#33

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Jungwon corrió hacia el gimnasio de la escuela junto al pequeño Jisung, quien parecía bastante ansioso de pasar tiempo con la princesa de la obra tras los vestidores. El de lindos hoyuelos realmente lo lamentaba por el menor pero era necesario engañarlo para que el plan que tenía en mente funcionará con éxito.

La obra comenzaría en diez minutos exactos, lo que quería decir que no tenía mucho tiempo. Debía posicionarse tras bambalinas para poder tener acceso a lo que necesitaba, no podría recibir la ayuda de Jay, eso estaba claro. Aún así agradecía que le ayudara a pensar en una forma de no perjudicar el trabajo de sus compañeros pero a la vez ayudar a sus amigos. 

El muchacho de lindos hoyuelos ya se había dado por vencido con buscar a Niki quién realmente le hubiera servido de ayuda, pero el chico no aparecía por ningún lugar. No le quedaba otra que arreglárselas como le fuera posible. Estaba tan sumergido en sus pensamientos que ni siquiera notó cuando Jisung lo intentó detener en medio de su carrera, pero al final fue el fuerte agarre en una de sus muñecas lo que hizo que volviera a la realidad.

 -¿Dónde debo ir? ¿Estás seguro que la chica está ahí?- Preguntó el chico con un brillo de ansiedad en sus lindos ojos, una punzada de culpabilidad apareció en el pecho de Jungwon quién decidió apartar la mirada para concentrarse en lo que de verdad importaba en ese momento. 

-Tras el escenario, hay una puerta blanca. Diles que te envía Jungwon para que ayudes a Su con su vestimenta. Su es la chica a la que viste por la puerta, es muy linda- Respondió Jungwon indicándole al pequeño el camino. Jisung asintió con rapidez y camino hacia el lugar. 

-Gracias por tu ayuda, amigo- Dijo el chico despidiéndose con la mano de manera alegre. Jungwon lo observó en silencio y cuando lo vio desaparecer tras el escenario negó con la cabeza. 

-Pobre ingenuo... y pobre Sunoo...- Susurró para luego encogerse de hombros y dirigir su mirada a la entrada del gimnasio donde ya comenzaba a entrar el público de la obra. Jungwon buscó con su mirada la cabellera azabache de Jay, quién caminaba hacia los asientos frente al escenario junto a otros profesores con los que conversaba de manera tranquila. El chico de lindos hoyuelos soltó un gruñido al notar que las mujeres del público y algunas profesoras no dejaban de mirar a su amante como si quisieran devorarlo. Apartó la mirada de manera molesta pero decidió observar nuevamente, cuando lo hizo notó que Jay le estaba devolviendo la mirada. El mayor le guiñó uno de sus ojos a Jungwon quien casi se desmaya al ver aquella acción. ¿Cómo se podía sobrevivir a algo así? 

Las mejillas del muchacho se sonrojaron completamente y sonrió para luego desaparecer tras el telón y correr a esconderse para gritar de la emoción en silencio. Aquello de tener una relación a escondidas con un profesor tan ardiente como Jay realmente le gustaba. Dio un salto asustado cuando notó como las luces del gimnasio se habían apagado dando comienzo a la obra, Jungwon observó nervioso como sus compañeros corrían para cerrar el telón y así ordenar de manera rápida el escenario. 

El menor decidió ayudar, quería que aquello saliera bien... excepto la escena del beso. 

"El primer acto presentaba la historia, una bella princesa era raptada por una bruja malvada que deseaba apoderarse del reino". 

Sunoo había aparecido en la escena caminando de manera tranquila en el escenario, Jungwon tragó saliva al darse cuenta de que su amigo lograba deslumbrar con su apariencia sin ni siquiera proponérselo. Su cabello rubio y corto estaba oculto bajo una larga cabellera de color dorado que sus compañeras de clase habían conseguido en el último minuto, cuando de improvisto Sunoo decidió aparecer el día de la obra con el cabello corto y teñido de un color llamativo. Sus labios estaban más rojos de lo normal y un vestido de color violeta caía adaptándose a la perfección a su delgado cuerpo. Realmente parecía una chica, el público parecía realmente maravillado por su deslumbrante imagen. Probablemente más de uno de los hombres que veían la obra ni siquiera imaginarían que aquella princesa era en realidad un chico. 

"HEY TEACHER" ; jaywonOpowieści tętniące życiem. Odkryj je teraz