Capitulo 18 - Frágil...

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Habían pasado dos días después la fiesta que hizo el novio de mi madre, me levanté de la cama contento ya que por fin mi hermano regresaría. Al fin los días de soledad en ese lugar al que debía llamar "hogar" acabarían y tendría con quién hablar e interactuar sin filtraciones. Salí de mi cuarto, acaricié a la cachorrita y fui al baño a asearme para luego volver al cuarto y esperar a mi hermano.

Luego de un rato sentí la puerta abrirse, me asomé por la puerta y vi que era mi madre junto con mi hermano. El se veía emocionado y yo también porque el regreso y ese tipo no estaba en casa, lo que significaba que no habría gritos, ni mala música... Solo paz, junto con mi hermano y yo. El corrió hacía el cuarto y rápido se lanzó hacia mi para abrazarme.

—Hey hey, ve a lavarte antes que estas sucio de corona virus, y no nos hace falta un rey ahora. —le dije en tono burlón.

—Jaja que gracioso. —dijo el con una voz sarcástica pero aun asi riendose y fue al baño a lavarse las manos. Mientras el iba al baño mi mamá me miro sonriente y alegre y subió a su cuarto, seguramente a ir a su propio baño y a acostarse, había llegado de trabajar anoche a las 5:40am.

Yo a pesar de mi emoción estaba cansado, desde aquel día en el que me dejaron solo me he ocupado de todo en la casa, he lavado la ropa, la he puesto a secar, he lavado los platos y todo lo que se haya usado en la cocina, he limpiado la casa e incluso algunas veces he tenido que cocinar. ¿Qué es lo que hacían mi madre y su novio? Pues mi mamá solo trabajaba y la gran mayoría de las veces cocinaba, y su "esposo" se la pasaba en el cuarto escuchando música a todo volumen, cómo si fuese el dueño de todo el barrio.

Me senté en la cama a esperar a mi hermano para que me cuente como le fue en el hotel, luchando contra el gran sueño que hacía que me caiga como tronco en la cama. Cuando estuve a punto de tumbarme para cerrar los ojos por unos segundos para descansar mi hermano entro al cuarto con ropa casual puesta. En cuanto entro volvió a abrazarme y yo correspondi a su abrazo de forma alegre, se sentó al lado mío y mientras sacaba su ropa, teléfono y otras cosas de su mochila me iba contando todo mientras yo le hacía preguntas y nos reíamos juntos. Hacía un buen tiempo que no me reía así, en esos días parecía mas un robot sirviente que un humano con sentimientos, no me alegre y mucho menos con ganas de reír, pero cuando mi hermano volvió pues me sentí contento de nuevo. Después de pensarlo un poco me di cuenta que gracias a el, y a otras personas en mi vida como mi papá, mis abuelas, la materna y paterna, mi tía materna, etc, eran quienes hacían que me olvidara de todo problema, aunque sea por un solo segundo.

Continuamos hablando por mucho rato. Había caído la noche e incluso mientras veíamos algun vídeo en la laptop continuabamos hablando y riendo, no fue hasta muy tarde que con solo el sonido de la puerta abrirse toda mi alegría se esfumo. Ese sujeto había llegado, haciendo escándalo cómo siempre, el fue a saludarnos primero y luego como siempre cargo a la cachorrita que estaba con nosotros en el cuarto y subió hasta su cuarto dónde estaba mi madre. Luego de un rato ella bajo hacia nuestro cuarto y nos dijo:

—A dormir ya que es tarde, ¿ok? —dijo ella mientras se alejaba de nuestra puerta y apagaba las luces encendidas en el living de la casa, el comedor, la cocina y el baño.

—Ok mamá. —dije yo mientras apagaba la laptop y la cerraba, mi hermano ya estaba en su cama con su teléfono jugando Among Us y yo me dirigía a la mía para chatear con mis amigos.

