamorarse y, aún mejor, de que les rompan el corazón...

Att: S