||7||

9.2K 1.1K 294
                                    

Esos dos meses que Draco pasó viviendo con Harry, sin duda fueron un reto, uno de los buenos.

Los chicos se conocieron mejor y tienen la confianza suficiente para conversar de todo lo que se les ocurra.

Luego del discurso de Harry, algunas personas cambiaron su trato hacia los demás, solo algunas. Mientras que las demás ahora por lo visto también repudiaban a Harry.

Lo único bueno de su discurso, fue que echaron  a Gutiérrez y en su lugar contrataron a una aurora que estaba del lado de Harry.

Claro que eso no era suficiente para que en la calle dejen de insultarlos. Así que los muchachos hacían la mayoría de sus compras en Londres Muggle.

Las peleas entre ellos eran por cosas tan insólitas como por ejemplo si compraban espaguetis de una marca o de la otra.

Claro, luego terminaban comprando sopa instantánea y casi ni se hablaban.

Lo cual ocurría casi siempre que hacían compras.

Pero lo que Harry adoraba de su convivencia era cuando le enseñaba cosas muggles a Draco, ya que el chico quería trabajar en el mundo Muggle (porque dudaba que en el mundo magico consiguiera trabajo).

Draco en secreto admiraba las cosas muggles, pensaba que eran muy ingeniosos para arreglárselas sin magia, los admiraba y respetaba mucho.

Harry se enorgullecía de ser quien le enseñara  a Draco las cosas muggles, y también le divertían mucho sus reacciones. Como cuando le enseñó la tostadora y está termino encantada -accidentalmente- ya que el rubio se había asustado cuando esa cosa plateada había escupido el pan tostado.

Claro que el único que aprendía no era Malfoy, sino que Potter también. Ya que Draco le enseñaba modales y costumbres de sangre pura. Harry orgulloso podía decir que tenía más modales, los cuales olvidaba en seguida claro está.

Pero no solo conocieron nuevas cosas, sino que se conocieron entre ellos.

Harry aprendió que Draco es un chico muy infantil (con los más conocidos) hace un puchero cuando quiere algo, o berrinches cuando esta enojado. Ama las golosinas, y cuando están solos se olvida de sus modales, le gusta más leer que ver tele y es fanático de ir en el carrito del supermercado. También notó que cuando Draco no está cómodo en un lugar, se para erguido, levanta su mentón y borra todas las emociones de su rostro. Es una persona sumamente respetuosa que no lo va a pensar dos veces en decirte, con su calma infinita, que te vayas a la mierda.

Draco descubrió que Harry trata a todos por igual, con respeto y cariño, pero que cuando está con sus amigos el los cuida y quiere mucho. Descubrió que el chico es una persona muy afectiva físicamente, ya que le da abrazos, siempre sostiene su muñeca o busca cualquier excusa para que estén muy juntos. Descubrió que sus tíos y su primo son personas muy desagradables, y que aunque su infancia no haya sido la mejor él es muy noble para culparlos de algo. Es demasiado Gryffindor, con algunos toques de Hufflepuff según él. Él nunca espera nada a cambio, y cree que todas las personas son buenas, solo hay que enseñarles a sacar su luz interior.

En su convivencia acordaron que los domingos se turnarían para elegir que actividad hacer. Y los días de lluvia serían sus días de películas.

Los amigos de Harry rápidamente pasaron a ser amigos de Draco y viceversa.

Los chicos se llevaban muy bien, más que bien en realidad.

||○||

Ese día le sacaban el yeso a Draco, y esta vez su madre no podía acompañarlo, así que solo fueron él, Harry y extrañamente Luna Lovegood.

Mientras esperaban el turno de Malfoy, Sophia apareció contenta a saludarlos.

Les dijo que terminaba su turno, y lo invitó a Harry a tomar un café y ponerse al día.

Harry miró a Draco y estaba por negarse, diciendo que lo estaba acompañando a su amigo, cuando Luna habló.

