Capitulo 14 - Aquí vamos de nuevo...

47 25 3
                                    

Estaba yo durmiendo muy tranquilamente en mi cama, soñando con alguna que otra cosa sin sentido alguno hasta que siento una mano sobre mi pecho moviendome.

—Michel, vamos despierta que ya hay que recogerlo todo —era mi madre, yo con algo de molestia abrí los ojos y agarre mi teléfono para ver la hora, eran las 5:23am.

—Mamá dame cinco minutos más... —digo sin casi fuerzas y me tapo hasta la cabeza con la sábana.

—No, vamos levanta —ella insistente continuo moviendome pero yo solo trataba de seguir durmiendo —¿Así que te vas a poner así no? —ella me arrancó las sábanas del cuerpo y me encendió a luz.

—¡Ah mamá! —grito de la molestia y me levantó —Ya ya me levanté —la abrazo para darle los buenos días y voy al baño a asearme.

Antes de entrar al baño miro a la cama de mi hermano, estaba vacía y muy recogida. El día antes de mudarnos de nuevo el había ido a casa de su abuela paterna para ir por unos 4 días a un hotel. El tuvo esa suerte, yo me tenía que quedar en este infierno solo. Luego de ir al baño, quitarme el pijama y prepararme salí a la sala y vi en el suelo un montón de bolsas y algunas cajas, mire a los lados y no vi al novio de mi mamá por ninguna parte.

—El fue a hablar con unos amigos de el que tienen un camión de mudanza para que nos ayuden. —dijo ella jugando un poco con la cachorrita que tenemos ya desde hacía unos días, yo mire a esa perra y solo podía pensar en que si al novio de mi mamá no se le hubiera ocurrido la "brillante idea" de haber comprado un perro sabiendo que no podíamos tener uno no estaríamos asi.

Ignorando mis pensamientos me puse en marcha a recoger mis cosas y las de mi hermano, también ayude a mi mamá a recoger cosas de su cuarto, la cocina y a desarmar las camas para poder llevarlas. Ya luego de haber acabado me senté en una silla junto a la puerta, era difícil creer que habíamos tardado tanto, cuando me levanté aún estaba oscuro y ya el sol estaba brillando, habíamos tardado 2 horas en recoger las cosas de un apartamento pequeño, parecía más un salón de clases bien distribuido que un apartamento.

Mi madre después de recoger algunas otras cosas personales en su cuarto sale y se sienta en otra silla al lado mío. Yo la miro y luego miro a las bolsas y cajas en el suelo. Habían bolsas que eran bastante grandes y se veían pesadas, otras eran más pequeñas y así con las cajas.

—¡Ya llegué familia! —grito aquel tipo entrando al apartamento junto con la bicicleta.

Familia los muertos tuyos imbecil...

Dije para mis adentros y vi como mi mamá lo saludaba, yo sin más remedio y para mantener mi educación choque los puños con él.

—Ya el camión y los compañeros míos están allí abajo, agarra a Princesa que ahora ellos suben y nos ayudan a bajar todo. —en ese momento me levanté y me aparte de la puerta junto con la silla para dejar paso y no interrumpir a la hora de bajar las cosas.

Una hora más tarde...

Ya por fin habíamos acabado de montarlo todo en el camión, yo estaba sentado en la cabina del camión junto con los amigos de aquel goblin tatuado. Yo miraba el paisaje, algo preocupado porque a medida que seguiamos avanzando mas desconocido era todo para mi, por lo tanto iba a estar muy lejos de la escuela, lo que significó otra mentira más de mi madre, ¿Por qué no solo me dijo que nos mudariamos lejos en lugar de mentirme diciendo que cerca?

El camión se detuvo frente a un pasillo con suelo de tierra, al bajarme me acerque ahí y lo que logre ver parecia ser como las favelas de Brasil, parecía un sitio agradable pero olía a granja de cerdos ahí. Comenzamos a bajar las cosas del camión y yo seguía a mi madre para ver la casa, llegamos a una cerca y ahí nos esperaba la mujer que alquilaba el lugar, ella nos abrió la puerta, saludo a mi madre y nos invitó a entrar, al parecer ibamos a vivir en un apartamento algo más grande y con dos pisos, subimos las escaleras y nos fue mostrando toda la casa. Luego de habernosla mostrado comenzaron a subir los amigos del novio de mi madre y el mismo con las cosas, en ese momento sólo podía pensar en algo, "¿También tendré que dejar de ver a mis amigos y cambiarme de escuela solo por el capricho de mi madre y el de su novio?" "Solo espero que ella le avise a mi papá dónde estamos ahora..."

La copa no se ha rasgado...

Quebrando el Silencio...Where stories live. Discover now