C6: Demonios y Mentiras (Parte Uno)

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esto es demasiado fluff para mi corazón de pollo.

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Repitiendo una de las únicas reglas que respetaría (sólo porque Lan Zhan no querría que la ignorara, ni que el "viejo" Qiren le gritara en su nueva apariencia) como un mantra, hizo el recorrido hasta la biblioteca en tiempo récord. Sentado, en pulcritud, santidad e indiferencia, encontró al segundo joven Lan escribiendo, ¿transcribiendo?, con el pincel en la mano, dibujando caracteres exactos, elegancia completa que lo embelesaría por más tiempo si no tuviera nada que decir en ese momento. 

"¡Lan Zhan!" Cabe recalcar que no gritó, solo habló lo suficientemente alto como para ser escuchado y darle a su entrada un toque dramático. Pero el joven frente a él ya había notado su presencia momentos antes de hablar, por eso la respuesta fue dada más rápido de lo normal.

Wei Ying.

"Gritar está prohibido en los Recesos de la Nube." Dijo en realidad, aunque las palabras que escuchó antes y el anhelo no pudieran ser ocultadas ni ignoradas. Wuxian trató de no centrarse en ellos, como la persona densa que es. En cambio, se enfocó en el reproche del joven Lan. 

¡Pero ni gritó! Wuxian iba a refutarle, pero vio las pestañas suaves revoloteando, párpados casi cerrados, en miradas furtivas que trató de no darles un significado aparte del platónico. Perdido en esa sensación de vuelo, se olvidó de cualquier argumento formado en su cabeza.

"Ay, Lan Zhan." Acercándose en pasos grandes, lentos pero muy rápidos para Wangji, sentía que su círculo seguro y tranquilo era interrumpido, y se confundía aún más por la falta de inconformidad que causaba el joven. Wuxian dio un vistazo al papel, tarareando feliz, ¡Lan Zhan escribiendo era lo mejor del mundo! Mano tocó sus labios, movida inconsciente que sacó de sus pensamientos al joven frente a él, y regresó al tema principal. "Bueno, de seguro te preguntarás por qué estoy acá."

No esperaba (o sí, quien sabe) que Lan Zhan bajara la mirada y mascullará un aburrido, volviendo a levantar el pincel, sin escribir nada por unos segundos que se sintieron como minutos a su parecer.

Wuxian esperó a que la mente de Lan Zhan contestara, su emoción desinflándose un poco al no escuchar nada aparte del suave rechazo. Wangji notó sus pensamientos, sutiles movimientos no pasaron desapercibidos. No quería saber, pero sí quería, no quería, pero quería. Era algo que Wei Ying le diría, pero, ¿y si era algo concerniente a alguien más? ¿Le diría que encontró a alguien interesante? ¿Podría controlar sus emociones, sus pensamientos? Hace unas semanas la respuesta sería certera, pero no puede asegurar nada ahora... Un debate mental que no duró más de unos segundos (por lo que Wuxian no pudo escucharlo y pensó que lo ignoraba/rechazaba) terminó en la victoria unánime de la curiosidad por el adolescente. Suspiró, deberá mejorar esa parte de debilidad en su cabeza. 

...Quiero saber.

"¡Jeje! Sé que me estás escuchando, así que lo diré igual." Risita contenta, sumada a la aún más cercana proximidad del contrario, hicieron que volviera a quedarse en blanco. Wuxian se sentó mientras hablaba, túnicas demasiado sueltas, demasiado desordenadas, demasiado cerca. Demasíe que no lo dejaba enfocarse en nada. 

Ajeno a sus líos internos, Wuxian siguió hablando. Recordando y gesticulando con cada palabra, cabello recogido se balanceaba en consecuencia. Sus túnicas, sus túnicas, sus túnicas... "¿No te prometí que te llevaría a comer algo delicioso? ¡Deberías probar nuevas cosas!"

Quedó en silencio, sin tener respuesta, por un buen rato. Murmuró Lan Zhan, al menos cinco veces antes de que el otro saliera del estupor. Bajó la mirada, encontrando una solución efímera a la desesperación y confusión con sus emociones. Si no lo veo, no hay consecuencias. "Mn, lo recuerdo."

¿¡Qué estás pensando, Lan Zhan!?Où les histoires vivent. Découvrez maintenant