—Tranquilo Harry, yo acompaño a Draco— Dijo con su dulce y cantarina voz.

En lo que canta un gallo Harry ya estaba siendo llevado por su amiga. Miró a Draco quien solo sonreía y se despedía con su mano sana.

—Señor Malfoy.

Draco suspiró cuando lo llamo el doctor. Y con Luna entraron al consultorio.

Cuando el chico vio esa máquina que usaba el doctor para romper el yeso agarró la mano de Luna, quien solo sonrió.

—Éste es un tatuaje interesante, jóven— Murmuró el doctor al ver la marca de mortifago. Draco solo asintió sin verla.

Luego de que el doctor le explique ciertos cuidados y rehabilitaciones que debía hacer se fueron. Claro que no le dieron importancia a las indicaciones del doctor, ya que por algo eran magos, y un simple hechizo lo ayudaría.

—¿Qué es un tatuaje?— Preguntó Draco mientras salían del hospital.

—Son esos dibujos en la piel con tinta que no sale, los muggles se hacen muchos tatuajes muy lindos. Mira, yo me hice uno aquí en la muñeca— Explicó Luna, y luego le mostró el pequeño tatuaje de una luna rodeada de distintas constelaciones. —Los tatuajes, igual que las marcas, no salen si los cortas, lo que podes hacer para que no se vea, es taparlo con otro tatuaje.

La razón de ese comentario, fue que Luna vio las pequeñas líneas horizontales sobre la marca de Draco.

Ambos chicos continuaron caminando hacia la cafetería para buscar a Harry, cuando entraron vieron que Sophia estaba muy cerca del chico.

Draco automáticamente frunció el ceño.

Luna, en cambio se acercó hasta los chicos, y cuando Sophia estaba por besar a Harry, habló.

—Harry, estábamos buscándote — Dijo Luna sonriendole— ¿Vamos?

Harry se despidió de Sophia y prácticamente salió corriendo de ahí con Luna y Draco. Cuando ya iban caminando unas cuadras suspiró y le agradeció a la chica.

Malfoy seguía con el ceño fruncido.

||○||

—Hey Potter, hoy empezarás a superar tu miedo de dormir sólo.

Desde que habían vuelto con Luna, entre ellos había un silencio muy incómodo, Harry no sabía si había echo algo malo, pero Draco casi ni le hablaba.

Harry intentó resistirse diciendo que en verdad no tenía apuro, pero el rubio no lo escuchó.

Con magia llevó el colchón del suelo hacia la habitación restante, y obligó a Harry a acostarse ahí.

La verdad era que Draco no tenía planeado eso, solo que, cuando vio que esa chica estaba por besar a Potter se sintió molesto y dolido, y no entendía porque de eso. Así que esa era su forma de decirle que no le agradaba esa tal Sophia.

Un método poco efectivo, yo lo sé, tú lo sabes y él se dio cuenta en la madrugada, cuando luego de darle mil vueltas a ese pensamiento, descubrió que eran celos, y la verdad es que empezaba a sentir algo por cierto chico de ojos verdes.

—¿Malfoy?

Draco miró a la puerta y vio que Harry estaba ahí parado envuelto en una manta, con la almohada bajo el brazo. Sus ojos estaban llorosos y tenía un puchero.

Le hizo un espacio en la cama, el cual Harry no tardó en ocupar. El rubio abrazó a Harry, quien se recostó en su pecho.

—Yo tengo pesadillas, desde siempre, pero luego de la guerra estás empeoraron, y no me gusta despertar sólo. Me tranquiliza saber que hay alguien a mi lado...

—Tranquilo Harry—Draco le acarició el cabello, y le besó la frente, diciéndole que estaba ahí, que no se iba a ir.

||         ○         ||

holi!
Ya quería escribir está escena , la idea estaba de antes de pensar siquiera en el título de la historia😂

El derrumbe de la mansión Malfoy Where stories live. Discover now