Capítulo 21

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-Quiero que sepas que te culpo por todo esto-Mencioné mirando a Kuroka qué estabas sentada al otro lado de la celda.

No es que queramos sentarnos así, nos esposado en la pared para que no escapemos.

Podría usar mi poder de Destrucción para liberarme pero eso sería rebajarme a su nivel.

-¡Yo no fui quien besó a la líder de los Yokai!-Dijo mirándome con ira.

Diablos, este niña no es dócil, aunque por nuestras personalidades nos llevamos bastante bien, sigue siendo molesta.

-¿No es muy pronto para que me celes Kuroka?-Le sonreí.

Ella se sonrojó y miró al suelo.

Así me gusta.

Jejeje no puedo esperar a que Kuroka se vuelva la gata seductora para divertirme con ella...

Nuestra celda fue abierta repentinamente y sonreí con ironía al ver a alguien fuera de mi celda.

-*Sigh*Es tu primer día fuera y ya fuiste encarcelado por los Yokai-Dijo la sirvienta peliplateada.

Ella tenía una sonrisa forzada y no parecía feliz de que yo terminara aquí.

-En mi defensa salvé a su líder de la muerte.-Dije poniéndome las manos arriba en señal de inocencia.

Ella puso sus manos en los barrotes y estos empezaron crujir y temblar un poco.

--¡Eso no quita el hecho de que besaste a la líder de los Yokai!-Dijo ya en tono serio.

-Lo sé lo sé, pero... A ella también le gustó-Le sonreía al guardia que apretaba su arma con fuerza.

Ella lo miró y al ver su cara de enojo quiso reírse, pero se aguanto y suspiró.

-*Sigh* Bien, vamos tenemos una reunión con la líder Yasaka-sama, tienes suerte al parecer quieren disculparse contigo por los malos tratos.-Bien, me salvé y no tuve que hacer nada.

Grayfia nos guiaba por el lugar, Kuroka miraba atentamente el palacio de los Yokai y al parecer le gusta esta clase de arquitectura, tal vez deba vivir en un templo, no se ve mal y tener a mi harem con kimonos de miko seria una buena vista...

Sentía a mi amigo crecer involuntariamente.

Maldita sea y ahora veré a una de las top Milfs del anime...

En cuanto entré un aroma floral entró en mi nariz.

Mire por el lugar y encontré a Yasaka con un Kimono nuevo y completamente arreglada a diferencia de esta tarde.

Ok, ahora si tengo una erección...

Mierda, espero que nadie lo not-

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Mierda, espero que nadie lo not-

¡Carajo Yasaka me está mirando fijamente!

Su mirada recorrió mi cuerpo y se detuvo instantáneamente en mi entrepierna.

El Hijo de la Destrucción Donde viven las historias. Descúbrelo ahora