𝘀𝗲𝘅𝘆 𝘀𝗮𝗱𝗶𝗲 ↝ 𝙩𝙝𝙚 𝙗𝙚𝙖𝙩𝙡𝙚𝙨

76. Grow old with me

Sadie, marzo de 1978

- Ay dios, no de nuevo.- murmuré al oír el llanto del pequeño James.

Mi hijo ya tenía cinco meses, pero aún así sufría de cólicos, por lo que en todos estos meses no habíamos tenido una sola noche de descanso profundo.

- Voy yo.- escuché decir a Paul
- No, tranquilo, tu fuiste hace unas horas.- dije

Me levanté para ir a calmar el llanto de James, pero de pronto paró. Al llegar al cuarto vi a Astrid meciéndolo.

- Eres la mejor madrina del mundo.-

Ella soltó una muy suave risa.

- Lo menos que puedo hacer es cuidarlo, desde que estás dejando que me quede en tu casa.-
-As, te he dicho que no tienes que hacer nada a cambio, mientras te mantengas alejada de las cosas que te hagan daño, todo estará bien.-

Ella asintió.

- A veces extraño Hamburgo y a mis padres, pero no creo poder soportar un interrogatorio más respecto a que voy a hacer con mi vida y que cuando me voy a casar.-

Pasé una mano por su espalda.

- Te entiendo, creo que me pasa un poco lo mismo, pero por razones distintas.-

Las dos reímos esta vez.

A la mañana siguiente estaba completamente exhausta, como ya era costumbre, pero igual tuve que dirigirme a los estudios para hacer unas sesiones de fotos.

Durante un pequeño receso que tuve, Patrick empezó a hablarme de una pequeña gira que había planeado por Europa, pues distintas marcas me querían en distintas pasarelas.

- Entonces el 10 de Septiembre estarías en Roma, pues ahí será la pasarela de Saint Laurent...-

Estaba a punto de quedarme dormida ahí mismo, cuando llega Paul de repente.

- Hola, espero que no sea muy tarde para que vayamos a almorzar.-

¡Mi salvador!

- No, para nada, Patrick ya terminó.-
- Sadie, nos quedan cuatro ciudades más...-
- Los discutimos después, y mira, ahora que debo de practicar italiano te voy a decir, arrivederci, Pat.-

Dejé a mi pobre representante con la palabra en la boca.

Salí del estudio riendo con Paul y nos dirigimos a nuestro restaurante favorito.

- Así que irás a modelar para Saint Laurent en Italia.-
- Así es.-
- Genial, serás la cosa piú bella dalla Italia (la cosa más hermosa de Italia).- 

Reí ante el intento de italiano de Paul.

- Perché dici ché è sono una cosa? io sono una donna (¿Por qué dices que soy una cosa?, yo soy una mujer).- respondí

Paul me miró sorprendido.

- ¿Sabes italiano?-
- Casi nada, en realidad aprendí un poco porque cuando era pequeña tenía una vecina italiana que me prestaba discos y libros, y como es parecido al español no me fue difícil aprender algunas frases.- dije

Paul me miró con una sonrisa.

- Eres muy inteligente.-
- Ay, estás muy halagador hoy.- dije

Seguí comiendo de mi plato de comida, mientras sentía la mirada Paul, aún en mí.

- ¿Qué?- dije, para luego soltar una risilla nerviosa.
- Cásate conmigo.-

El agua que estaba tomando después de comer mi último bocado de comida, provocó que casi me ahogara.