Minsung Chilensis🇨🇱

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A las 10 de la noche se comenzó a arreglar, ya estaban casi en verano así que las temperaturas en pa capital estaban altas, Santiago tenía un clima extrañamente extremo.
Se vistió cómodo, después de todo iba a estar sentado 2 horas en una silla, asi que un buzo fue la mejor opción, en el torso llevaba su querida polera negra con estampado de limones y encima llevaba un poleron que le había robado al Young hace un tiempo.

Se veía piola, andaba cómodo y eso era lo escencial, tomó un uber hasta el mall, literalmente ellos iban a la ultima función del día, ¿por qué a Felix se le ocurrió ir tan tarde? Respuesta, porque al bastardo le gusta ver a sus amiguitos cagados de miedo y luego hacer bromas sobre eso.

Bueno, nada más que decir, llegó al tan esperado lugar, no rondaba nadie en el edificio y todas las tiendad permanecias cerradas, el teléfono en su bolsillo comenzó a vibrar y sonar por una llamada.

—¿Weon ya llegaste? Te estamos esperando a ti nomas

—Sisi estoy en el piso de abajo, perate voy corriendo, es que entré por el patio de comida y la escalera mecánica estaba apagada— se le escuchaba jadear cansado mientras corría por el amplio lugar.

—¡Ya corre, corre conchetumare!

—¡Ya voy! ¡ya voy!— antes de que Bin le dijiese algo más le colgó y guardó su celular en su bolsillo nuevamente sosteniendolo por encima de la ropa.

Avanzó por un par de tiendas más que estaba cerca y por fin logró llegar al dicho lugar, literalmente estaba todo su grupito y una pareja.
Corrió hasta los chicos y se detuvo frente a ellos aformandose de sus rodillas intentado recuperar el aliendo por la reciente actividad física.

—hola...chiquillos— saludó entrecortado por la inhalacion de oxígeno.

—Llegai tarde, de nuevo— reprochó Changbin, aunque en realidad estaba webiando, le gustaba fingir ser una vieja culia enojada, que a veces sus amigos no sabían si era webeo o de verdad le molestaba la impuntualidad.

—Pero llegué— respondió cuando ya se repuso.
—¿Ya compraron?— cuestionó curioso.

—Sí, me debí cuatro lucas, incluyendo las cabritas— Félix habló encaminando al grupo a entrar al lugar, todos lo siguieron sin reprochar y pasando los boletos por la revisión, obviamente llevaban botellas de cocacola en las mochilas, las bebidas salían demasiando caras si las compras en la confitería. Ni que fueran hijos de millonarios.

Como Dios manda se sentaron todos en el centro de los asientos en cadenita, y antes de que la película comenzara se pusieron a webiar.
Se sacaban fotos con flash, total no había nadie más en la sala.
Igual era bakan ir cuando no hay nadie y podí hacer lo que te cante la raja.

Los comerciales previos comenzaron, justo cuando estaban mostrando un trailer de otra película de miedo y todos se estaban poniendo nerviosos por las imágenes de un tipo turbio, Han soltó una risita y dijo las siguientes palabras.

—Ajaja, se parece a mi ex— y como todo estaba en silecio fue lo único que se oyó en el lugar haciendo a todos soltar una carcajada dejando de lado la tensión.

Incluso la pareja que estaba sentada unas filas mas adelante soltaron risas con ese comentario random.

—Yapo weon ¿en qué momento salen las weas raras y me cago de miedo?— preguntó el Changbin, la sala ahora parecía cafetería por lo natural que conversaban.

—No sé, pero no los invonquí po aweonao— Hyunjin se quejó sosteniendo la manito de su pololo mientras mantenía su cabeza apoyada  en el hombro del menor. Literalmente las dos personas de las filas más abajo estaban muy entretenidas escuchando las conversaciones.