Naruto x Jujutsu Kaisen.
Él era libre de mover las cosas a su antojo. Tanto en los cielos, como en la tierra.
Enemigos, aliados, buenos, malos, maldiciones, humanos. No importaban. Él estaba por su cuenta.
¡Ese era Uzumaki Naruto!
Naruto bebia su bebida de chocolate ignorando las miradas impacientes de sus kohais.
- Está rico~
- ¿Y?- preguntó Nobara.
- ¿Y qué?- respondió Naruto confundido.
- ¿Y qué paso con la pelea?- exclamó la chica.
- Ah~ Cierto. No tengo muchas ganas de contarla- mencionó dándole otro sorbo a su bebida.
Repentinamente, Nobara agarro una de las orejas del chico comenzando a tironear.
- Duele, Noo-chan. Está bien, lo contare, lo contare- dijo haciendo que la chica parara su acción-. ¿En que parte me quede?-
- En la de-
- Ah, ya me acorde~ interrumpió Naruto a Nobara haciéndola enojar.
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¡Tromp! ¡Crash! ¡Tump! ¡Tump!
El ruido de pisadas y construcciones caer resonaron por toda la escuela.
¡Crac!
Una de las paredes se destruyo en pedazos.
Yuta, acompañado de Rika, y Naruto, salieron del agujero con expresiones serias en sus rostros.
- Curalos- exclamó Naruto sin ver a su compañero.
Del agujero salieron seis maldiciones con formas de fetos humanos. Tenían una apariencia grotesca, midiendo casi tres metros cada uno.
- San no Ten (Tercera mano)-
Con un aplauso, el Bodhisattva detrás suyo lo imito aplaudiendo, aplastando con sus palmas a las maldiciones.
Pronto, un río de sangre manchó el suelo.
- Para empezar, más vale cantidad que calidad- mencionó sereno Geto observando todo-. Veamos de que estas hecho, Uzumaki-
Geto alzo su brazo invocando decenas de maldiciones con apariencia de ciempiés.
Se arrastabran con sus extremidades por el suelo y paredes yendo contra el estudiante, que solo estaba parado observándolos ir hacía él.
- Ichi no Te (Primera Mano)-
Con un golpe en forma de chop, la palma dorada los redujo a polvo.
- Maravilloso- halago Geto viendo la enorme fisura en el suelo, producto del golpe-. Pero, ¿aquella técnica no es un arma de doble filo para ti?- preguntó sonriendo sabiendo la respuesta.
¡Tsk!
Naruto emitió un chasquido molesto.
El Bodhisattva consumía una enorme cantidad de energía maldita cada vez que era usado. Tanta que solo podía permitirse invocarlo unas ocho veces al día.
