4 - Pueblo.

9.3K 957 1.2K
                                    

El día en que los chicos se iban a su misión luego de el entrenamiento, yo estaba en la habitación donde me había quedado a dormir ese tiempo.

Mis hermanas habían respondido mi carta, querían que las visite pronto. Yo también lo deseaba con todo mi corazón, pero mi trabajo de cazadora me mantenía ocupada.

Quería despedirme del grupo kamaboko. Así que los busque para decirles adiós.

Cuando encontré a Zenitsu, que estaba lloriqueando, me acerque a el. - ¡¡ ____-CHAN, SÁLVAME! - se pegó a mi pierna. No quería ir a la misión. Yo rei, me parecían graciosas sus escenas. - Has un esfuerzo Zenitsu. - Le dije con una sonrisa en los labios.

- Lo que _____-chan diga. - se seco sus lágrimas y sonrojado se levantó. - _____-chan es muy linda. - Tenía una sonrisa tonta en su cara. Nunca me habían coqueteado tan directamente, o por lo menos que me haya dado cuenta.

Luego llegó Inosuke y se lo llevó cargado. Antes de irse me dirigió unas palabras. - La próxima vez, te ganaré tonta. - Entendí que se refería a la corta pelea que tuvimos. - ¡Lo siento por el golpe! - parecía que tenía un moretón que era ocultada por su máscara.

Cuando partieron los saludé una vez más con las niñas.

Paso aproximadamente media hora desde eso. - Que hambre.. - Dije mientras que arrastraba mis pies por el pasillo.

Cuando doble por el segundo pasillo, observé que alguien también estaba caminando. Era Genya, automáticamente mis ánimos se levantaron. - ¡Genya! - Grite su nombre mientras que corría hacia el, moviendo mi brazo. - ¿Dónde has estado? ¡No sabía que estabas en la finca mariposa!

Mis ojos brillaban por la esperada respuesta de mi amigo. - Hola _____, yo- - antes de que pudiera terminar de hablar, mi estómago gruño y muy fuerte. De verdad tenía hambre. - ¡AHHHH! ¡Lo siento mucho! - me disculpé avergonzada.

Estaba mirando mis pies mientras que tocaba mi panza con las 2 manos. - ¿¡Porque me traicionaste?! - como si mi estómago me contestará lo regañe en mi cabeza.

- Si tienes tanta hambre.. Podemos ir a comer algo. No conozco por aquí, pero podemos preguntarle a alguien. - Levanté mi cabeza y mire su cara.

Los 2 estábamos avergonzados y mi rubor aumento al escuchar esa propuesta

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Los 2 estábamos avergonzados y mi rubor aumento al escuchar esa propuesta.

- ¡Oh, si! - Acepte un poco avergonzada. Luego le habíamos pedido instrucciones a un hombre algo extraño, nos dijo que había un pueblo no muy lejos de aquí que tenía puestos de comida muy buenos. Cuando llegamos al pueblo que nos indicó el señor note algo extraño, todo el lugar estaba decorado de rosa y rojo, la ropa de muchos también y habían muchos objetos con forma de corazón.

Estábamos mirando las cosas y de repente escuché la voz de una mujer que se nos dirigía a nosotros. - ¡Para la pareja! - Nos dió unos pastelitos que tenían un corazón aparentemente comestible. - Lo siento, pero no so- - Genya no podía decir una sola palabra, estaba rojo como un tomate, y cuando le estaba por aclarar la situación a la amable mujer, me interrumpió. - No sean tan modestos niños. ¡El amor puso a este pueblo en el mapa!

Incline mi cabeza confundida mientras que comía el pastelito. - ¿puede explicarme?

- Es fácil, ¡Este pueblo siempre se caracterizo por ser muy romántico y alegre! Y hacemos una feria anual dónde la felicidad y romanticismo está presento de principio a fin. - puso su mano en su mentón mientras que asentía para ella misma. - ¡Perfecto para una pareja joven, como ustedes! - Me sonroje tanto que competía con el rubor que tenía Genya desde que la mujer nos hablo.

- ¿Pasa algo? - Pregunto al ver nuestras caras. - ¿Cuánto le debo? - pregunté mientras que terminaba de comer el pastel.

- ¡Cortesía de la casa!

- ¡Gracias! - Agarre la mano de la Genya y salí corriendo, entramos a un callejón vacío.

- ¡Ese señor nos engaño! - Le dije a Genya mientras que me apoyaba en la pared. - De seguro pensó que éramos pareja y nos envió aquí por eso.

Genya no dijo una sola palabra. - ¿Estás bien? - Su cara seguía roja. - ¿Comerás eso? - Señale su pastel, el dijo que no con la cabeza.

- ¡En ese caso, haré los honores! - Di un mordisco a su pastelito. Limpie los restos de comida que tenía en mi boca y mire a la calle.

Todos los puestos tenían alguna clase de descuento a la gente que venía con sus parejas. - ¿Quieres pagar menos por comida? - Le pregunté luego de pensar por unos minutos, mientras que mis ojos brillaban.

Me miró confundido, su rubor de había calmado bastante. - ¿Que estás planeando?

- ¡Simple! Se mi novio. - ¿Dije que su rubor se había calmado? Estaba el doble de rojo que antes. - ¡Lo siento! Me explique mal. - Rei un poco y le expliqué - Mira todos los puestos, todos tienen descuentos para las parejas. Fijamos ser novios y consigamos los descuentos. ¿Que te parece?

- Mmm..

- ¡Por favor! ¡Genya, eres la llave para completar mi plan maestro! - Me arrodille y le rogué que aceptará.

- Está bien, ¿Pero y si alguien se da cuenta de que estamos mintiendo? - Me levanté con una cara de gloria.

- ¡Nadie nos conoce! Y si alguien intenta decir algo, diremos que éramos novios en secreto, pero ahora queremos oficializar la relación. - Rei con maldad.

- Tienes todo planeado ¿No? - Me pregunto mientras se rascaba la cabeza.

- ¡Mejor vámonos! - Agarre su mano y salimos del callejón listos para comer comida.

La tarde calló y nos habíamos comprado mucha comida incluso nos habían regalado cosas. Un hombre nos regaló unos collares y dijo "Son una pareja adorable".

Decidimos entrar a un café y descansar tomando algo de te, también conseguimos descuentos ahí.

- Debo admitir que no fue una idea tan mala. - Dijo Genya levemente sonrojado luego de darle un sorbo a su té.

- ¡Si, no sabía que está clase de ferias existían! Para el próximo año ya se quien será mi novio falso. - Dije mientras reía.

El solo se sonrojo un poco más y le dió otro sorbo a su té. Volvimos a la finca mariposa y cada uno se fue a la habitación que le habían asignado.

- Aún no tengo ninguna misión. - Pensé mientras estaba acostada en el futón mirando al techo.

La noche calló por fin, las únicas en la finca éramos Aoi, las niñas, Genya, algunos cazadores heridos que no conocía y yo.

No cene nada, estaba demasiado llena por lo que había comido en esa feria. Decidí irme a dormir temprano.

"Cuando te vea otra vez" || Genya Shinazugawa x Reader || Kimetsu No YaibaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora