lessons, payton moormeier

012

012: retratar

Los chicos se despidieron de mi cuando salieron prometiéndome que el viernes saldríamos.

Tome mis cosas caminado a mi lugar en frente de su escritorio y espere a que me diera las indicaciones.

—Hora de dibujar—sonreí para mis adentros sacando mis cosas, quería deshacer esto. Es mayor que yo y es mi profesor—. ¿Estas bien?—asentí abriendo mi cuaderno—. Estoy hablando enserio, ¿qué te pasa?

—Le dije la verdad, estoy bien.

—¿Te molesto algo que hice?

—No, claro que no, le estoy diciendo la verdad—fruncí el ceño.

—¿Entonces porque me has estado evitando?

—No lo he estado evitando profesor, no hizo algo que me molestara y de verdad estoy bien.

—Ahora dímelo sin que esquives mi mirada—bufe levantando mi mirada.

Un escalofrió se expandió por mis brazos, pecho y espalda cuando lo vi, su profunda mirada me veían detenidamente con los brazos cruzados.

—¿Qué te pasa? Ya nos llevábamos bien y ahora te comportas como en el primer día—parpadee una veces pensando que contestar.

Nada profesor solo se que siento algo por ti pensé mientras buscaba una excusa del otro lado de mi cerebro.

—No, no me pasa nada solo eh...estado distraída—hice una mueca y el arqueo la ceja.

—¿Entonces te hice quedarte aquí para nada? Tienes que poner atención para entenderlo y si estas distraída no entenderás nada—apreté mis labios sin encontrar las palabras para contestarle—. ¿Hay alguna forma de...no se centrar tus pensamientos en una sola cosa?

—Dibujando.

—Entonces vas a dibujar, no te voy a poner algo, dibuja lo que quieras—una espantosa y maravillosa idea paso como un rayo de luz.

—¿Lo puedo dibujar?

—¿Dibujarme?—asentí—. Eh, claro—sonreí sacando algunos lápices.

Me senté cómodamente ladeando mi cabeza viéndolo, no se en que punto estamos para que pueda arreglarle el cabello y ropa. Rasque mi cabeza dudándolo.

—¿Pu-puede amarrarse el cabello? Como eh el otro día—me golpeé internamente ante mi tartamudeo.

El sonrió sacando una liga de su maleta y juntando su cabello hasta amarrarlo en un pequeño chongo como el otro día.

Trate de esconder una pequeña sonrisa asomándose en mi rostro bajando la cabeza.

Negué con la cabeza tomando el lápiz y volviendo a mi posición para verlo.

—¿Tengo que posar...o eh que se supone que haga?—reí.

—Puede hacer algo que tenga pendiente no necesito que esté como estatua—sonreí viéndolo, me levante de la silla sacando algunos pequeños mechones de su cabello para después sentarme.

No se si me pase, tal vez pero en este momento no quiero ponerme más nerviosa.

Apreté mis labios comenzando a hacer el sketch.

—Tu familia es agradable—sonreí quitando las ganas de reír a carcajadas.

—Que bueno que lo piense así.

—¿No te llevas bien con ellos, cierto?

—Por supuesto que si, somos el tipo de familia que ve en las películas—reí negando con la cabeza.

—Tu hermana...¿sigue en la escuela?—bufe, oh vamos donde diga que le intereso le estrello la libreta en la cabeza y no volveré a este salón.

—Universidad, repitió alguno que otro año mientras estudiaba derecho—voltee a verlo y después baje la mirada para seguir dibujando.

—Me parecía raro que...siguiera viviendo en la casa de sus padres.

—Juro que yo salgo antes de esa casa que ella.

—No se llevan bien ¿por que?—me encogí de hombros.

—Nunca hemos tenido la relación de hermanas como muchos dicen tener.

El silencio inundó el salón, solo se oían nuestras respiraciones y mi lápiz en la hoja moverse.

—Mi familia y yo tampoco tenemos la mejor relación—subí la mirada cuando hablo.

—Estamos en el mismo club—ambos sonreímos cuando nuestras miradas chocaron.

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dos más porque soy buena.