Capítulo XCVI

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《En la casa de Juliana》
Al llegar a la casa, Juliana y Adrielle tocaron la puerta principal, mientras que Ruby; Jack y Johari se quedaron esperando en el patio, debajo del árbol.

Adrielle: Estás lista para esto, mi bella flor?
Juliana: Es la única opción para frustrar el matrimonio.
Adrielle: Y lo haces por eso o porque realmente quieres estar conmigo?
Juliana: Sabes que no quiero estar con nadie más que contigo, mi cielo.
Adrielle: (Le da un beso) Toca la puerta entonces.

Juliana, un poco asustada pero decidida, decidió por fin tocar la puerta, la cual se abrió en menos de diez segundos.

Marianne: July! Hija mía! (La Abraza) Dónde te habías metido? Estaba preocupada por ti! Estás bien?
Juliana: Sí, mamá. Estoy bien. Estaba con Henry y Carina.
Marianne: Segura que estás bien?
Juliana: Sí, mamá.
Marianne: Entren, chicas.

《Adentro de la casa》
Marianne: Quieren que les traiga algo para tomar?
Adrielle: Yo puedo ir a buscar un jugo a la cocina.
Juliana: Sí por favor.

Adrielle fue a la cocina, y aprovechó de abrir la puerta trasera que daba al patio donde estaban los piratas. Después volvió al living con un jarrón con jugo y tres vasos.

Marianne: Hija, te tengo una muy buena noticia.

Adrielle enseguida supo cuál era la noticia de Marianne, por lo que le hizo un gesto a Juliana para prepararla para lo que le iba a decir su mamá.

Marianne: Me estuve contactando con distintos reinos vecinos y ya encontré al príncipe perfecto para ti. Ya hay fecha y lugar pactados para tu matrimonio. Solo faltaría confeccionar tu vestido.

Juliana, sin ninguna expresión en su rostro, sirvió jugo en dos vasos, uno para Adrielle y otro para ella, y tomó un sorbo del suyo sin decir nada.

Marianne: No estás contenta, hija?
Juliana: (Toma un sorbo de jugo) De verdad me lo preguntas?
Marianne: Necesito saber tu opinión.
Juliana: Tú sabes que no me quiero casar con un hombre al cual no conozco.
Marianne: Y de dónde vamos a sacar dinero entonces?
Juliana: Fácil, trabaja en algo.
Marianne: Pero hija. Sabes que me estoy poniendo vieja como para trabajar.
Juliana: Yo encuentro que acá tenemos lo justo y necesario para vivir.
Marianne: Y no te gustaría vivir en un palacio?
Juliana: No crees que esta casa es lo suficientemente grande para dos personas y una gran cantidad de trabajadores que limpian, ordenan y cocinan? (Recordando la choza en la Isla Pantano) Yo feliz viviría en una casa mucho más pequeña que esta.
Marianne: Pero no te has puesto a pensar en que diría la gente sobre nosotras si viviéramos en una casa pequeña?
Juliana: Me da lo mismo lo que piense la gente sobre mí. No es mi culpa que a ti te guste vivir rodeada de lujos. Tu dinero no tiene que depender de mí. Tu felicidad no tiene que depender de mí. Lo que a mí me gustaría sería encargarme de mi propia felicidad.
Marianne: (Con una voz triste) Acaso no eres feliz acá conmigo.
Juliana: (Con una voz más calmada) Claro que lo soy. Pero también me siento presionada y obligada a hacer cosas que no me hacen feliz.
Marianne: Segura que no te quieres casar? A mí me encantaría ver algún día a mi hija caminando por el altar, vestida de blanco.
Juliana: No lo sé, mamá. Por ahora no estoy interesada. Pero si algún día me llego a casar, no va a ser con un hombre al cual yo desconozco. (Mirando a Adrielle) Me gustaría que fuera con alguien a quien yo realmente estimo.
Adrielle: (Le sonríe a Juliana)
Marianne: (A Juliana) Y ya conoces a ese alguien?
Juliana: Por qué estás tan interesada en que me case pronto, ma?
Marianne: Todas las mujeres de tu edad ya se están comprometiendo.
Juliana: Pero yo no soy todas las mujeres.
Marianne: Pero te gusta alguien acaso, ya que no te quieres casar con este príncipe, que además de rico, es guapo?
Juliana: No mamá. No me gusta alguien. Estoy completamente enamorada.
Marianne: Cómo se llama el afortunado? Lo conozco?
Juliana: (Mira a Adrielle)
Adrielle: (Asiente)
Juliana: Sí, mamá. La conoces.

Piratas Del Caribe /// Las Llaves Del InfiernoDove le storie prendono vita. Scoprilo ora