Capitulo 2: Alejate de el.

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Caminando distraída me pasaba por la mete Aidan una y otra vez pero algo me hiso pensar demasiado, en cómo estaba vestido y su gorra.

—Es el idiota del Jeep rojo. —Dije en voz alta tanto que hice que todos voltearan a verme.

— ¿Que idiota y que jeep?—Dijo Arlena acercándose a mí con cara de confundida. — ¿Y porque traes vendado el codo? —Me tomo sin ningún cuidado lastimándome.

—Aush, larga historia, después te cuento. —Dije tomándola del brazo para seguir caminando ya que siguen viéndonos como bichos raros.

—Ok como sea ¿Ya sabes el chisme de radio pasillo? Trata de una chica que hizo que el bombón de la escuela la llevara a enfermería y que la beso—Al momento de decir La beso callo en cuenta, la venda, y querer evadir la pregunta, mi hermana no es tonta, solo un poco lenta.

La amo y lo sabe.

— ¡Alena!—Grito sorprendida, de inmediato tape su boca eh empuje hasta la puerta ah espalda de ella, para sorpresa era el baño.

—Es mentira, no lo bese. —Me defendí y quite mi mano de su boca antes de que me mordiera, odia que le tape la boca.

— ¿Segura?—Dijo fulminándome con la mirada, solo le sostuve la mía.-Cierto, no eres tan aventada. Solo que no entiendo ¿Porque todos están haciendo un escándalo por ello?—Me encogí de hombros, después de platicar un rato y contarle lo que paso me retire a mi clase y ella a la suya.

Voy caminando por el pasillo a mi casillero, frente a mi veo que la gente se abre paso y deja ver a una tipa rubia, perfectamente maquillada, su cabello lacio hasta la cintura, delgada, trae tacones de aguja y camina con mucha seguridad en ella misma.

Adivino, ella es Joselyn.

— ¿Tu eres Alena?—Pregunto la chica al llegar y parece frente a mí.

—Sí. —Conteste sin quitarle la vista de encima.

—Me quieres explicar ¿Que hacías en los brazos de mi novio?—Me dijo avanzando más a mí, pero yo no me moví ni un centímetro, ya la tenía justo enfrente mío, está más alta que yo, claro los tacones de puta le ayudan demasiado.

—En primera pregúntale a él, ya que fue el quien me cargo y en segunda yo ni sabía que era tu novio.

—De una vez te lo advierto, aléjate de, el. —Dijo empujándome lo cual me hizo enojar. Nadie toca a Alena sin recibir su castigo.

—No te preocupes por eso, más bien habla con él y dile que deje de ser tan gentil con otras. —Le tome de la mano eh hice una clase de llave que logra hincarla en el piso. —A mí ni me vuelves a tocar y mucho menos a empujarme.

—¡Pelea!-Grito un chico, la solté de inmediato al notar que ya mucha gente estaba de chismosa y no quiero meterme en problemas pero fue en falso, llego el director.

–Señor Director, solo quiero decirle que yo no inicie nada, esta chica llego y me torció mi mano haciéndome caer al piso. —Se defendía en camino a la dirección, yo solo me quede callada y cruzada de brazos. Algo le eh aprendido a Arlena y sus líos, cuanto más alegas más grande será tu castigo. El director abrió la puerta para nosotras y la oficina no está sola, esta Arlena casi acostada en el sillón.

—Arlena ¿Qué haces aquí?—Pregunte confundida ¿Que no estábamos aquí por la pelea?

—Señorita Joselyn se puede retirar. —Dijo el viejo y salió sin decirle dos veces. Genial, la bola solo para mí. —Bien señoritas, ya que son nuevas tendré que decirle las reglas, una por ser nuevas les pasaré la pelea de hace rato en el pasillo.

— ¿Te peleaste Alena?—Pregunto Arlena sacada de onda brincando en la silla. —En eso yo no me metí ¿Que hago aquí?—Chillo mi hermana dejándome sola con el regaño.

—Bien y la segunda es que esta estrictamente prohibido estacionarse en mi cubículo. —Dijo muy furioso golpeando el escritorio con su puño cerrado.

—En eso no tengo yo nada que ver, yo ni siquiera se manejar. —Ahora yo me defendí, ella me dejo sola con la pelea yo la dejo sola con el estacionamiento.

—Gracias hermanita. —Dijo sonriéndome falsamente.

—Por nada, para eso son las hermanas. —Sonreí falsamente al igual que ella, el director me dejo retirarme y dejar sola a Arlena, mi mente decía que me quedara pero también me decía que Arlena me hubiera abandonado sin pensarlo dos veces.

Alergica al amor. (Editando.)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora