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La primera de vez de Inui fue con koko a los 14 años, un año después de la muerte de su hermana, ambos buscaron el consuelo en los brazos del contrario, desde ese momento Koko siempre lo ha visto como un remplazo de Akane. Al principio ni le importaba, Inui dejaba que koko lo utilizará, era tan miserable y patético.

"Solo era sexo", pensaba Inui hasta que poco a poco se fue enamorado de Koko, más sin embargo Inui se hacía de la visita gorda, incluso cuando sus extremidades estaban enredadas en la cama, koko de espaldas e Inui acostado en su pecho con la respiración agitada por una sesión de sexo, koko le susurraba en el odio, "Akane", eso era tan frustrante.
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Los tacones provocaban un ruido sordo en el piso de madera con cada paso que daba Inui, alcanzo el pomo de la puerta y la abrió cerrándola detras de el, ni siquiera espero que que Ken lo alcanzará.

Ya dentro del armario hizo una mueca de asco, "Malditos idiotas como se les ocurre tener sexo aquí", susurró el rubio cruzando sus brazos, la puerta se abrió entró Draken con una cara de pocos amigos.

¿Y ahora que te pasa?, A decir verdad Inui también estaba de mal humor.

"Eso a ti no te importa", dijo Draken con molestia.

Inui prefirió dejarlo hasta ahí, conocía perfectamente el temperamento de Draken. Ambos se quedaron en un silencio incómodo a decir verdad ellos no eran tan cercanos de hecho apenas se dirigían la palabra, solo estaban en el mismo grupo de amigos.

Inui dió un suspiro largo, "¿Que quieres hacer?, dudo que solo quieras hablar", una sonrisa pícara adornó su delicado rostro.

Aquello fue suficiente para prender la mecha. Sin decir nada Draken se acercó a Inui tomándolo de la cintura arrastrándolo a un beso dominante y para nada delicado, Inui no tardó en ceder y rodeó con sus brazos el cuello del más alto.

Draken se sorprendió de encontrar un sabor a sandía en los labios de Inui junto con una sensación pegajosa, al parecer el más bajo decidido utilizar un brillo labial.

Mientras se besaban Inui comenzó a desabrochar el pantalón de Ken acariciando su erección vestida.

"Que crees que estás haciendo" Draken gruño en los labios entreabiertos de Inui.

"¿Pues que crees idiota?"

"Estoy saliendo con Emma"

Inui frunció el seño, "No te hagas el santo, no creas que no se lo que hicieron tu y esa perra en el auto".

Ken parecía confundido, no era secreto que Inui y Mikey no se llevaban tan bien, pero como lo había sabido.

"¿De que hablas?", Draken aumento el agarre en la cintura del más bajo.

Inui no estaba de buen humor, "A otro perro con ese hueso”, dijo Inui  "¿Lo vamos hacer si o no?.

"¿Tu no estás saliendo con kokonoi?, Draken ignoro el último comentario del rubio.

"eso que importa, de todos modos koko siempre me pone los cuernos" Inui murmuro lo último.

"Bien, comenzamos", Draken acarició la cintura de Inui por debajo de su camisa subiendo poco a poco a sus pezones erectos. Inui soltó un gemido agudo y reanudaron su sesión de besos.

"Ken-¡ahh!" Inui gimió entre los labios de Draken.

Draken bajo sus manos lentamente por todo el abdomen de Inui hasta llegar a las esponjosas y grandes nalgas del rubio, donde le dió un apretón a cada una.

Draken rompió el beso, un hilo de saliva conectandolos.

Inui tenía los ojos vidriosos y los labios rojos e hinchados.

"Date la vuelta" ordenó el más alto.

"Con gusto",  Inui dió media vuelta colocando sus manos en la pared con el  trasero al aire. Draken bajo lentamente el pantalón ajustado de Inui junto con sus bragas destapando más piel, "Separa más las piernas", el más alto frotó su bulto vestido con el trasero de Inui.

"¿Tienes un condón?, Inui miro sobre su hombro al de la trenza.

Draken hizo una mueca, "No".

"Idiota, pero no quiero que te vengas dentro de mi" Inui amenazo.

"No te preocupes también estoy limpio"

Inui entrecerró los ojos, dió un grande suspiro.

"Rápido mételo" Inui empezó a mover su trasero sobre el bulto de Draken.

Draken se desabrocha el pantalón y saca su pene dándole un jalón líquido presemen saliendo.

"Date prisa papi", la mente de Inui se nubla.

Draken toma las estrechas caderas del rubio, metiendo lentamente su pene en la entrada de Inui, "Relájate", Draken acarició el hueso de la cadera de Inui.

Antes de dar el  primer empujón, Draken pone la otra mano en la boca de Inui.

"¿Listo inupi?

Inui gruño en la mano de Draken, este quien se cree que es para llamarlo Inupi con toda familiaridad solo koko podía hacerlo.

Inupi soltó un gemido entrecortado, era muy grande, lo partirá en dos eso es seguro.

Draken empezó un ritmo maldita mente lento. Poco a poco el más alto aumento las estocadas.

¡Ken- ahhh! mas rápido ¡nhg!.

Draken apretó su agarre en la boca de Inui, "Cállate".

Un hilo de saliva se le salía a inupi su mente está en las nubes, Draken saliendo y entrando de su interior, dándole a ese punto que le hace ver estrellitas.

"Inupi estoy ¡ahhh! cerca", gimió Draken mordiendo el cuello esbelto de Inui, sintiendo descargas eléctricas en todo su cuerpo, sus embestidas desiguales.

Inui también podía sentir su orgasmo cerca, quería decirle pero los únicos sonidos de su boca salían gemidos obscenos que se mezclados con las pieles chocando.


Unas cuantas embestidas mas para que ambos lograran alcanzar su ansiado
clímax, terminando completamente agotados y sudados.

Los fuertes golpes afuera de la puerta aumentaron, "Salgan ahora", era una voz femenina.

Inupi se ríe.

Draken se separó rápidamente de Inui, "Maldita suerte" gruño Draken, Draken se subió los pantalones y los abrochó abriendo la puerta encontrando a una rubia bajita, sus mejillas estaban rojas, con los ojos vidriosos apunto de llorar.

"No me vuelvas a hablar", la voz de Emma se corta en un sollozo.

La rubia miro de reojo a Inui, si las miradas matarán, Inui estaría tres metros bajo tierra, ella dió media vuelta y volvió al círculo de amigos, se sentó junto a su hermano.
Draken llegó poco después sentándose al lado Sanzu y luego Inui llegó sentándose al lado de Mitsuya.

"Esto es un desastre", rio Hanma junto con koko.

"Tiro yo", Sanzu alcanzó la botella de vidrio dándole un empujón, callendo en en la persona mas perfecta para Sanzu, Manjiro sano.
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En fin la hipotenusa, Draken es un bastardo infiel.




7 minutos en el paraíso Donde viven las historias. Descúbrelo ahora