7. Friday i'm in love

338 26 8
                                    

Sadie

Estaba demasiado feliz, todo lo que me pasaba era lo mejor que me había pasado nunca, John y yo éramos novios, yo tenía muchos amigos y amigas, me iba espectacular en la escuela. Evidentemente había un problema y era la situación de mi padre, pero eso era algo imposible de solucionar a menos que mi mamá se arme de valor y lo deje o que él muera. Llámenme insensible pero la idea de mi padre muerto no me causaba pena.

-¡Oye guapa!-

Y ahí estaba mi apuesto novio, tan rebelde y genial, como siempre.

-Hola guapo.- le dije mientras le daba un beso en los labios.

Como siempre me venía a recoger después de la escuela, solo a mí, pues Star siempre tenía actividades extracurriculares.

-¿Como estuvo tu día?- preguntó John
-Bastante bien, saqué 85 puntos en matemática, ¿puedes creerlo?, jamás me he sacado una A en matemática.- dije feliz
-Pequeña genio.- dijo para luego abrazarme.

Seguimos caminando hacia su casa, esa hermosa tarde de octubre, hacia un poco de frío, pero nada me importaba si iba con John al lado mío. Aunque la verdad, es que si había algo que me inquietaba, y eso era el hecho de que aquel profesor de química no me dejaba en paz, y todos los días después de clases, se me insinuaba, asquerosamente. Trataba de olvidar eso, y enfocarme en lo que estaba haciendo en el minuto.

-Sadie, ¿te gustaría acompañarme al concierto de esta noche en el bar?- preguntó
-Pues claro.- dije sin pensar

Estaba locamente enamorada, si John me hubiera pedido que me escapara del país con él lo habría hecho, sin pensarlo dos veces.

Aunque ese fue el error, me llevaría un gran sermón de mi madre después de aquello, pues llegaría a casa a la madrugada, como solía hacerlo los últimos viernes y sábados.

Supongo que no llegaría a más que a eso, mi mamá tenía que preocuparse de otras cosas, como de sacar a mi borracho padre del bar a las 8 de la mañana.

Al llegar a casa de John hice lo usual. Saludar a Mimi, platicar un momento con ella y con John mientras comíamos de las galletas que había comprado en la panadería del frente y bebíamos del té que ella hacía, para luego despedirnos de ella pues se iba toda la tarde al club vecinal de viejas chismosas, perdón, perdón, de mujeres de la tercera edad.

-Hmm Lennon, creo que estas tardando un poco en lo que ya sabes que deberías hacer.- dije

John solo río, me tomó de la cintura mientras yo enrollaba mis piernas en sus caderas y el me subía a su habitación. Mmm sí, está era la mejor parte de la rutina de los viernes.

-Wow, Sadie, cada vez te estas haciendo más experta en esto.- dijo John al terminar.- ¡Tenga piedad conmigo señorita, no soy una máquina sexual!-.
-Cállate idiota.- le dije.- Admítelo, eres el más encantado con esto.-

El solo río, y me dio un beso, para luego sacar un cigarrillo de la cajetilla que tenía en la mesa de noche y prenderlo.

-¿Dame?- le pregunté

El me miró sorprendido y me lo tendió.

-¿Se puede saber desde cuándo fumas?- preguntó él.

Di una calada y se lo devolví

-Desde el viernes pasado, Paul me enseñó.- comenté
-Ese Paul McCartney es una mala influencia.-
-Hey, el que acaba de tener sexo conmigo eres tú.-

Ambos nos reímos.

-Eres una irreverente, Sadie Jones.- dijo John

Miró la hora en su reloj y comenzó a vestirse.

-Alístate debemos de ir a casa de Colin para recoger los instrumentos que su padre nos presta.-

El terminó de alistarse para luego mirarme seriamente.

-Vamos Sadie, sabes que esto es importante para mí.-

Lo miré.

-Te quedan 20 minutos y Colin vive a unas cuantas calles de aquí, además no quiero vestirme.- dije
-¿Entonces te visto yo?- preguntó John sarcástico
-Shi.-
-Eres una engreída Jones.-

Comenzó por ponerme los calzones con rosas bordadas que tenía, para proceder a ponerme el sujetador. Aprovecho de besar mis brazos, haciendo camino hacia mis clavículas. Procedió por ponerme  un vestido de los que yo había dejado en su casa, por precaución, para luego cerrar lentamente el zipper de este.

-Ahora sí, ¿nos vamos?- preguntó John.

Tomé sus mejillas y lo besé

-Te amo.-

Me miró sorprendido y sin decir nada. Y la verdad yo no esperaba nada, sabía perfectamente que él era un Teddy Boy, uno de esos chicos rudos que nunca dicen te amo.

-También te amo, Sai.- dijo él con una sonrisa- el viernes estoy enamorado.

No lo podía creer, estaba mirándolo estupefacta mientras todavía estaba echada en su cama.

-Ve a peinarte querida, yo voy a hacer la cama para que Mimi no sospeche.-

Feliz, corrí al baño de su casa, para hacer lo que me pidió.

El viernes es que estoy enamorada.

𝘀𝗲𝘅𝘆 𝘀𝗮𝗱𝗶𝗲 ↝ 𝙩𝙝𝙚 𝙗𝙚𝙖𝙩𝙡𝙚𝙨Donde viven las historias. Descúbrelo ahora