xɪ. ғᴇʟɪᴢ

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Una semanas después del accidente en la universidad, Eda estaba sentada en el suelo de su habitación, estudiando, cuando Serkan le había preguntado que hacía rodeada de tantos libros y cuadernos, ella le habia dicho que tenía que recuperar el tiempo que perdió y a la había dejado estudiar.

Estaba tan absorta en sus pensamientos, que no sintió la presencia del pelirrojo, hasta que sus cálidos brazos rodearon su cuello desde atrás, pegándola contra su pecho desnudo, recién duchado.

-¿Qué pasa?. - le preguntó el recién llegado.

-Nada. - respondió suspirando ante el abrazo. - Es solo que... olvídalo.

-Dime... - pidió Serkan besándola detrás de la oreja y luego en la nuca, justo donde tenía su tatuaje, dejando que Eda temblara en sus brazos.

-Hummm. - gimió suavecito con la caricia. - Serkan, ¿Qué viste en mí?.

-Mmmm ... lo primero que vi fue esa hermosa sonrisa, luego tu adorable personalidad, luego esa extraña calidez que sentía cuando te tenía cerca...y pues... ¿A qué viene la pregunta?.

-Bueno, es que, ¿no te enojes?. - dijo con ojos de cachorrito.

-No me enojo... ¿Qué es?. - preguntó soltándola y sentándose a su lado.

-Ella ... ella me llamo, Selin me dijo que… es decir, que yo era muy poca cosa para ti. - explicó decaída, escondiendo sus ojos de Serkan.

-¿Para que le contestas el teléfono? - la regaño. - Después de lo que te hizo.

-Lo siento, no me fije que era ella, estaba pensando en otra cosa, cuando llamó. - dijo jugando con sus dedos.

-No le hagas caso, te quiere hacer sentir mal y ya sabemos que esta loca, esta celosa de ti porque el idiota de tu ex se fijo en ti y no en ella.

-Si… - contestó bajando la mirada, tomando de nuevo el libro que leia antes de la interrupción de Serkan.

Serkan la vio mordiéndose el labio, sintiéndose culpable de repente, bajo su mano acariciándole el hombro sobre la blusa blanca que tenia, se inclinó y dejó un beso en su frente.

-¿Por qué no hacemos algo divertido hoy?. - preguntó con una sonrisa. - Así te distraes un poco.

Eda sonrió tímidamente. - ¿Algo como qué?. - preguntó poniéndose de pie.

-No se...mis diversiones implican demasiada lectura...así que esperaba que me dieras una idea. - se acarició la barba pensativo. - Podríamos ir al parque, no...mejor al cine... o podríamos ir al centro comercial o a almorzar, a algún parque de atracciones, aunque te estas recién recuperando y quizás no seria tan buena idea . - todo eso lo dijo mientras salía de la habitación y caminaba hacia la sala de estar, con Eda siguiéndolo un par de pasos más atrás.

-Me da igual lo que hagamos Serkan, cualquier panorama contigo me parece genial igual. - dijo sonrojada.

                            ✰ ✰ ✰

La tarde estaba bastante calurosa, pero eso no parecía importarle a Eda, que arrastraba a Serkan por todas partes, primero en el parque, luego en el restaurant en el que habían comido y ahora en el centro comercial, ella le había tomado tantas fotos que sinceramente estaba mareándolo de tanto flash, pero era sin duda un pequeño precio por ver la sonrisa y la ilusión de Eda en sus ojos, parecía una niña y era tan adorable, justo en momentos como esos, Serkan se preguntaba si Eda era lo bueno que siempre afirmó Jeffrey que llegaría a su vida, diciéndole que el sufrimiento no era para siempre.

Observó desde el banco en el que estaba sentado como Eda se volteaba y venia caminando tranquilamente en su dirección, sonriéndole con dos helados en las manos que comieron entre bromas y risas.

ɪɴǫᴜɪʟɪɴᴀ ɪɴᴇsᴘᴇʀᴀᴅᴀ [ᴇᴅsᴇʀ] Where stories live. Discover now