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⁓Falling fast and screaming loud

I'm finding ways to drown it out

And hoping you can hold me down

CAPITULO 15 

Azael

Hay momentos en la vida que llegan a ser difíciles, momentos en donde crees que te estás hundiendo en medio de la oscuridad y ya no hay manera de salir pero ciertas veces, se puede encontrar al menos un pequeño agujero para salir de la inmensa oscuridad que nos rodea, una pequeña luz que nos ayude a salir a delante. Y esa pequeña luz se puede presentar de distintas formas, solo debemos esperar para poder encontrarla. 

Paso las manos por mi rostro y cabello regresando nuevamente a la sala principal. Cenamos hace con una hora, ahora mamá está viendo una película navideña y Stark está en mi habitación, supongo que durmiendo. Me acerco despacio y en silencia a mamá, me pongo delante del televisor  y como sospeche, ella está profundamente dormida; apago el televisor y las luces de la sala, pongo una manta sobre el cuerpo de mamá y salgo de casa sentándome en la entrada.

Tengo pensado ir a darle una visita sorpresa a Keira, no quiero que se sienta sola y mucho menos en un día como hoy pero... en Navidad se dan regalos ¿cierto?. Saco mi teléfono y busco el contacto de mi tío, él contesta al segundo timbre.

- Hola sobrino, feliz noche buena - me saluda con su habitual acento italiano.

- Hola tío ¿Te puedo pedir un favor? 

- Claro hijo, dime

- Necesito darle un regalo a una persona y tú tienes el regalo perfecto - le digo y continuamos hablando hasta que él me confirma lo que tengo pensado, le agradezco y le deseo una feliz navidad antes de colgar. Entro a casa de nuevo y subo a mi habitación para buscar las llaves de mi motocicleta y me dirijo al garaje rápidamente.

Años atrás yo estaba metido en carreras de motocicletas, ahí es donde conocí a Stark. Era divertido y también peligroso pero ganaba bastante dinero, así es como logre comprar mi BMW K 1300 S negra. La enciendo y saco del garaje dirigiéndome a la casa de Keira.


(***) 


Keira

Saco más comida de la alacena y más bebidas, a este paso, mañana no podre ni siquiera levantarme de la cama. Continuo viendo la película que llevo viendo hace 30 minutos y me está encantando, llega una parte en donde ocurrirá toda la acción y el timbre suena interrumpiéndola.

- ¡¿A quien se le ocurre interrumpir mi película?! ¡Mierda! - grito frustrada y me levanto lo más rápido que puedo a abrir; si son esos niños que cantan villancicos, juro que los ahorco y los entierro en el jardín trasero. 

- Veo que alguien no está de muy buen humor - dice Azael cuando abro la puerta, siento como mi cara se calienta de vergüenza.

- Dime que no escuchaste lo que dije 

- No lo escuche - miente riendo - Pero traje frituras, si en algo ayuda - dice levantando una bolsa llena de distintos dulces.

- Si que ayuda, entra - le digo haciéndome a un lado, cuando entra, veo una motocicleta estacionada frente a mi casa, quizá sea de él, no importa. Caminamos hasta la sala, le digo que si quiere se siente en el sofá o en el suelo, donde estoy yo sentada. Veo como mi perro levanta su cabeza perezosamente para ver quien eso, mueve la cola sin levantarse de su lugar.

Un Invierno Sin Fin ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora