una noche de primavera, sunghoon encuentra en el bosque un pequeño cachorro de tres años que se encuentra herido de su pierna. su instinto omega no le permite el dejar aquel cachorro solo. así que sin dudarlo ni un poco decide llevarlo a su pequeño...
❛ soy un estúpido, un chico mimado que te enfermó, yo soy el malo por hacerte sufrir, el susurro del diablo, mi codicia te aleja... ambos hemos perdido nuestro camino.❜
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se sentía extraño, abrumado y desorientado. su cabeza dolía en demasía, su vista se encontraba borrosa y su descubierta frente se encontraba húmeda: ¿qué era lo que estaba haciendo? ¿por qué su lobo no paraba de gruñir? frunció el ceño al comenzar a percibir el incremento del aroma de unas feromonas desconocidas para él y su lobo, «desagradable» pensó al instante.
aquel aroma no lograba ayudarlo a dejar su dolor de cabeza, era lo contrario, pues aquellas fuertes feromonas hacían que su dolor incrementara, aquel aroma a flores y mar no era tan agradable como el aroma que sunghoon desprendía. «mi omega, lo extraño» pensó al mismo tiempo que su lobo, ambos extrañaban aquel tierno chiquillo que los hacía reconfortantes.
algo desubicado comenzó a parpadear repetidas veces para poder aclarar su vista y así poder ver qué era lo que sucedía a su alrededor, ¿quién diría que se terminaría arrepintiendo al instante de presenciar la escena frente de a sus ojos? sin duda era mil veces mejor que no descubriera nada de lo que pasaba en ese instante.
ya que cuando viera el gran error que había hecho probablemente se sentiría como la peor persona del mundo.
cuando finalmente pudo aclarar su mirada se terminó encontrando con una escena que hubiera preferido nunca ver: el cuerpo desnudo de sunoo debajo de él, con las piernas abiertas, marcas rojizas en su torso y cuello, rostro sonrojado y gimiendo fuerte mientras que él sostenía sus caderas mientras su pene entraba y salía de la entrada de aquel omega; estaba penetrando a su ex cuñado.
su respiración se agitó, ¿cómo es que había cometido ese grandísimo error? se suponía que él sólo estaría en la cabaña, lejos de sunghoon e intentando hacer que su lobo lo rechazara; ya que él no estaba dispuesto a mantener relaciones con ningún omega, no por lo menos hasta que pasara un largo lapso de tiempo.
su cabeza volvió a punzar, para que en ese precioso instante pequeños recuerdos de cómo es que habían llegado aquella situación comenzarán a llegar a su mente: »hyung, yo fui el omega que el señor kim eligió para hacer que rompa el vínculo con mi hermano. no debe preocuparse por nada, yo haré que olvide todo» después de ello había sido abrumado por sus fuertes feromonas y se había dejado llevar por su tonto instinto de apareamiento.
«soy un idiota» pensó mientras soltaba un gruñido, pararía todo esto y le pediría una gran disculpa a su pequeño cuñado, él no tenía la culpa, él sólo era una víctima de todo este desastre. pero antes de que pudiera parar, el omega movió su cadera en busca de más penetración.─hyung, por favor no se detenga...─mencionó entre gemidos.─yo quiero todo de usted.─jake apretó su mandíbula haciendo que sus colmillos lastimaran la piel de sus labios.
