Russell [+18]

42

Seguí pasando mis manos llenas de aceite sobre la espalda de Magnus mientras presionaba levemente para quitar sus tensiones.

Estaba ahora mismo sentada sobre su trasero mientras le hacia un masaje a mi rey supremo. Hoy había llegado más cansado de lo normal y quise consentirlo como se lo merecía.

Malcolm estaba a un lado de nosotros comiendo palomitas mientras veía fijamente la pantalla de la televisión con una película reproduciéndose.

Mire la mesa de noche y vi la pastilla de emergencia esperando a que la tomara.

Magnus había consultado a un médico y dijo que si podía tomarla que no pasaría más que un desvalance de hormonas y de período, pero que esta es la última pastilla que podría tomar en un tiempo ya que si podría haber un descontrol de mi periodo si llegaba a ingerir otra de nuevo.

Así que había decidido volver a tomar anticonceptivos y el lunes tendría cita con un ginecólogo para decidir que método utilizaría y cuál es el adecuado para mí. Podría simplemente volver al mismo que utilizaba antes pero los cuerpos cambian y no quería accidentes.

Al final de conocer la gran historia de mi familia y que papá supiera que hablaría con Damián, él había tomado hasta que quedó totalmente borracho y tuvo que quedarse e irse hoy en la mañana.

Es difícil para mí dirigir toda esa información.

Tuve tías, tías que Escorpión destruyó con su mente enferma y retorcida. Temía aún más por mí madre sabiendo lo lejos que podía llegar ese hombre sin importarle nada. Si no les importó sus propias hermanas ¿Por qué le importaría mi madre? Cada día que pasaba más miedo tenia por ella. No había duda de que está viva pero en qué condiciones la podría tener Escorpión es lo que me tortura.

Papá tiene todo fríamente calculado y sé que está esperando algo, algo que yo no sabía pero lo dejó muy en claro ayer.

- Mi reloj está a punto de marcar la hora para poder dar mi primer paso. Nadie lo espera y nadie lo sospecha. He dejado a cada uno de mis enemigos vagar por las calles con tranquilidad sin saber que pronto los arrastrare a mi infierno para arder en mis llamas. Todos caeran... Uno por uno. Desde el más débil y estúpido hasta él enemigo más fuerte y letal.

Tenía que estar preparada para lo que venía porque sabía que papá y yo tendríamos nuestro momento y conociendolo él serviría mi plato primero.

- Nuestras madres llamaron hoy. - Salgo de mis pensamientos al escuchar a Malcolm hablar. - Quieren hablar contigo pero no les haz contestado el celular.

- He estado ocupado todo el día y lo sabes. - La voz relajada y pacífica de Magnus me hace sonreír un poco.

- Lo sé. Se los dije y por eso me dijeron que por favor llamaras cuando tuvieras tiempo.

- Lo haré mañana.

Aprieto un poco y recorro mis manos lentamente hacia arriba y escucho un pequeño gemido que me hace bajar mi cuerpo y empezar a besar su cuello haciéndolo estremecer.

- Si sigues haciendo eso no me importará embarazarte. - Me río y vuelvo a subir para continuar el masaje.

- Esta es la película más aburrida que he visto. - Malcolm dice mientras sigue viendo concentrado la película.

- ¿Por qué la sigues viendo? - Pregunto.

- No lo sé. - Responde mientras sigue observando la película.

Me río y bajo de la espalda de Magnus acostandome entre él y su hermano. Mi rostro queda frente al de mi rey supremo quien tenía sus ojos cerrados.

Escucho como Malcolm empieza a cambiar los canales y lo deja en un noticiero. Me volteo para observar yo también cuáles han sido los últimos sucesos en Miami y ruedo mis ojos a la gran casualidad que van a hablar de mis hombres.