Enséñame a vivir [Camren]

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Lauren no le escribió a Camila al día siguiente, y la cantante estaba nerviosa, quizás Lauren se habia arrepentido de intercambiar números con ella. Pero decidió dar el paso y enviar ella un mensaje.

No sabía que escribir, se pasó media hora mirando su conversación de la noche anterior, fue entonces cuando levantó la vista y vio los dibujos de Wes en su nevera y se acercó a ellos sacando una foto y enviándosela a la otra mujer.

C: Dile a Wes que sus obras de arte tienen un lugar de honor en mi casa.

Pensó que romper el hielo con algo relacionado con el pequeño era la mejor forma de empezar. Observó su móvil durante un buen rato, pero no llegó respuesta alguna. 

Aquella tarde tuvo una sesión de grabación con un productor, y la verdad fue un desastre porque estaba demasiado distraída. Cuando volvió a casa estaba frustrada y se dirigió al estudio de música que había mandado construir en su sótano y se puso a tocar la guitarra tratando de sacarse de la cabeza a Lauren.

La respuesta de la otra mujer no llegó hasta horas más tarde, Camila ya había perdido toda esperanza de que Lauren fuese a contestar y había empezado a prepararse para ir a dormir.

L: Ohhh eso es adorable, mañana le enseñaré la foto. Perdona que no haya contestado antes, estaba trabajando y acabo de llegar a casa y de meter a Wes en la cama, ¿Cómo ha ido tu día?

Por un lado, se alegró de saber que no le había contestado por estar ocupada, no porque la estuviese ignorando, después pensó en que le había enviado el mensaje por la mañana, ¿llevaba tantas horas trabajando sin parar? Era imposible.

C: No te preocupes, no quiero sonar entrometida, pero... ¿llevas todo el día en la cafetería?"

L: A veces hago turnos extra largos.

A Camila no le convenció esa respuesta, y no le gustó la idea de Lauren trabajando durante todo el día.

C: No te quiero molestar entonces, debes estar cansada, pero si mañana tienes un rato ¿podría llamarte?

En las breves conversaciones que habían tenido por mensaje era evidente que se sentían más cómodas hablando en persona, y la cantante pensó que quizás hablar por teléfono sería más fácil que a través de mensajes.

L: ¿Por qué no pasas por aquí? Tengo el día libre.

Camila no pudo evitar sonreír ante la idea de ver a Lauren de nuevo, antes de que pudiese contestar le llegó otro mensaje.

L: Si no estás ocupada claro, si no puedes no pasa nada, estoy segura de que tienes muchas cosas que hacer.

C: Tengo que ir al estudio, pero puedo salir para la hora de comer ¿Qué te parece si llevo una pizza y comemos los tres juntos?

Camila estaba nerviosa, cada cosa que decía a Lauren temía se rechazada por la otra mujer.

L: Suena increíble Camz, nos vemos mañana. Buenas noches ❤️

La joven cantante observó el corazón al final de la frase y suspiró. Quizás Lauren solo quería ser su amiga, pero si ese era el caso tenía que empezar a controlar las mariposas en su estómago.

***

Camila estaba teniendo un mal día. En el estudio había ido bien, mucho mejor que el día anterior. Pero su humor empeoraba por momentos.

Se había arreglado un poco más de lo normal, no quería reconocerlo, pero se había esforzado para estar guapa para cierta mujer de ojos verdes. Había sido reconocida varias veces, se había sacado ya siete fotos con fans, no le disgustaba encontrarse a gente que apoyada su música, pero cuando iba sin guardaespaldas a veces se ponía nerviosa porque sentía que estaba sola ante el peligro. Bajando la cabeza para tratar de pasar desapercibida entró en su pizzería favorita y varios clientes se giraron y se quedaron mirando para ella. Camila no estaba de humor para aquello, solo quería ir a ver a Lauren y a Wes, pero por suerte el dueño la vio antes de que la gente empezase a rodearla y a pedirle fotografías y la escoltó hacia una de las despensas.