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—Han.

—Perate que toy' ocupao'— Han Jisung estaba en el liceo, Changbin le había pedido si lo podía acompañar a buscar unas weas y el joven le había respondido que sí.

Pero justamente ahora estaba copiando la tarea de religión del cuaderno de Félix, quedaba 15 minutos para que sonara el timbre y cambiaran de clase y el profe de Inglés tan sólo había hecho un repaso.

—Jisung— volvió a llamar y el chico lo ignoró siguiendo con la escritura.

—ya hermano, me falta poco y te acompaño.

—Jisung.

—¡Puta weon! ¿podí esperarte un minuto? te dije que toy' ocu...— todo el curso se había quedado en silencio, no alcanzó a terminar la frase pues el rostro del profesor estaba frente a sí, con una ceja alzada y el ceño fruncido.
—Yo uh... profe perdón, pensé que era el Changbin.

El adulto lo miró unos segundos, el hombre era joven, estaba casi recién salido de la universidad. Al ver al estudiante todo nervioso relajó el ceño.
—Cuide su vocabulario Han, no estamos en la casa— Jisung no evitó sonrojarse, conchetumare, los niveles de verguenza de ese momento estaban superando todos su recuerdos anteriores. Afortunadamente el bullicio común de sus compañeros por conversar había vuelto quitándole un poco de incomodidad a sus hombros.

—Quería decirle, que tengo su registro de notas de la última prueba y me sorprende bastante de que sea tan baja.

Dicha prueba estaba frente a sus ojos, el adolecente no sabía que responder. En la esquina del papel estaba escrito con lápiz rojo un 2,1. Era extraño porque Jisung tenía uno de los promedios más altos en la materia junto con Félix quien prácticamente hablaba el idioma.

—chuta, me fue como el hoyo— murmuró revisando la hoja, había estudiado, no mucho porque creía tener los conocimientos, el problema fue que justo ese día andaba cansado, y durante el exámen había estado cabeceando.
—Igual, castigao' ya estoy, así que na' que hacerle— el profe rió con el último comentario, el chico era muy gracioso,  lo había notado.

—¿Se anda portando mal Han, que lo tienen castigado? Y yo que lo tachaba de obediente— weon copuchento, pensó Jisung.

—Obediente de a dónde, es que a mi mamá no le gusta na' que salga a protestar po, así que me tienen restringido en la casa.

—Igual es peligroso que vaya para esos lados, tiene que tener cuidado— le comentó con una sonrisa en el rostro.

—Si lo tengo profe, igual ya no voy a salir, así que no hay na' de que preocuparse— le daba lata no poder ir a marchar, pero su mamá había sido bien clarita, aunque no se notara, lo de la nota también lo tenía medio tristón, porque pucha, igual se había esforzado en clases y estudiando días antes.

—Le quería hacer una propuesta— Jisung alzó aus cejas confundido. ¿Qué era lo que le iba a proponer?
—Como usted es uno de mis alumnos con uno de los promedios más altos, le voy a dar una segunda oportunidad para que de la prueba de nuevo, porque tampoco es la idea que esta nota baje todo su nem— le brillaron los ojitos después de eacuchar eso, profe entero buena onda.

—¿En serio?— el mayor quien ya se había sentado sobre la mesa del alumno apoyando una pierna, le asintió.

—Pero tiene que quedarse callado porque los otros que dieron la prueba y les fue mal también, van a empezar a reclamar— día culiao pa bueno, no había ni que decir que Jisung era el favorito del profe.

—Buena, se pasó.

—El otro jueves después de clases voy a venir a su sala y le voy a tomar la prueba, estudie harto— dicho eso se levantó y se fué a sentar a su escritorio para guardar su cosas, debía ir al edificio de básica ahora.
El menor quedó pal hoyo, la media salvá que había tenido, el weon no le gustaba admitirlo pero si era medio mateo pa' las weas, pero no uno de esos que se sacan la cresta estudiando día y noche, es un weon cabezón por naturaleza, con prestar atención en clases y un repaso breve en la casa taba tikitaka.

Minsung Chilensis🇨🇱Where stories live. Discover now