Russell [+18]

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Retuerzo mis manos y camino de un lado a otro mientras espero a que papá salga de la oficina de Magnus. Ellos dos habían entrado hace media hora y no han salido todavía. Magnus a estas alturas ya debió de decirle a mi padre lo que descubrió de Stella ya que antes no pudo hacerlo.

Malcolm estaba sentado comiendo unas galletas que había preparado esta mañana y estaba tan ensimismado en ello que no me prestaba mucha atención. Me alegraba que su apetito cada día es mejor.

Mi mente se dirigió a otro lado y no pude evitar revolver mi cabello. Lo que pasó ayer tal vez nos traería consecuencias.

No habíamos usado protección y aunque no hayan acabado dentro de mi el embarazo es algo que podría ocurrir. No podía tomar la pastilla del día después porque la había tomado hace mes y medio por mi encuentro con Jason y es arriesgado tomarme otra por un período de tiempo corto. Le había comentado esto a ellos cuando me mencionaron la pastilla y tuve que tener el valor para informarles que la había tomado hace poco. Fue incómodo para todos pero es una información que ellos tenían que saber. Magnus se negó a ponerme en cualquier peligro y preguntaría a un experto primero solo para asegurarse si sería dañino volverla a tomar.

La primera vez que tuvimos sexo fue algo que se nos olvidó pero ahora no. Estaba segura que no había quedado embarazada y si hubiera quedado probablemente ya habría tenido un aborto con los brutales golpes que me había dado Escorpión.

Esperaba que Magnus me dijera que no es riesgoso tomarla. No podía tener un bebé en estos momentos estando en una situación tan peligrosa. Tendría que irme a Londres con ellos y dejar a mi papá y eso no lo quería hacer. No quería dejarlo solo.

La puerta del despacho de Magnus se abre y salen los dos, puedo ver la furia en los ojos de mi padre y como trataba de respirar profundo para calmarse mientras tenía una botella de whisky y un vaso en la mano.

Papá me miró y suspiro.

- Bien. Es momento de decirte la verdad. - El camina hacia un sillón y se sienta. Malcolm se levanta y junto con su hermano intentan salir del salón. - Pueden quedarse. Ustedes ahora son el apoyo de mi hija y creo que sabiendo también la historia sabrán cómo ayudarla a asimilar lo que voy a decir.

Magnus y Malcolm se miran pero luego se sientan en un sofá y yo lo hago frente a mi padre.

Él suspira y revuelve su cabello.

- Por dónde empezar... - Respira hondo y me mira. - Mi padre llegó a la edad que necesitaba un heredero y se juntó con una mujer la cual apreciaba mucho, era su mejor amiga y su mano derecha. Nací yo y desde los tres años mis padres se encargaron de darme la crianza más estricta y sangrienta. Querían que su primogénito fuera indestructible. Desde pequeño me enseñaron a ver la sangre, los golpes, la tortura y la muerte como algo normal. Crecí viendo a mi padre y madre matando y descuartizando personas. Mi padre era un maniático y cuando se trataba de venganza era él más sádico y sangriento de todos. Ellos querían que tuviera lo mejor de cada uno y lo lograron.

Él hace una pausa y se sirve un trago para tomarselo rápidamente, él aprieta un poco sus ojos y por alguna razón sé que viene algo importante.

- Cuando tenía solo dos años paso algo que mis padres no tenían planeado y tampoco era algo que desearan... Mi madre quedó nuevamente embarazada. - Puedo ver cómo los ojos de mi papá se cristalizan un poco. - Pero lo que menos esperaban era que venía por partida doble. Mi madre quedó embarazada de gemelas.

Ahora entendía ese "Las Russell"  lo entendía muy bien.

Tome aire al escucharlo y me agarre de los posa manos del sillón. Esa gran información estaba iluminando toda la oscuridad y podía imaginar que pudo haber pasado.