Una cita para mi follamigo | ChanBaek

010. Sexo de aniversario

—Mierda.

—Eres tan sucio —ChanYeol se quejó mientras trataba de regular su respiración.

—Tan lleno —gimió BaekHyun mientras se autopenetraba lentamente con el pene caliente y duro de su mejor amigo.

Las manos de ChanYeol descansaron en las caderas de BaekHyun, sus manos amasaban suavemente aquella piel y descendían para tomar los muslos y glúteos. Necesitaba que BaekHyun simplemente se sentara en su pene, ya había pasado un largo tiempo desde la última vez lo que hicieron así, pero debía controlarse y esperar a que BaekHyun se tomara su tiempo. Esa posición solía ser dolorosa al principio.

Byun fue lento. Dejó salir gemidos que hacían volver loco a ChanYeol. La posición en la que estaban era excitante. BaekHyun en su regazo con su torso inclinado hacia atrás para poder mantenerse en su lugar. Las manos de BaekHyun estaban firmemente presionadas contra ChanYeol en sus hermosos muslos.

El bajito sacudió sus caderas un poco, hacia arriba y luego descendió, hasta que finalmente tocó fondo. Su movimiento tomó a ChanYeol completamente por sorpresa haciendo que su aliento se cortara, sus manos agarraron el cuerpo de BaekHyun más fuerte y ambos sabían que habrían moretones cuando despertaran.

—Hermoso —el alto susurró. Cualquier cosa encima de eso haría que su voz se resquebraje y no tenía intenciones de darle a BaekHyun ningún material para hacerlo pensar mucho más tarde.

Byun respiraba más rápido y más pesado de lo normal, trató de acostumbrarse a ChanYeol dentro de él. Normalmente tomaba un tiempo tomar una posición perfecta cuando el hombre mayor lo estaba follando implacablemente en el colchón, pero esta posición hizo que BaekHyun sintiera profundamente a ChanYeol, tocando todos los puntos que normalmente tenía que encontrar con movimientos más exactos.

—¿Por qué diablos no te monto siempre? —preguntó con una sonrisa.

Park, como muchas veces antes, cuando BaekHyun se ponía arrogante, puso los ojos en blanco y calló—. Estás demasiado cansado siempre. Además, te gusta que te domine.

El joven hizo un mohín y movió las caderas, lo que los hizo gemir.

—Dame un momento... aún no logro moverme mucho.

ChanYeol le ofreció una suave sonrisa—. Intentaremos algo diferente, ¿De acuerdo? ¿Confías en mí?

—Siempre.

La respuesta fue rápida. BaekHyun confió en ChanYeol su vida, ni una sola vez el hombre hizo algo para dañarlo de alguna manera.

—Buen chico —Park alabó haciendo que Byun se sonrojara—. Ahora en lugar de rebotar, solo quiero que muevas tus caderas. Ahora sé que no es lo más fácil con mi pene adentro, pero inclínate hacia adelante y usa tu mano para equilibrarte. Me aseguraré de que no te duela y te caigas.

BaekHyun asintió antes de cambiar de posición.

El bajito cerró sus ojos, se mordió el labio y lentamente balanceó su cuerpo hacia adelante sin levantar su trasero siquiera un poco.

El fuerte gemido de placer les sorprendió a ambos.

—¿Se siente bien? —ChanYeol bromeó.

En lugar de responder, BaekHyun lo hizo de nuevo. Esta vez la boca de ChanYeol se abrió dejando escapar un gemido más bonito. Sus ojos se llenaron de lujuria, comenzando silenciosamente a guiar a BaekHyun una vez más.

Como un profesional, Baek movió las caderas. Tenía el control y sentía que estaba usando a Park para su propio placer. La idea de eso lo hizo sentirse sucio y le encantó.

Los elogios fueron algo que le vinieron naturalmente al alto. Byun estaba haciendo un gran trabajo y se veía tan lindo, aturdido, sudoroso y jodidamente caliente. Sería una lástima si no se lo dejaba saber.

—¿Lo hago bien? —preguntó BaekHyun entre silenciosos gemidos. A veces era completamente inconsciente e inocente. ChanYeol parecía destrozado abajo de él y todavía lo cuestionaba.

—Joder, Baek. Lo estás haciendo muy bien. Puedes ir más despacio, te hará sentir mejor.

BaekHyun asintió e hizo exactamente eso. Apretó los músculos alrededor de el pene de ChanYeol y sacudió sus caderas de un lado al otro antes de moverse un poco más fuerte. Haciendo círculos con sus caderas.

—Joder, Yeol —él gimió cuando el pene de ChanYeol golpeó su punto dulce.

La palabra lento fue olvidada por mucho tiempo, y por primera vez, BaekHyun desobedeció a ChanYeol y comenzó a rebotar desesperadamente sobre su pene.

— Oh... por favor —él suplicó sin sentido alguno.

ChanYeol, que luchaba por respirar, soltó un débil sonido, pero no abrió los ojos.

—Di algo... Llámame como lo hiciste la última vez.

El hombre mayor abrió los ojos, se dejó llevar un poco la última vez lo que hicieron y se disculpó con BaekHyun al menos sin saber que realmente a su amigo le ponía el  que le dijeran cosas sucias mientras follaban.

Era algo nuevo.

—Estás loco y caliente como el infierno...¿Quieres que te llame puta? Una puta que ama mi pene. Te encanta, ¿No? Eres mi puta, bebé.

Sin confiar en su voz, BaekHyun asintió con la cabeza. Las palabras de ChanYeol lo habían llevado al cielo. Park lo sostuvo fuerte mientras que una de sus manos se apoyaba en el pecho del alto y la otra comenzó a masturbar su pene.

—Estoy cerca, Yeollie.

—Dime lo sucio que eres —ordenó el alto.

Cada rebote, cada movimiento que BaekHyun hacía enviaba una sacudida de placer a través de su cuerpo. Él estaba cerca y ChanYeol parecía tan jodidamente caliente que hizo que se excitara aún más.

—Soy sucio por ti, Chan... soy tu puta y me voy a correr.

Antes de que terminara esa frase, derramó su carga sobre el pecho de ChanYeol.

Park maldijo antes de levantar las caderas de BaekHyun y empujar en su apretado agujero unas cuantas veces más antes de correrse también.

Ambos estuvieron de acuerdo en que el sexo de aniversario cada vez era mejor.