B. U: El emperador.

402 29 1
                                    

La gran mesa del comedor, larga y dorada llena de platos de mis comidas preferidas, cada una en platos de oro. Tomo mi copa de vino y la dirijo a mis labios, derramando una gota en mi cuello, la cual limpió con mi mano, ensuciando mi guante.

-¡Füa Xhang!- Llamé esperando a que llegara mi fiel sirviente.

-Su majestad, ¿Necesita algo?- Pregunto el hombre con timidez. Lo miré directamente a los ojos tratando de intimidarlo. Quité mis guantes de mi mano y se los lance. El los atrapó rápido.

-Se han arruinado, consígueme una docena. Me gustaría que sean de algodón esta vez.

Füa Xhang asintió y abrió su boca.

-Emperador, el señor Him lo espera afuera. ¿Lo dejó pasar?

¿El señor Him? Ese idiota, siempre molestandome. El dijo que jamás gobernaría y me molestó hasta el cansancio en la academia.

-Dejelo pasar- Dije para volver a beber otra copa de vino.

Al dar la orden las grandes puertas se abrieron dejando entrar a un hombre alto, de ojos verdes oscuros y cabellos negros.  Su porte era muy tranquilo y sereno. Siempre lo había sido...

-Tome asiento- Dije haciendo mi voz más grave. El pareció notarlo y se acercó mirándome sorprendido.

-Buttercup, ¿Que haces?.

-¿Que crees que hago, Butch?

-Ese es el puesto del emperador, ¿Dónde está el?- Pregunto incómodo.

-Querras decir, ¿Dónde está ella?- Pregunté burlona.

-¿Que quieres decir? En las cartas las iniciales eran B.U- Pregunto nervioso.

-Yo soy el emperador Butch, la B de Buttercup  y la U de Utonium. Solías burlarte de mí porque solo era una simple princesa, ¿no?- Dije sinicamente.

-¡Buttercup éramos niños!

-Pues ahora soy tu jodida jefa, soy El emperador, prepárate porque ahora tu serás mi perra.- Dije para luego tomarlo del cuello y besarlo.

...


Afuera del gran comedor habían dos chicas escuchando los gemidos y jadeos que sonaban tras la puerta.

-Blossom, ¿ya sabías de esto?- Preguntó una joven rubia con un hermoso vestido azúl.

-Estos dos tenían demasiada tensión sexual, debían quitársela por el bien de la comodidad, de mi comodidad- Contesto mientras avanzaba arrastrando su vestido rosa.

-¡Blossom algún día te tocará!- Exclamó la rubia.

-Querida, mi sueño era ver a Butter feliz. Y
ahora está sumamente extasiada de alegría- Comento por el ruido que había en el gran comedor- Me inscribire a un convento luego de esto.


. . .

-Butch.

-¿Si, Buttercup?

-¿Sabes que planee todo esto?

-Sip, ¿Alguien más lo sabe? No quiero quedar como un sumiso.

-Nop, nadie lo sabe. Solo tu y yo.

𝐎𝐍𝐄 𝐒𝐇𝐎𝐓𝐒 𝐏𝐏𝐆 𝐀𝐍𝐃 𝐑𝐑𝐁Donde viven las historias. Descúbrelo ahora