El Hijo de la Destrucción

Capítulo 66

-Así que... ¿Eres de otra dimensión?.-Akame estaba jugando a las cartas conmigo.-Y también eres un demonio.

Cada uno tenía un par y estábamos apostando prendas.

Es sorprendente lo rápido que pareció aceptar que su único voleto de salida es derrotar a Esdeath en combate. Sigue enojada porque maté a sus amigos pero ella no es nueva en esto, sabe lo cruel que es el mundo y lo difícil que es sobrevivir. Si seguia tratando de matarme me aseguraría de causarle dolor innecesario y probablemente profanarla. Me ha notado varias veces observando su cuerpo e incluso ahora me es difícil no admirarla...

-Básicamente, realmente estoy solo de paso. Donde realmente quiero ir será peligroso así que necesitaba a alguien que pueda cubrirme las espaldas o al menos entretener a alguien en lo que me ocupo del jefe final-Pedí otra carta sin molestarme siquiera en mirar las que tenía.-Me enfrentaré algunos demonios peligrosos y aunque tengo una carta bajo la manga prefiero tener otra en mi otra manga.

Akame se encogió de hombros, inexpresiva como siempre y se plantó lista para ver los resultados de nuestra partida de veintiuno. Yo pedí otro par de cartas y ni siquiera las miré.

-Entonces solo eres un tramposo....-Asentí reconociendo que esa era la palabra exacta-¿No verás tus cartas?

La miré a los ojos con mi sonrisa sádica y solo pedí una carta más antes de duplicar mi apuesta.

-Ganaré de todas formas-Ella volteó sus cartas revelando un par de diez junto a una pequeña sonrisa arrogante-Es lo divertido de la vida.

Revelé la primera carta siendo esta un diez de treboles, su sonrisa dudó.

-No importa el camino que elija-Revelé la segunda siendo un cinco de picas haciendo que su sonrisa regrese-No importa quien sea el oponente.

Revelé la tercera carta siendo esta el cinco de corazones quedando empatados con veinte, Akame parecía sorprendida pues las probabilidades estaban totalmente en mi contra y su sonrisa se renovó aunque noté el temor en el fondo de sus ojos.

-Todos creen tener una oportunidad de ganar.-Revelé la última carta.-Pero la verdad...

El As de diamantes formando un perfecto 21.

-Es que el juego estuvo arreglado desde el principio.-Ella quedó en silencio.

Cada vez que perdía debía quitarse una prenda y ahora solo vestía la pieza inferior de su ropa interior. Yo estaba totalmente vestido simplemente observándola pensando si decidía luchar o quedar totalmente expuesta frente a mi.

Por desgracia jamás obtuve respuesta ya qué sentí el Ki de Kuroka y Esdeath acercarse junto a una gran cantidad de personas. Tosca quién me veía algo molesta por mi actitud solo recogió las cartas y tiro en la cara de Akame la ropa que se había quitado.

El ruido en la ciudad se renovó cuando los soldados del Ejército Revolucionario comenzaron a moverse para tomar una posición de defensa.

Los civiles comenzaron a huir tratando de tomar el.oro qué les quedaba.

Me estaba emocionando, quería participar matando algunos revolucionarios y tal vez obtener información sobre Najenda. Mis alas demoniacas se extendieron y cuando estaba por impulsarme en el aire Tosca me llamó.

-Maluch-Sama, termine su té por favor.-La miré unos segundos mientras ella inocentemente me extendía la taza del té que bebía al jugar cartas.

-Claro, gracias.-Es delicioso y me relaja bastante.

Bebí del té y cuando entregué la taza Tosca se aseguró estuviera vacía mirándola disimuladamente.

Meh.