—Buenas noches mis amores. —mi madre entro a nuestro cuarto y apagó la luz, nos dió un beso en la frente a ambos y luego salió del cuarto cerrando la puerta.

Mi hermano y yo hablamos un rato más antes de dormir. Estabamos hablando de cualquier bobada, según recuerdo era sobre una partida que tubo mi hermano en Among Us mientras estaba en el hotel, por su voz pude percibir que el estaba muy emocionado contándome todo. Y en ese momento, su alegría era la mía...

Al día siguiente...

Soy el primero en levantarme, al sentarme en la cama, estirarme mientras bostezo y tallar mis ojos veo que mi hermano esta a punto de despertarse también. Con cuidado salgo del cuarto para encontrarme con la cachorrita corriendo por todo el comedor emocionada, la acaricio un momento y voy al baño a lavarme la cara y al salir me encuentro con mi madre.

—Me hace falta que vayas a sacar la basura y compres pan para el desayuno.

—¿Tiene que ser ahora? —digo con un tono cansino, por las mañanas lo que acostumbraba a hacer era desayunar y sentarme en la laptop a ver algo o jugar.

—Si quieres desayunar si. —me señalo la bolsa de basura ya lista para sacarla. Sin rechistar le di los buenos días a mi madre con un abrazo y fui al cuarto a buscar mis zapatos y mascarilla, al entrar mi hermano ya estaba levantado muy concentrado en su teléfono.

Ya después de haberme preparado para salir salgo del cuarto y veo el dinero sobre la mesa, agarro los llaves, el dinero y la basura y cuando voy a salir regreso hacia dónde mi madre. No llevábamos ni una semana en ese lugar y no sabía dónde estaba la panadería, asi que fui a preguntarle a mi madre.

—La panadería esta justo cuando salgas y botes la basura, cruzas la calle y caminas por esa calle estrecha por ahí y la encontrarás.

Yo no la entendí mucho pero asentí con la cabeza solo para ya salir y librarme de la tarea mañanera. Llegué al bote de basura y tras dejar dentro de este la bolsa de basura trate de ubicarme un poco con las instrucciones que me dio mi madre. Luego de pensarlo un poco le pregunté a alguien que pasaba por ahí y me dió la dirección exacta. Tras agradecerle fui hasta la panadería y estaba cerrada, sin nada que hacer regrese a la casa y al entrar vi que ese tipo estaba sentado en la mesa con madre. Tenía que pasar por el comedor para llegar al cuarto, entonces pase por ahí y deje el dinero sobre la mesa diciendo que la panadería estaba cerrada para ir al cuarto y comenzar a jugar.

—¡Eso es mentira tuya! —grito ese tipo deteniendome antes de que entre al cuarto. —Tu solo sacaste la basura y tonteaste por ahí un rato para volver y seguir con tu vicio de computadora.

—Es en serio estaba cerrado... Fui exactamente hacia donde me dijo mamá y estaba cerrado. —dije volteandome para mirarlo a la cara, el se veía molesto pero a pesae de yo demostrar que estaba calmado sentí algo se miedo.

—¡ESO ES MENTIRA CHIQUILLO VICIADO!

—¡PERO QUE DE VERDAD ESTABA CERRADO! —le grite, ya ese sujeto se había pasado de la línea y no iba a quedarme callado.

—¡Y mira como me grita tu hijo! ¡El lo que quería era librarse de la tarea y ponerse a jugar! —dijo el alterandose aún más.

—¡Oye ya cállate! ¡Yo soy su hijo y ella va a creerme a mí! —al decir eso yo empujé a ese tipo...

—Y yo soy su esposo —aquel goblin tatuado se molestó aun más y me empujo, caí sentado sobre el pequeño escalón de la cocina golpeándome un poco la espalda, una costilla y el brazo.

Y en ese momento supe que cometí el error más grande de mi vida al ver que se acercó muy agresivo y con intenciones hostiles hacia mi...

Quebrando el Silencio...Where stories live. Discover now