#22

3.4K 460 204
                                    

—A la mierda...

—¡Me están jodiendo, no! —Gritó Yamaguchi a punto de caerse de la silla. Todos en la habitación se quedaron mirando la pantalla fijamente con la boca abierta.

—¡No mames! ¡Gucho, ya la hiciste! —Exclamó Kageyama sacudiendo al pecoso. Yamaguchi seguía sin poder pronunciar palabra. Una lágrima calló de sus ojos sin que se diera cuenta.

En la pantalla estaba su canal de YouTube. Todo se veía como lo había dejado hace unas horas, excepto por un detalle. El número de subscriptores había subido de unos 9000 subscriptores hasta 15,000. 15,000 suscriptores. Había empezado a subir vídeos hace aproximadamente un año porque quería una forma de ganar dinero pero no tenía el suficiente tiempo libre para un trabajo y ahora tenía 15,000 personas suscritas a su canal.

Su canal había crecido muy lentamente durante los largos meses que había subido covers y ahora, en casi dos meses desde que Yachi le había dado me gusta a aquel tweet, sus suscriptores se habían cuadruplicado. No lo podía creer. Todo había pasado tan rápido y no sabía cómo reaccionar a lo que tenía delante de sus ojos.

Hinata estaba gritando y moviendo a Yamaguchi en el asiento, Kageyama estaba sonriendo ligeramente feliz por su amigo y cuidando que Hinata no se cayera por andar brincando y borracho y Kiyoko estaba grabando la reacción y a la vez llorando con su amigo.

Pasados unos segundos, Yamaguchi fue capaz de hablar.

—¡¿Qué!? ¡¿Cómo?! ¡¿Por qué?! ¡¿Pero-?! ¡¿Qué está pasando?! —Yamaguchi subió los pies a la silla y abrazó sus piernas. Estaba en uno de esos estados en los cuales estás sintiendo tantas emociones al mismo tiempo que ninguna se mostraba.

Tantas veces en las cuales veía los números no subir en absoluto, tantas veces en las cuales había pensado en dejarlo, que no lo valía y que nada iba a resultar de ésto, tantas veces que editaba llorando pensando que nada de lo que hacía era suficiente; cada maldito segundo de dolor lo valió completamente para éste momento.
Yamaguchi ahora empezó a llorar de verdad.

Kiyoko cortó la grabación y abrazó a Yamaguchi, Kageyama dándole palmadas en la cabeza también.
Hinata entró al cuarto dando un portazo que alarmó a todos.

—¡¿Desde cuándo te fuiste, infeliz?! —Gritó Kageyama con la mano sobre el corazón.

—Que te valga verga —Dijo Hinata amablemente. Dejó una botella de vino en la mesa y tomó cuatro copas que había puesto en el piso hace un momento. —Prende la cámara, bebé —Le dijo a Shimizu y ella obedeció. Les dio a todos una copa y les sirvió vino. —¡Por el Gucho! —Exclamó.

—¡Por el Gucho!

—¡Tengo miedo, mamá! —Yamaguchi dijo y todos tomaron de su copa.

No hay que decir que obviamente todos se emborracharon aún más, Hinata casi salta por la ventana, Shimizu de alguna manera se quedó dormida en el techo de la casa y Kageyama se había quitado la camisa pero se la había puesto de nuevo porque Hinata no dejaba de decir vulgaridades y Yamaguchi se puso a cantar toda la discografía de Luis Miguel. En lugar de manejar a sus casas, todos se quedaron a dormir en el rancho de Hinata.

Tanto Natsu como la señora Hinata estaban muy confundidas.

I love you tooWhere stories live. Discover now