"Cuando te vea otra vez" || Genya Shinazugawa x Reader || Kimetsu No Yaiba

25 - Máscara de jabalí.

Otra noche, se volvió un pequeño hábito de comodidad para el azabache sentarse en el patio a pasar el rato.

Simplemente se quedaba ahí, no le importaba el frío, mucho menos. Acomodaba sus horarios de sueño, como durante sus noches de trabajo.

Shinazugawa se sentía bien, la semana se había acabado pero su flexibilidad había mejorado, ahora podría pasar a la siguiente sección. Poco a poco se iba acercando a su hermano, se ponía nervioso de solo pensar en que le diría.

" Hola, Sanemi ... ¡Soy yo! " Eso era demaciado expontáneo para el. " ¡¡CIERRA LA BOCA Y ESCÚCHAME AHORA MISMO!! " Mucho peor, ni siquiera se atrevía a decirle hola y ya pensaba en gritarle en la cara. " ¡Oh, no te había notado hermano mayor! ¿Cómo te va en la vida? ¡Escuche que eres un pilar! " Demaciado directo para intentarlo. No podría pronunciar ni la primera frase sin tener un colapso mental en el intento.

- Oh. - Una voz femenina, con un tono amable y cansado interrumpió los pensamientos del azabache. - Mi hermana siempre dice que no debo dormir tan tarde, ¿A usted no? - La pequeña Touko estaba despierta a estás horas como si nada.

Genya se quedó callado por un segundo. - Es una pregunta tonta, usted trabaja de noche. - Balbuceo, no parecía adormecida y mucho menos con la intención de irse. - No haga demaciado ruido, si Hayami también despierta se enojara con los dos. - La niña se sentó sobre sus propias piernas, miro a Genya quien estaba confundido.

- ¿No es demaciado pequeña para no estar durmiendo? Vuelva a su cuarto, hace frío. - Los encuentros con ella se hacían extrañamente más recurrentes, parecía ser más inteligente que el promedio de su edad.

- Todo es más tranquilo y silencioso, me despierto más tarde así que no es problema dormir a esta hora. ¿Usted no debe entrenar mañana? - Shinazugawa asintió, juntó sus manos y las frotó.

- ¿No sientes frío? - Preguntó.

- Para nada. - Sonrió, se parecía un poco a ________. - De hecho, estoy emocionada. - Comentó, giro la cabeza y saco el mechon de pelo que tenía en la cara.

- ¿Eres como una versión pequeña de _________? - Cuestionó el azabache en voz alta. - ¿Ah? ¡Claro que no! Me gustaría, pero ni siquiera somos hermanas de sangre. - Rio entre dientes.

- A mi edad ella hacia muchas más cosas. - La influencia de su hermana mayor era evidente en la actitud de la niña, eso creía el muchacho presente.

Al azabache nunca le llamo la atención hablar con alguna de ellas, sus interacciones eran simples.

- No debería sofocarse. - Aconsejó, la pequeña lo miro e hicieron contacto visual. - No lo estoy haciendo. - Contestó, nuevamente juntó sus manos. - Me gustaría ser cazadora, estoy a la edad de entrenar. - Ninguno de los dos sabía que más comentar.

- Ah... - No sabía porque la niña le hablaba sobre eso. ¿Que tenía el para que ella le declarara eso de manera tan natural?

- Creo que no te interesa, no te culpo, apenas sabés mi nombre. - Su sonrisa se congeló. - ________ nos hablo sobre usted antes, hubo algo que me llamo la atención sobre eso. - Continúo.

- Una de las cartas decía; " Mi compañero es callado, pero agradable. Nunca lo he visto realizar una postura y tampoco me dijo que respiración manejaba, no le he preguntado directamente hasta ahora. " - Su buena memoria era algo poco visto.

- ¿Usted no puedo utilizar respiraciones? ¿Hay alguna manera de poder trabajar sin utilizarlas? ¿Cómo lo hizo? - La última pregunta fue como una golpiza, una patada en la cara y más. - Entrenaba en la ausencia de ________, algo que se volvía frecuente mientras pasaba el tiempo, pero no tenía resultados, "deja de gastar tu tiempo con tus falsas esperanzas, puedes hacer cosas mejores con tu tiempo." Eso era lo que me decía el entrenador de mi hermana, era cruel.