Capítulo 9. Revelaciones

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— ¡No..., no sabía que tenías un esposo! —Rompí en llanto— ¿Por qué me ilusionaste para nada?

—Yo... lo siento mucho, de verdad.

Me alcé al vuelo, intentando no pensar en ella, sin embargo, las lágrimas cubrían mis ojos, caí en picada y me di cuenta en ese instante que las emociones tristes nublaban mis habilidades.

Pensé que iba a morir finalmente, sin embargo, alguien me tomó en brazos, por un momento pensé que había sido un ángel, sin embargo, era Sofía.

Desperté en su cama.

—James, yo lo siento por todo lo que ha pasado, eres un chico muy importante para mí...—Me confesó mientras se sentaba a mi lado—Cuando te conocí, no me di cuenta que tu tienes algo que enciende mi corazón, y no es solo que caminemos juntos, o... compartir experiencias, es un amor que nunca había sentido.

Me levanté bruscamente de la cama.

—¿Cuánto tiempo hará falta para que me dejes por otro chico? —Le pregunté seriamente.

—No hay otro como tú, y te lo voy a demostrar...—Se acercó a mis labios, entrelazó sus brazos sobre mis hombros.

—Sofía, espera...—Tomó su dedo y me besó en los labios lentamente.

—¿Ves? —me preguntó—, nadie me hace sentir como tu...

No sabía que decir.

—Debes entender que soy un cura y tengo vivo desde los años cuarenta aproximadamente, solo porque mis genes me hacen parecer de 18 a 25 años, así que soy muy mayor que tu...—Le confesé mientras iba recorriendo su piel suavemente.

— ¿Y quién dice que tengo tan corta edad...? —Me preguntó mientras sus manos recorrían mi cuello.

—Eres una bruja y yo un licántropo...—Le respondí mientras Sofia me sometía a la cama.

—Corrección, bruja y quimera...—Me guiñó un ojo mientras extendía mis brazos hacia atrás.

Estaba sorprendido.

—¿Entonces, por qué no tengo una forma de animal extraño? —Le pregunté mientras la sometía contra la cama.

—Me gusta este juego, pero, ¿Cómo va a acabar, quien encima de quién? —me preguntó mientras ella mordía mi labio inferior—Por cierto, las quimeras no solo roban poderes, sino también son cambia formas, ellos pueden adoptar la forma que deseen, pero en su estado natural, su poder es muy peligroso.

Me contó mientras la acomodaba en mis piernas y luego en la cama.

— ¿Tengo que preocuparme por algo, alguna debilidad? —Pregunté mientras salíamos a la calle.

Estuvimos buscando el paradero de Emily, sin embargo, me recomendó que no hiciera uso de mis sentidos aumentados debido a que la familia me intentaría cazar.

Comencé buscando en la habitación, encontré algo de sangre. Había saltado y corrido en dirección este.

Seguí su rastro, el cual había desparecido luego de pasar la iglesia.

Me llamaron de la parroquia, necesitaba hacer una misa para el pronto regreso de Emily.

—Lo siento, Sofía, tengo que ir a la misa, no pierdas un segundo, te alcanzaré lo más rápido que pueda...

Nos despedimos con un apretón de manos, entré a la parroquia y me preparé con mi sotana esmeralda.

Poco a poco las personas fueron llegando a la iglesia.

Historia de un exorcismoWhere stories live. Discover now