La primera reunión

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Domingo por la Tarde

Perth y Saint estaban sentados en la sala de estar, viendo una película, la cual había sido elegida por Saint. Un tazón de palomitas se encontraba colocado en la mesa de centro. Los dos se encontraban inmersos en la película, cuando el sonido de una bocina se escuchó fuera de la casa. Perth se levantó para revisar al inesperado visitante cuando escuchó a Saint decir, "Ha de ser mi auto, le pedí a mi chofer que si me lo podía traer ya que mañana me reintegro a mi trabajo." Perth recordó la conversación que había tenido con Saint anteriormente y permitió que él atendiera al visitante mientras hacia una nota mental acerca de darle a Saint un control remoto para que pueda abrir el portón de la casa.

Saint regresó al interior de la casa cargando unos documentos, después de haber hablado con el chofer. "¿Qué son esos?" Perth le preguntó después de observar los papeles que tenía Saint en su mano. "Estos son documentos del trabajo que había olvidado en casa, así que le pedí a mamá que me los mandara con el chofer, ya que los necesitaré mañana." Saint respondió mientras colocaba los documentos en la mesa.

Perth miró los documentos que se encontraban apilados mientras caminaba hacia unos cajones cercanos. Abrió uno de ellos y sacó algo de él. Caminó de regreso a la mesa donde Saint estaba parado con un folder en las manos, leyendo algo con las cejas fruncidas. Se veía más como un gatito enojado. Perth se rio ligeramente al ver la expresión tan tierna, lo que llamó la atención de Saint. Negando con la cabeza como para alejar ese pensamiento de su mente, Perth caminó hacia él cargando algo en su mano.

Saint miró a Perth un poco confundido cuando Perth levantó su mano, entregándole algo. Después de un pequeño debate interno, Saint finalmente levantó su mano para tomar lo que Perth le estaba entregando. Perth dejó caer el objeto en la mano de Saint mientras hablaba, "Es el control remoto para abrir el portón, ya que mañana regresas a trabajar y ambos vamos a estar fuera y no sé a qué hora vaya a regresar, así que pensé en darte un control." Saint miró el pequeño aparato en su mano y agradeció con una voz suave. Perth asintió y empezó a caminar hacia la cocina para preparar la cena.

Mientras tanto, Saint recogió la pila de documentos que se encontraban en la mesa y caminó hacia su cuarto. Después de colocarlos con cuidado sobre la mesa de su habitación, salió de su cuarto con dirección a la cocina para encontrar a Perth ocupado con la cena. "¿Necesitas ayuda?" Saint le preguntó mientras se acercaba al refrigerador para tomar un poco de agua. "No, casi termino." Perth le contestó. Saint se sentó cómodamente en uno de los bancos de la barra y tomó un sorbo del agua que se había servido previamente en un vaso. Él observó a Perth mientras el otro seguía ocupado con su trabajo.

Después de algún tiempo en silencio, Saint finalmente habló, "¿A qué hora llegas normalmente a casa?" "No tengo una hora exacta. Algunas veces puedo llegar tan temprano como a las 6 pm o algunas otras tan tarde como la medianoche. Para mí es indiferente si me quedo en la oficina o llego a casa. Me encuentro solo en ambos lugares." Perth contestó con un tono de tristeza en su voz. Saint quería preguntarle por qué no simplemente se quedaba con su familia, pero, de acuerdo con las reglas establecidas, ninguno podía preguntar nada acerca de la vida personal del otro. Saint suspiró y dejó que la conversación muriera en el aire, preguntándose si algún día podría obtener respuesta a esa pregunta.

Después de un rato, Perth sirvió la cena y ambos tuvieron una pequeña plática relacionada al trabajo. Al terminar, Saint decidió lavar los trastes, ya que Perth había preparado la cena. Perth aceptó después de mucho suplicar por parte de Saint. Después de acabar, ambos se desearon una buena noche y caminaron a su cuarto respectivamente.

Perth se recostó sobre su cama, pensando en la primera conversación que tuvieron. La primera vez que se conocieron y decidieron casarse.

 La primera vez que se conocieron y decidieron casarse

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Un matrimonio para atesorarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora