El Prominente (gay)

Capitulo 5

Alan era un chico sociable, viniendo de un familia de clase media su vida no se salía de lo normal, tenia su grupo de amigos, entre ellos estaba Matias, lo conoció a los 12 años, cuando Alan era nuevo en su ahora escuela.

    Uno de los lugares más concurridos en la vida de Alan era la casa de su mejor amigo Matias, iba siempre después de la escuela, yéndose antes de que oscurezca, Alan conocía a todo la familia nuclear de Matias, sus padres y su hermano, los veía casi a diario, tanto que Alan ya estaba acostumbrado a estos.

    Angelo  estaba caminando por las calles de esa pequeña ciudad de camino a su escuela, generalmente se iba acompañado de su hermano mayor Matias, pero esta vez fue distinto, Matias dejo a su hermano menor a su suerte ya que estaba molesto con el pequeño, yéndose con Alan.

    En el camino, ya a una cuadra de la institución, vio a Scott, en su lindo auto rojo, muy llamativo e imponente, en el vehículo iba Scott como copiloto siendo acompañado por su novia en el asiento del copiloto, se veían serios, se podría decir que hasta un poco molestos, parecía que hablaban sobre algo, por obvias razones el tema de conversación era un incógnita, pero no parecía ser del todo grato.

Scott vio a Angelo desde el auto, en verdad le gustaba ese pequeño e inocente niño, Angelo quien seguía en su mundo mientras caminaba ni notó la mirada de Scott, este siguió de largo y continuó la pequeña discusión de estaba teniendo con su novia.

Angelo llegó, en la entrada vio a su hermano, quien hablaba con una muchacha, el nombre de esa chica era desconocido para Angelo, este muerto de curiosidad observo la escena hasta que su hermano notó la vista de su hermano clavada sobre él y le dedicó una mirada amenazante a su hermano menor, Angelo tembló de miedo y desvió la mirada, siguiendo su camino a su ya conocida banca, esperando a que comience la primera clase.

Por otro lado, Scott no podía dejar de buscar al pequeño con la mirada, ya le era irrelevante lo que sus amigos a su lado trataban de decirle, él solo quería ver al pequeño niño hasta que lo encontró al lado de ese árbol sentado sobre esa banca grisácea, se le quedo viendo, admirando cada parte del lindo niño. De tanto mirarlo Scott notó algo, el niño no tenía amigos, siempre estaba solo y la mayoría de tiempo se notaba tímido, festejó en su mente, así sería mas fácil tener al niño a sus pies, rogando sus besos y su cariño.

La primera clase llegó, todo transcurrió como de costumbre, ninguna clase estuvo fuera de lo normal, pasaron las siguientes clases hasta llegar la hora del receso, Angelo salió después de todos, no le gustaba chocarse con nadie, mientras menos problemas se evite mejor.

Ya en el patio Angelo se dirigió a su característica banca, busco con la mirada a su "amado" Scott, observó que este estaba en la tienda de la escuela, Angelo se preguntó ¿Cuál será el dulce favorito de Scott?, en su mente la pregunta se le hacía la más interesante, todo lo que tuviera que ver con su amado le era interesante.

Scott se encontraba comprando pequeños chocolates, a él no le fascinaban pero no eran para él, planeaba dárselos al lindo pequeño de cabello castaño sentado en la banca.

Angelo se levantó y se dirigió al baño, repentinas ganas se hicieron presentes en el cuerpo en desarrollo del menor. Scott al ver como el niño se dirigía al baño se le ocurrió la idea de darle los chocolates ahí.

El niño entró al baño y se fue a un cubículo, le daba mucha vergüenza hacer en los urinales, detrás de él venia Scott, quien fingió utilizar un urinal para esperar a que el niño saliera. Angelo salió y se dirigió a lavar sus manos, estaba muy metido en sus pensamientos, a la par llegó Scott y este imitó la acción del niño, Angelo al notar compañía a su lado volteó y juró que casi se le sale el corazón al ver de quien se trataba, era Scott.

Angelo rápidamente desvió la mirada y terminó de lavarse la manos, Scott también, no quitaba la vista del niño, quien se notaba apurado mientras secaba sus manos con toallas de papel, algo que Scott también hizo, el baño estaba vacío, nada mas estaban Scott y Angelo en él.

El niño a paso acelerado dirigió a la puerta, pero antes de salir su acción es interrumpida.

_¡Espera!_ dice Scott mirando al niño, esperando a que el niño diera la vuelva para quedar frente a frente.

_Hola Angelo, ¿Te acuerdas de mi?, soy Scott, hablamos ayer en la salida_ dijo Scott con un tono de esperanza en su voz.

_H-hola Scott, p-pues si te r-recuerdo_ se quería golpear a si mismo por tartamudear, de seguro Scott pensara que es un perdedor.

_¡Que bien que te acuerdes de mi!_ dice Scott acercándose a Angelo, este temblaba de nervios al tener a Scott tan cerca.

_¿Cómo estás?, pequeño_ dice Scott poniendo su venosa mano sobre el delicado hombro de Angelo.

_Emm e-estoy b-bien S-Scott, y tú?_ dijo Angelo com su angelical voz.

_ Pues estoy muy bien jeje, gracias por preguntar_ dijo Scott bajando su mano hacia el antebrazo del niño.

_Oye, en verdad te quería dar esto, pequeño_ dijo Scott buscando los chocolates en su bolsillo derecho com su otra mano libre y logró sacar los chocolates.

_Ten_ le dijo y con la mano anteriormente puesta sobre el antebrazo del niño, ahora se encontraba tomando la pequeña mano de Angelo y le dio coloco los chocolates en esta.

_ E-enserio?, G-gracias_ le dijo Angelo dedicando una linda sonrisa tímida, algo que derritió a Scott y acerco su mano a la mejilla del niño.

_Nadie debe saber que yo te los di, ¿está bien?_ dice Scott bajando su mano hacía el cuello del menor y comenzar a apretarlo con poca fuerza, esto asustó un poco al pequeño, pues su hermano le hacía lo mismo para que ya no lo molestara.

_E-es-está bien, lo juro _ dijo Angelo nervioso, Scott se sintió un completo patan por arruinar el momento de esta manera, y mas cuando noto el nerviosismo en el menor, pero no podía arriesgarse.